° Capítulo 32 °

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La noche se hizo presente en la Aldea del Ámbar, los tres invitados ya estaban en sus correspondientes habitaciones que la princesa Yua les ofreció, uno para el mayor y uno a los dos menores, pues como ya era tarde no querían que se perdieran.
Nyoko era la única que aún no dormía, pues estaba hablando con Yuu ara que todos los que pertenecían a la Aldea del Jade se reunieran, en especial sus amigos de infancia.
Cuando terminó, suspiró mientras veía la luna desde la ventana, de repente, sintió como dos brazos la levantaron de la butaca para cargarla hasta la cama que le correspondía.

Bakugou: -la mira serio- no voy a lidiar con una malhumorada por no dormir
Nyoko: tranquilo, solo estaba hablando...
Bakugou: -levanta una ceja- ¿con la luna?
Nyoko: -rueda los ojos- con Yuu, uno de mis amigos de infancia, él tiene de habilidad Telepaty, ahora iba a dormir...
Bakugou: -voltea- como sea, ya es tarde para hablar con un chico, hubieras hablado conmigo o con la bendita almohada...-se acuesta y le da la espalda-

La chica lo miró confundida ante aquella actitud, ¿acaso estaba... celoso? Una pequeña sonrisa se formó en sus labios para luego ir hasta la cama del chico, quien al sentir que la cama se movió por la chica, se tensó un poco.
El silencio era agobiante para él, como estaba de espaldas le era imposible saber que hacía la contraria y eso de cierta forma le ponía nervioso, pues el que este cerca suyo lo volvía algo ansioso, y todo eso por gustarle la rubia.

Bakugou: ¿qué quieres?
Nyoko: que me voltees a ver y me digas que estas celoso...

Ante eso, el rubio ceniza se sentó de golpe en la cama con una expresión entre nerviosa y enojada.

Bakugou: ja, ¿por qué tendría que ponerme celoso?
Nyoko: mmm, no lo se, me voy para preguntarle a Yuu -se levanta-
Bakugou: -la agarra de la muñeca- tu no vas a ningún lado...

En un movimiento rápido, el chico acostó a la chica mientras que él estaba encima de la misma sin aplastarla, la fémina se sorprendió ante eso, no era lo que se imaginaba que pasaría.

Nyoko: entonces admites que estabas celoso...
Bakugou: ¡¿y qué si es así?! Ya te dije que me gustas y me dices eso.
Nyoko: solo le dije que todos se reunieran y fuera a la UA para que conozcan a los demás héroes...

El chico al escuchar eso, se avergonzó por su forma de actuar, lo hizo sin pensar y había especulado cosas sin saber.

Nyoko: sabes, creo que deberías preguntar primero...
Bakugou: -mira otro lado- calla...

Ella sostuvo suavemente con sus manos el rostro del contrario para que la mirara, admitía que de cierta forma le gustaba la sinceridad del chico pero el tema era que los dos no se miraban de la misma forma.
El de ojos rubí la miraba con cierto cariño y aprecio que ella desconocía por completo, de alguna forma él se había fijado en su persona sin saber cómo y cuándo empezó aquello; mientras que la de ojos esmeralda lo veía con admiración y confianza que casi siempre se lo demostraba al chico, pero ella no sentía lo mismo que él, nunca se había enamorado de alguien, por lo que no sabia de que se trataba ni como era.
Bakugou y Nyoko se quedaron tan embelesados con los ojos del otro que no se dieron cuenta que se estaban acercando tanto, al punto de que sus labios rozaron, donde recién cayeron en cuenta.

Bakugou: -susurra- al diablo...

Sin poder controlar más su impulso y deseo, la beso sin dejar tiempo de reaccionar a la chica, quien se sorprendió ante tal acción que, de alguna manera, le gustaba, era la segunda vez que sentía como si se derritiera, era tan cálido y confortante como también adictivo y necesario.
El dulce y sueve beso empezó a tornarse a uno necesitado y cálido, la lengua del chico se volvió un intruso en la boca de la chica, quien empezaba a sofocarse ante esa nueva experiencia que a pesar de gustarle la estaba, por alguna extraña razón, calentando.
Al ya ser necesario el aire, él se alejó a penas unos pocos centímetros de los labios de ella, quería hacerlo de nuevo pero la fémina lo detuvo al colocar sus manos sobre la boca del chico, quien solo la miró confundido hasta que pudo ver como estaba ella.
Decir que estaba sonrojada era poco, le había gustado pero se sentía culpable por darle esperanzas al rubio cuando ella no lo quería de la misma forma que él, o eso creía.

Nyoko: -nerviosa- c-creo que... -empuja un poco al chico y se levanta- es hora de dormir...

Rápidamente se metió entre las sábanas de su cama, sus mejillas ardían y sus labios buscaban los del muchacho a sus espaldas pero intentaba aguantar sus impulsos.
En cuanto a Bakugou, solo sonrió ladinamente al ver lo que causaba en la rubia, estaba seguro que en poco tiempo, ella sentiría lo mismo que él, por lo que con una sonrisa se recostó en su cama para luego cerrar los ojos.

Bakugou: descansa Nyoko...
Nyoko: -susurra-...descansa Bakugou...

Animal Girl - Boku No Hero AcadémicaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora