〚Capítulo 11〛

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Al día siguiente Hyeongjun despertó sonriendo y dejando un beso en los labios de Minhee para despertarlo.

—Junnie... —susurró Minhee mientras abría los ojos.

—Minhee, que tal si hoy nos quedamos en casa, ya mañana es mi cumpleaños y seré mayor, cumpliré 17.

—Nos quedaremos en casa, pero ven, quiero seguir abrazándote —susurró estirando sus brazos.

Hyeongjun sonrió y se acercó nuevamente a hundirse en el abrazo.

—Te quiero mucho Minhee.

El más alto sonrió susurrando despacio: —Yo también te quiero mucho, Hyeongjun.

Minhee seguía preocupado, rogaba porque le dejarán vivir más, no quería dejar solo a Hyeongjun y menos el día de su cumpleaños.




[...]




Hyeongjun sonrió al sentir los brazos de Minhee rodear su cintura y luego como colocaba su cabeza en su hombro.

—¿Que haces Junnie?

—Esperando que el agua hierva.

—Ya limpie el cuarto y la sala.

—Hacemos un gran dúo.

Minhee sonrió y empezó a dejar besos en las mejillas de Hyeongjun, jugando y haciendo reír al castaño.

Hyeongjun vió que la tetera empezaba a sonar así que lo apagó, luego se giró y le robó un beso a Minhee, haciendo que este se sorprendiera.
El peliblanco soltó una risa mientras sus mejillas tomaban un color rojito, cargó a Hyeongjun y lo llevo hasta el sillón.

—Eres como un osito que no puede dejar de abrazarme —susurró Hyeongjun al sentir que Minhee nuevamente lo abrazaba.

—Soy un osito que solo quiere abrazarte.

—Osito Minhee.

Minhee sonrió negando y dejando mas besos en la cara de su lindo novio.

—Este osito solo te quiere a ti, eres su única prioridad.

—Osito es muy tierno.

—El novio de osito es aún más tierno.

Hyeongjun no podía dejar de sonreír, era muy lindo todo lo que Minhee decía y hacia.




[...]




Minhee estiró su mano con una cuchara la cual tenía un poco de comida.

Hyeongjun se acercó y comió de lo que Minhee le daba.

—Gracias —susurró.

Minhee acarició su cabello solo susurrándole muchas palabras diciéndole a Hyeongjun lo bonito que era.

Hyeongjun sentía que Minhee estaba más cariñoso que de costumbre, normalmente siempre era cariñoso y andaba abrazándolo todo el día, pero está vez lo sentía más como si Minhee fuera a irse de viaje, era extraño, pero sentía que eran como cariños de despedida y eso lo asustaba, tal vez solo estaba siendo paranoico.

—Mañana es tu cumpleaños y no compre ningún regalo.

—Me podrías regalar tu tiempo para pasar todo el día conmigo.

Minhee asintió.
El plan de no preocupar a Hyeongjun parecía ir bien, aunque tenía medio de que la luna pudiese quitarle su vida el mismo día del cumpleaños de Hyeongjun, eso sería muy cruel.

«Por favor luna, dame más tiempo»

—Vamos a ver algo en la televisión —sugirió Hyeongjun, sabiendo de que no iban a ver la tele y se iban a pasar toda la tarde mimandose mutuamente, dándose besitos y caricias.




[...]




Hyeongjun se acostó en su cama, la noche había caído. Minhee se acostó a un lado y como todas las noches abrazó a Hyeongjun.

—Que descanses, Minhee bonito —susurró Hyeongjun dejando un casto beso en los labios del peliblanco—, te amo.

Minhee sonrió evitando llorar, había pasado un día muy lindo con Hyeongjun.

—Buenas noches, Junnie, yo también te amo.

Minhee no sabía cuántas horas le quedaba, sabía que no eran muchas, pero quería creer que viviría más aunque sabía que no era así.

Acariciò el rostro de Hyeongjun solo queriendo recordar eso, su novio era demasiado lindo, a sus ojos el era perfecto, no había cosa que no amara de Hyeongjun.

—En nuestra próxima vida me encargaré de no volver a hacer ningún pedido a la luna, podemos ser felices en otra vida.

—¿Que es lo que ocultas?

Minhee dió un saltito al oír la voz de Hyeongjun, había creído que el castaño estaba dormido, pero al escuchar su voz se dió cuenta de que estaba despierto.

—Minhee, quiero que me cuentas que es lo que guardas, no te creo lo que dijiste de que debías hacerme feliz, dime que es lo que tienes que darle a la luna.

El más alto tragó en seco, como le podría decir a Hyeongjun que dejaría de existir probablemente al día siguiente, no podía hacer eso.

—Solo hablaba, de que en nuestra próxima vida te volveré a buscar y estaremos juntos de nuevo.

—Minhee, ¿Que ocultas?, dímelo por favor.

El corazón de Minhee dolió, el ver a Hyeongjun pedirle de esa manera le hacía querer llorar, no podía decírselo.

—Yo... mañana te lo diré.

—Esta bien.

Hyeongjun durmió rápido, podía sentir la calides de Minhee que le transmitía paz, rogaba porque lo que le tuviera que contarle no fuera nada malo. Al fin había encontrado un punto de felicidad, todas esas semanas junto a Minhee fueron muy especiales y llenas de sonrisas, besos y abrazos.

Se sentía totalmente feliz.

Puppy hugs (Minisong)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora