The Model [Changlix]

VIII

Toda la historia será narrada por la escritora.

A medida que la cena avanzaba, la atmósfera se volvió cada vez más relajada, como si el mundo exterior se hubiera desvanecido por completo. Felix empezó a abrirse más, compartiendo historias de su infancia y algunas anécdotas divertidas de su vida en la industria. ChangBin lo escuchaba atento, su mirada sincera y cómplice, sintiendo una conexión que nunca había sentido con nadie más en tan poco tiempo.

"¿Y tú? ¿Qué es lo que más disfrutas de todo esto?", preguntó Felix mientras tomaba un sorbo de su bebida.

ChangBin se quedó pensativo por un momento antes de responder. "Supongo que lo que más disfruto es poder expresarme a través de la música. Pero lo que realmente me llena es cuando veo cómo mi música toca a las personas, cómo logra conectarlas con sus emociones. Es un poco intimidante, pero también hermoso"

Felix asintió, comprendiendo perfectamente lo que quería decir. "Lo entiendo. Hay algo especial en eso. A veces, cuando estoy en una sesión de fotos o en el escenario, me pregunto si todo lo que hago realmente resuena con la gente. Y luego, cuando veo sus reacciones... No sé, me siento más agradecido"

ChangBin lo miró fijamente, notando la sinceridad en sus palabras. De alguna manera, sintió que esa cena no era sólo una simple salida entre colegas de la industria. Había algo más, una chispa que, aunque sutil, comenzaba a arder entre ambos.

La conversación continuó fluyendo, entre risas y confesiones, mientras se servía el postre. Felix se sentía cómodo, más relajado de lo que había estado en mucho tiempo. Y ChangBin, por su parte, sentía que algo especial estaba floreciendo en ese encuentro.

"Ha sido una noche increíble", dijo Felix finalmente, apoyando los codos en la mesa y mirándolo directamente a los ojos.

"Sí, lo ha sido", respondió ChangBin, sin dejar de sonreír. "Siento que... Estamos conectando de una forma que no esperaba. No sé si suena raro, pero me gusta estar contigo"

Felix sonrió, con el corazón latiendo un poco más rápido. "No es raro. Creo que yo también siento lo mismo"

Ambos se quedaron en silencio por un momento, dejando que esa confesión se asentara entre ellos. Había algo en el aire, una corriente sutil que los conectaba más allá de las palabras.

ChangBin rompió el silencio, su voz suave pero firme. "Felix, me alegra que hayamos decidido cenar juntos. Creo que esto es sólo el comienzo"

Felix lo miró, con una mezcla de sorpresa y expectativa en su rostro. Algo más profundo estaba naciendo entre ellos, y aunque ninguno lo dijo en voz alta, ambos lo sentían.

La conversación entre Felix y ChangBin continuó fluyendo como un río en calma, pero cada vez se sentía más cargada de significado. El restaurante se había vaciado lentamente, y ellos seguían hablando, como si el tiempo se hubiera detenido en ese rincón de la ciudad. Habían compartido tantas cosas en esas pocas horas, que parecía que se conocieran de toda la vida.

ChangBin se recostó un poco en su silla, cruzando los brazos mientras miraba a Felix con una sonrisa suave. "Realmente me alegra que nos hayamos encontrado hoy. Este tipo de noches no suelen ser comunes para mí, ¿Sabes? Estoy acostumbrado a todo el ajetreo y la prisa, a las agendas apretadas... Pero esta cena fue algo diferente. Algo más... Tranquilo, pero emocionante al mismo tiempo"

Felix lo escuchaba con atención, sintiendo que esas palabras resonaban profundamente en él. "Yo también lo sentí así", admitió con una leve sonrisa, jugando distraídamente con el borde de su vaso. "No sé, quizá es porque estamos en un lugar donde nadie nos conoce realmente. Es como si pudiéramos ser nosotros mismos, sin las máscaras de siempre"