Animal Girl - Boku No Hero Académica

°Capítulo 37°

Al fin habían logrado salir de aquel bosque, encontrándose con un auto donde estaban Toshinori y Kazuma, quienes le abrieron la puerta a los recién llegados y partir cuanto antes a la UA. Cuando estaban subiendo, Kane fue separado de Nyoko por Bakugou, pues ahora el había entrado con la chica en brazos al automóvil, confundiendo a todos menos Aizawa.

Kazuma: ¿Y tu eres?

Bakugou: -lo mira mal- Que te importa...

Kane: Relaja la raja, Bakugou...es amigo y compañero de Nyoko.

El chico miró al rubio ceniza, viendo como este miraba detenidamente a la chica que tenia en su regazo, mientras con sus dedos jugaba con las puntas de los cabellos claros de la misma, el de ojos azules miró cuestionando al de ojos magenta, mas este solo se encogió de hombros; aunque tampoco sabía como decirle que, en realidad, el de orbes rojos estaba enamorado de ella sin que este se le activara su modo hermano sobreprotector.

Toshinori: Nos tenían a todos preocupados, pero díganme, ¿cómo les fue?¿pasó algo?

Aizawa: Una infinidad de cosa...conocimos a dos aldeas con sus respectivos alfas, encontramos a este pelirrojo con Nyoko, quien es su secuestrador...

Kane: -mira la ventana con un puchero- Ya pedí perdón... -murmura-

Kazuma: Como siempre, vas al extremo.

Kane: Entonces dime una forma en que lo hubieras hecho para no ser descubierto por los de esa organización.

Kazuma: -revuelve su cabello- Buen punto, si le hablabas así de repente, tal vez pudieron haber sido descubiertos y a saber que iba a pasar.

Aizawa: ¿Entonces fue una pantalla contra esos bandidos?

Kane: Bandidos no sería el termino que utilizaría.

Bakugou: -lo mira de reojo- ¿Asesinos y psicópatas esta mejor?

Kane: Mejor...volviendo al tema, por lo que yo sé, logramos hacer una alianza con las aldeas del Rubí, Zafiro y Diamante.

Bakugou: También el de la aldea del Ámbar.

Los dos chicos se sorprendieron ante lo dicho del contrario, cuestionando con la mirada al mismo, quien suspiró cansado, si ellos seguían así de rencoroso, no llegarían a nada con el plan de Nyoko.

Bakugou: Cuando ella fue con la alfa, escuché el porque odias a la aldea del Ámbar, fue por lo de tu hermana...pero ellos habían expulsado a esos malnacidos porque traicionaron a todos, hasta a la antigua alfa de muchos siglos atrás. 

Kane: ¿Y qué te hizo pensar de que hablaba con la verdad?

Bakugou: Porque Nyoko sabe cuando alguien miente por su particularidad, tiene los instintos de los animales y ellos son capaces de sentir eso, por eso siempre ella sabe cuando alguno de nosotros ocultamos algo de ella.

Kazuma: -friega su rosto- Había olvidado eso...tal parece que la conoces muy bien, no será que tu...

Bakugou: -lo mira fijamente- ¿Yo qué?

Kazuma: -entrecierra sus ojos- ¿Te gusta?

Al rubio se le tiñeron levemente las mejillas ante esa pregunta pero dibujó una sonrisa ladina sin despegar la mirada del muchacho.

Bakugou: ¿Algún problema con eso?

Kane: Es...algo sobreprotector con ella.

Bakugou: Pues lástima, no pienso rendirme.

Shinso: Quien lo diría, el chico explosivo se enamoró de la alfa de la aldea del Jade.

Bakugou: -murmura molesto- ¿Quieres pelear?

Toshinori: -preocupado- Tranquilo jóvenes, han de estar cansados, así que irán a descansar y dentro de dos día hablaremos mejor, además, ustedes dos deben hacer su examen de licencia junto al joven Todoroki.

Los demás asintieron, tenía razón, ya estaba anocheciendo y lo mas importante era descansar, por lo que cuando llegaron, todos fueron a sus respectivas habitaciones. Bakugou decidió llevarla a su habitación, pues no quería que cuando ella despertara, se asustara o algo malo pase. La dejo en su cama para después irse a duchar, pero antes de irse, notó como la misma se movió levemente para después abrir los ojos, mirando algo cansada al contrario.

Nyoko: ¿Dónde...dónde estamos?

Bakugou: Mejor ve a ducharte, vestirte y vuelves aquí.

Luego del pedido del rubio ceniza, ella decidió acatarlo lenta y silenciosamente, pues todos ya estaban durmiendo. Minutos después, ella llegó ya completamente aseada y vestida de una remera blanca simple y unos shorts negros cortos para dormir, se sentó en la cama mientras miraba a la nada, por lo que recordaba, estaba por tener un ataque cuando sintió que alguien la noqueó.

A veces, el recordar su pasado la hacía perder el control de su propio cuerpo, en serio no quería de que esa noche volviera a ocurrir después de siglos del suceso de la Aldea del Jade, el solo pensar que las demás aldeas y los héroes estaban en peligro, la hacía sentir mas impotente; se suponía que los de la aldea de Jade son los protectores y escudo de todas las aldeas por ser los mas relacionados a la naturaleza pero fallaron.

Un zumbido agudo se hizo presente en su mente, empezó a estirar levemente su cabellera sin abrir los ojos, no quería recordar nada por lo menos un día pero estaba perdida y no sabía que hacer, ya que a pesar de ser mas madura, no quitaba el hecho de que la soledad la mata silenciosamente sin que nadie note; necesitaba algo o alguien que le sacara de ese pozo de malos recuerdos pero no quería preocupar o molestar a nadie.

Al estar tan sumida en sus pensamientos y preocupaciones, no dio con la presencia de otra persona en la habitación, quien se arrodillo en frente de ella para luego cubrir sutilmente los oídos, haciendo sobresaltar a la chica, quien poco a poco ya no escuchaba el zumbido molesto hasta que desapareció.

Bakugou: ¿Mejor?

Allí entendió lo que una vez le dijo Kane, había alguien que le permite liberar su poder y que estaba siempre con ella, la hacía sentar cabeza y ayudaba a tranquilizarse inconscientemente, y esa persona era el rubio ceniza que estaba frente suyo, mirándola seria pero atentamente. Al estar tan sumida en sus pensamientos y en los ojos del chico, no se dio cuenta cuando ella sostuvo las mejillas del contrario para acercarlo y besarlo de sorpresa.