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Ambos cerramos las puertas del auto en un empujón sincronizado. Entonces sale Mark con una copa llena de sangre para dársela a Doyoung, él la toma dándole un sorbo, los tres avanzan coordinados hacia nosotros.

- Que ridículos se ven los tres. - subo los escalones de entrada.

- Hola, soy Jaehyun. - les sonríe, les da una reverencia de saludo.

Los tres se quitan los lentes, los miro extrañado de que estén tan sincronizados.

- Supongo que sabes que somos. - le da otro sorbo a su copa. - ¿no estas asustado? Podríamos matarte. - lo dice de manera seria y segura.

- Oye. - reprocho.

- No lo tengo, Taeyong habla muchísimo de ustedes, dice que eres un excelente cantante y actor, claro, no puedo olvidar el gran corazón que dice que tienes, el amable Doyoung, su mejor amigo. Tu eres Haechan ¿no? – lo mira con una sonrisa- el dulce sol de esta casa, escuché que tienes una voz muy bonita y que tocas el piano increíble, aprendí un poco tal vez podríamos ser amigo y tocar juntos. –sonríe, mira al otro lado- Ahhh casi olvido a Mark, me conto que escribes fantástico, además de ser un excelente guitarrista, escuche que también tienes un muy buen sentido del humor. Es verdad, debería temerles, pero no lo hago. -

- Me agrada. – dice Haechan.

- También me agrada. - le secunda Mark.

Miro un largo instante a Doyoung, él rueda los ojos.

- Bien, también me agrada, creo que es impresionante que sea muy valiente o muy estúpido. - le golpeo en el hombro.

Jae se ríe.

- Son muy agradables, es un gusto conocerlos por fin. - expresa con dulzura.

- También es un gusto para nosotros. - dice Haechan- ¿te gustan las fotos verdad? - Jae asiente. – ven, tenemos muchísimas. - mi amigo se lo lleva muy rápido seguido por Mark.

- Es alguien agradable. - se bebe todo el contenido de su copa un trago. - creí que se asustaría ¿de verdad le hablas de nosotros? - me mira con curiosidad.

- Por supuesto, somos familia. ¿Dónde está Yuta? – suspira.

- Salió, dijo que no quería estar aquí, creo que está un poco herido, por esas veces que le prohibimos fraternizar. - me pone una mano sobre el hombro. - no te molestes. -

- No estoy molesto, hablare con el cuándo vuelva. Solo esperamos para que no haga tonterías. – asiente a mis palabras.

Ambos entramos con los demás.

En nuestra casa había muchísimas cosas para ver entre las pinturas y las fotografías solo era el principio de todo. Al parecer a Jae le encantaba todo, Haechan le había bajado los múltiples álbumes y cajas con nuestras fotos, hubo un tiempo en el que viajábamos muchísimo, habíamos recorrido muchas partes del mundo juntos y lo habíamos fotografiado. Sabíamos que podíamos regresar, pero el mundo cambiaba aprisa y un recuerdo de los viejos tiempos nunca estuvo mal. Se le iluminaba la cara cada vez que mis amigos le contaban historias sobre el mundo, me encantaba verlo asi.

Escuche la puerta del vivero abrirse. Yuta.

- Ahora vuelvo, cuídenlo por mí. - los señalo, tomo la mano de Jae. - puedo escucharte desde muy lejos. - intento tranquilizarlo, no desconfió de ellos, pero no quería que se preocupara.

- Está bien, no estoy asustado. - asegura.

- Bien, ya regreso. - suelto su mano.

SEDIENTODonde viven las historias. Descúbrelo ahora