Heather. ★ Taekook ★

24. (Extra)

Me sentía incapaz de ocultar mi sonrisa, quería disimular que había estado con la persona que más... que era todo para mí.

Fue preocupante cuando mi padre me llamó y encontré a Tzuyu, sus padres y los míos.

—¿Qué hacen todos aquí? —Mi madre me reprendió y yo esta vez los saludé. —¿Qué está pasando? —No entendía. Mi sonrisa poco a poco se desvanecía. 

Mi papá me entregó una pequeña carta que estaba abierta, saqué el papel de su interior y yo no lo comprendía. No quise hacerlo, ¿por qué? Porque una broma debía ser.

Pero sus rostros no me lo mostraban así, era el único que creía que se trataba de una broma.

—Papá, esto no es cierto. —y él estaba furioso conmigo, yo también. —Tzuyu, no juegues así, por favor. —parecía un idiota. Ella había llorado.

—A partir de ahora Taehyung vas a cuidar de ella y de su bebé. —por eso había vuelto antes, regresó porque días antes que se fuera yo estuve con ella. —Querías ser un hombre y vas a serlo.

Debí ser valiente y decirle que sí, pero me desplomé sobre el suelo. Tzuyu corrió hacia mí y me abrazó, diciéndome que lo entendía, que entendía mi dolor, pero que si yo la ayudaba todo sería mas fácil.

Y por una parte ella lo sabía, pero no sabía que eso significa otras cosas. Yo le conté que ya había dejado de quererla, que había alguien más en mi vida, pero nunca mencioné a Jungkook. No quería que ellos discutieran por mi culpa, sé que se tenían bastante cariño y que Jungkook luchó para no mirar en mi dirección.

Lo sé bien, sé que ella lloró en mi hombro y sé que le rompí el corazón. Sabía que eso significaba rompérselo a Jungkook, yo no podía decirle que Tzuyu estaba embarazada y que se quedara a mi lado.

¿Cómo podría decirle que me espere? Tendré un bebé con ella, tendría que pasar mucho tiempo con ellos porque no puedo abandonarlos, tampoco quiero dejar a Jungkook, pero sé que no tengo opción. Ni siquiera se trata de ellos dos, se trata de un bebé que no tiene culpa de nada.

Pensé en el aborto, por supuesto. Ni Tzuyu ni yo queríamos un hijo, era demasiado pronto a nuestra edad, pero supe que era demasiado tarde debido a la formación del bebé y que nuestros padres eran bastante tradicionales como para permitirlo.

Tal vez se estaba tratando del universo, que estaba haciendo trizas porque dañé una amistad y la engañé.

Escogí al bebé, no quería que creciera sin un padre. ¿Arruinó mi vida? No, era algo que yo había hecho por mi propia cuenta, por mi indecisión todo se derrumbó.

—Lo siento por... por quien sea que ames. —no le dije si era mujer u hombre, lo sentía tanto. —No fue a propósito, no fue así.

—Lo sé Tzuyu. —ella se recostó sobre mi hombro y lloramos abrazados toda la noche en mi habitación.

Debía conseguir un trabajo, Tzuyu conseguiría uno que no le fatigara tanto y tendríamos que dejar la universidad por un tiempo.

Sus sueños y los míos dejaron de importar, importaba que aquel bebé estuviera bien y tuviera una familia, aunque sea con dos personas que dejaron de quererse hace tiempo.

Cuando le dije aquellas palabras a Jungkook me desgarró el alma, quise decirle que era mentira, que Tzuyu se embarazó por mi culpa, que debía asumir una paternidad de la cual no estaba listo, que ya no podía estar a su lado como se lo prometí.

No podía, tal vez él podría decirme que aún podía arreglarlo. Tanto él como yo sabíamos que no, sus padres lo sabrían y se alejaría de todos modos.