La psicopatía de Darek [+21] ✓ (Borrador 2021)

23. Organizarlo todo.

Duncan Lombardi

Organizar todo esto es una gran putada, pero hay que hacerlo. Yo me encargo personalmente de que nuestros pequeños soldados, como los solemos llamar, se enteren de todo el tema, para ello me están esperando fuera. Ajusto mi corbata, mirándome al espejo, antes de salir a hablar con todos ellos.

—¿Qué día es mañana? —les pregunto, mirando a todos y a cada uno de ellos con seriedad—. Exacto, mañana es el gran día —les recuerdo, por si se han olvidado.

—Sí, señor —corean ellos.

Sonrío.

—Todo tiene que salir perfectamente.

—Sí, señor —dicen, al unísono.

—Darek Lombardi, volverá —les informo, con una amplia sonrisa—. ¿Habéis echado de menos a vuestro jefe? —les pregunto, con una gran curiosidad.

Hay unos segundos de silencio, todos están intercambiando unas extrañas y temerosas miradas, por si responden mal. Normal que teman a Darek, normal que me quieran a mí de jefe en vez de a él.

—Sí, señor —responden algunos, aunque no todos.

—Ya, ya sé que me preferís a mí, ¿cómo no hacerlo? —pregunto, sin ocultar mi sonrisa—. El plan es algo arriesgado, debido al poco tiempo de preparación y la tormenta que se avecina a la isla de Barrow —les cuento, apoyando mis manos en uno de los sofás—. Sé que no será fácil, sé que algunos caeréis, sé que Darek puede no salir con vida al igual que uno de los aquí presentes. Si uno cae, no habrá vuelta atrás —les advierto, viendo como algunos asienten con la cabeza—. Si cae alguno de mis hermanos, habrá que volver para recogerlo. —Suena egoísta, pero no pienso dejar a ninguno de mis hermanos ahí tirados.

—¿Helicóptero o lancha? —pregunta uno de ellos.

—Ambos, lancha para el plan de escape y helicóptero para apoyo aéreo. Si hay complicaciones lo necesitaré, Snake —miro a uno de mis más fieles hombres—. Usted es un gran piloto, pero le advierto del gran riesgo por los fuertes vientos que se avecinan, además de posibles disparos.

—No se preocupe, si morimos, será por una gran causa —sonríe él, con valentía—. Para eso estamos aquí, ¿no? Para morir por el líder si hace falta.

—¡Sí! —gritan todos, de acuerdo con él.

—Me alegra oír eso —digo, sinceramente—. En el helicóptero iréis Kilian, Gabby y Coraline —observo a mi mejor francotiradora—. Confío en vosotros tres para disparar a matar en caso de emergencia —los cuatro asienten con la cabeza—. La lancha la conducirá mi hermano Dash, así que en eso no hay problema.

Es uno de los mejores conductores, nos vendrá bien su ayuda.

—Habrá otra lancha que se acercará por la playa, para que, en caso de emergencia, tener más apoyo. La conducirá Henry, —lo miro y él asiente—, junto a Evelyn, Gia, Jacob y Sebastián —formo así los grupos—. Si hay suerte y llegamos aquí, a la ciudad, en el camión estará Larry, conduciéndolo para la huida en carretera.

El plan, muy sencillo, ir de sigilosos a la isla de Barrow en nuestra lancha. Antes de que el vigilante del muelle dé aviso a los demás vigilantes, le disparamos con un fusil francotirador con silenciador. Tan solo habrá uno, así que de eso no hay mucho problema. Los vigilantes, Darek aseguró que se encargaría él, así que esperemos que tampoco haya problema. Pensamos también en atrancar la puerta del hotel y los demás lugares donde se hospedan los trabajadores de la cárcel, para que no puedan saber qué ocurre. No deben enterarse, el muelle está muy lejos del hotel, en la otra punta de la isla.