Let's Preted ~ |Bakugou x Denki|

Capítulo 10: Se hará a la voluntad de Bakugou Katsuki

-¿Sabes donde está Kaminari?- preguntó Bakugou.

Empezaba a odiarse por la cantidad de tiempo que le tomaba aceptar las cosas, pero por fin lo había conseguido.

Si, estaba muy enamorado de Denki Kaminari. Si, quería salir con él de verdad. Si, se preocupada por el y notaba su ausencia durante los últimos días.

No había visto a Denki desde esa noche en la sala común. Al principio pensó que lo estaba evitando y dado lo culpable que se sentía después de oír que lo estaba lastimando, no le había dado mucha importancia al asunto.

Pero después notó que en realidad no aparecía por ningún lado. Nunca lo veía en el comedor, ni en los pasillos ni en ningún lado. Y estaba preocupado.

Así que mandó su orgullo a la mierda y fue a preguntarle a Kirishima.

-¿Cómo dices?

-¿Donde está Kaminari? No lo he visto en días- el pelirrojo lo miró con sorpresa.

-¿Estás bromeando? Dime que estas bromeando.

-Mira, sé que fui una mierda pero quiero arreglarlo todo y pedirle que sea mi novio pero no sé donde está.

La expresión de Eijiro pasó a una más seria, y por algún motivo el cenizo sintió que no le iba a gustar la respuesta.

-Bakugou- dijo con lentitud- Kaminari volvió a Francia hace casi una semana.

Y ahí todo su mundo se fue al carajo.

-¿Qué?- ni siquiera gritó, fue como si lo hubieran golpeado en el estómago.

-Si, se despidió de todos por mensaje aunque...- Kirishima pareció recordar algo- Me pidió que te diera algo.

-¿Qué es?

-Ve a su cuarto, lo dejó ahí. Solo me pidió que me asegurara que nadie más lo sacara.

Salió disparado de su habitación para dirigirse corriendo a la de Denki, rezando interiormente que todo fuera una broma y que el rubio siguiera ahí.

Llegó a la puerta y abrió, pues no tenía el seguro.

La habitación no tenía nada, solo el escritorio, la cómoda y la cama con el colchón.

No estaban los posters, ni los cuadernos, ni las plantas ni Denki. Era una habitación triste y vacía, con las paredes blancas y sin rastro de toda la vitalidad que antes emanaban. Porque Denki ya no estaba ahí para emitirla.

Cerró la puerta y se paseó por el cuarto, buscando lo que sea que pudo haberle dejado la única persona de la que se había enamorado.

No había nada en el escritorio ni en los cajones de la cómoda, nada en el armario ni detrás del radiador. No había nada.

Y entonces recordó

"En Francia solía esconder cosas debajo del colchón de mi cama" la voz de Denki sonó fuerte y clara desde su memoria "Dinero, cuadernos, cosas que no quería que mi mamá encontrara".

Se lanzó al colchón de la cama y lo levantó. Había una libreta.

La agarró y se sentó en el suelo para ojearla. Al principio eran dibujos cualquiera, personas, lugares, una que otra planta. Pero más o menos a la mitad, Katsuki pasó a ser el protagonista de casi todas las hojas.

Vio que había pequeñas anotaciones esparcidas junto con los dibujos. Un par estaban en japonés pero la gran mayoría estaba en francés, así que sacó su teléfono y empezó a traducir.