La Compleja vida de las Mujeres con Poder

Oh My Rao

Lena podría acostumbrarse a esto. Ella y Kara llevaban saliendo oficialmente poco más de una semana, y éste era el segundo fin de semana consecutivo en el que Kara la sorprendía con un vuelo a una cita panorámica improvisada. Esta vez, Supergirl la había llevado a un pequeño y adorable claro en el bosque al este de National City. Había una suave manta y una cesta de picnic esperándolas. Lena se sintió como si fuera la única que podía flotar; no tenía ni idea de que Kara fuera tan romántica, pero estaba muy agradecida por ello.

Le dio un suave beso a Kara, luego encendió las velas alrededor del borde de la manta y se acomodó en la manta mientras la rubia se ponía su ropa informal para la cita. Lena sonrió a su novia. Sinceramente, no le importaría tontear un poco con Supergirl, pero adoraba absolutamente a Kara con su ropa actual, o con cualquier ropa en realidad. Kara se había puesto un jersey verde oliva sobre una camiseta blanca abotonada que colgaba perfectamente debajo del jersey, junto con unos vaqueros ajustados y sus encantadores botines que hacían juego con el tono del jersey.

Kara se acomodó a su izquierda en la manta, y las dos se recostaron, con las cabezas separadas por centímetros y los dedos entrelazados mientras miraban un cielo claro lleno de estrellas. El pulgar de Lena acariciaba suavemente el de Kara, y ésta murmuró: "Sabes, me haces sentir muy especial, cariño".

Ninguna de las dos se movió, todavía disfrutando de las estrellas, pero ella pudo sentir la sonrisa de su novia como respuesta. Mirando al cielo, de repente tuvo una idea. "¿Kara? ¿Podemos ver a Rao desde aquí? Ese era el nombre de tu sol rojo, ¿no?". La mente de Lena vagó brevemente hacia las lámparas de sol rojo con las que había sorprendido a Kara en su dormitorio el fin de semana pasado. La morena había confiado en que el sexo acabaría estando sobre la mesa, y ella misma diseñó las lámparas, plenamente consciente de que los poderes de Kara procedían de la radiación solar amarilla. Estaba muy entusiasmada con la idea de incorporar los poderes de la heroína a su vida sexual, pero para su primera vez, era importante que ninguno de los dos tuviera que guardarse nada. Se sonrojó un poco ante este feliz pensamiento y volvió a centrar su atención en su novia.

Miró a su lado, y los ojos de Kara buscaban intensamente el cielo. Su mano apretó más fuerte la de Lena mientras sus ojos se fijaban en lo que debía ser Rao. Lena sonrió cuando Kara se acercó un poco más y levantó la mano de Lena entre las suyas mientras señalaba un poco hacia arriba y hacia la derecha. "Rao está ahí", señalando un grupo de estrellas que Lena no reconocía.

Lena entrecerró los ojos un poco, notando que una de las estrellas parecía un poco más grande y un poco menos brillante. "¿La más grande y ligeramente más oscura?" Kara asintió. Lena se alegró de tener una idea, aunque fuera abstracta, de la procedencia de la kriptoniana. Aun así, le dolía el corazón al pensar en toda la pérdida, el dolor, por el que había pasado Kara. Pasó el brazo derecho por encima de su cuerpo y acarició el brazo de Kara con calma. "¿Estás bien hablando de Krypton?"

Kara se puso rígida. Sus ojos se volvieron distantes y Lena esperó pacientemente mientras su mente trabajaba a través de alguna confusión interna que Lena sólo podía adivinar. Cuando sus ojos se volvieron hacia Lena, sus profundidades acuosas eran más turbulentas de lo que Lena estaba acostumbrada a ver en su burbujeante novia. "Krypton es un tema difícil para mí. Lo cual, duh, estoy segura de que lo sabías. Pero no es sólo... lo que le pasó a mi mundo. Han pasado muchas cosas desde que me convertí en Supergirl que me han llevado a cuestionar mucho sobre mi cultura y mi familia. Todavía lo estoy procesando todo".

Lena ahuecó la mandíbula de Kara, pero antes de que pudiera darle una salida, la rubia giró la cabeza para apretar un beso en la palma de la mano de Lena. "No pasa nada. A veces es difícil, pero me encanta poder compartir por fin mi pasado contigo. Hablando de eso, creo que nunca te he dicho mi verdadero nombre". Kara se movió y se giró para mirar a Lena de frente antes de explicarle: "Soy Kara Zor-El".