capítulo 35: no es lo que tú crees

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Martes, día 1 para entrenar...

Llamenlo suerte, destino o complot de escritora pero los alumnos de toda U.A tendrían vacaciones durante toda esa semana, osea que entrarían a clases el otro lunes, el lunes en el que toga vendría a por ella

Se despertó temprano para salir a trotar, llego a darle la vuelta a absolutamente todo el terreno de la escuela, encontrando en el camino muchos lugares hermosos

También debido a lo temprano que era, gozó de mucha paz y tranquilidad para pensar en cómo seguiria ejecutando su plan de ejercicios

Ya le había pedido permiso a su tutor y al rubio gritón para entrenar en el gimnasio, claro que cuando ellos le preguntaron la razón ella solo dijo que se trataba de una autoevaluación que se realizaría para poder marcarse un entrenamiento apropiado durante toda esa semana

Aunque al llegar de vuelta a la residencia pudo ver a todos sus compañeros desayunando en el comedor, intento pasar desapercibida para bañarse y cambiarse pero no pudo

- cara de ángel, siéntate a desayunar - escucho la orden, había olvidado que le tocaba cocinar al cenizo

Se reviró mostrando una sonrisa nerviosa - d-debo ir a bañarme - susurró con pena

El cenizo la miro de pies a cabeza, dándose cuenta de que la chica en lugar de haber bajado de su habitación había llegado de hacer ejercicio, por lo que asintió - tienes 10 minutos antes de que vaya a buscarte yo mismo - amenazó sin notar exactamente lo que dijo, solo fue cuando noto que varios lo veían con miradas juguetonas que lo noto - pero no como están pensando, enfermos! - volteó para ver a la castaña pero está ya se había ido

Cómo se lo ordenaron bajo a los 10 minutos, vistiendo aún un conjunto deportivo porque planeaba entrenar y aunque aquello normalmente sería algo que llamaría la atención de todos, al ser vacaciones no planeadas eran varios los alumnos que se quedarían en U.A a entrenar para aprovechar ese tiempo en perfeccionar técnicas

/Los que se quedan:
Ochaco, Bakugo, Kirishima, Kaminari, Midoriya, Todoroki y Sero/

Sabía que en el gimnasio podría entrenar su quirk pero también sabía que allí la vigilarian, ya sea su tutor o el rubio gritón, aunque algo le decía que también debía cuidarse del cenizo

Se quedó un rato conversando con sus amigas, riendo y planeando ir en 2 horas al centro comercial con los chicos y luego hacer durante esa noche una pijamada para despedir a sus amigas que se irían al día siguiente a sus hogares

Entro a su habitación, ordenandola para después ponerse a medir el espacio libre - bien, necesito una barra de metal con soportes largos para el techo, unas colchonetas para ejercitar, unos pares de pesas y... - escaneaba su habitación buscando algo que le hiciera falta - una soga - hace mucho que no saltaba, tal vez le ayudaría a tomar impulsos a la hora de usar su quirk

Se vistió y se arregló lo mejor que pudo, con una lindo falda rosa acompañada de una blusita de tiras blancas junto a unas zapatillas color rosa palo con su cabello suelto

Vio la hora en su teléfono, estaban sobre la hora acordada para salir al centro comercial por lo que abrió rápidamente la puerta

Aunque jamás espero ver al cenizo de pie frente a su puerta - hasta que por fin sales - le reclamo con su usual ceño fruncido

- ¿Que haces aquí? - pregunto confundida, nunca quedaron en verse, es más, ni siquiera habían hablado después de que él le diera de desayunar

El la miro con una ceja levantada - la mapache me dijo que viniera por ti - informo empezando a caminar hacia el ascensor - muévete o te dejo - amenazó

Total y completamente jodidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora