𝟏𝟔 - 𝐠𝐢𝐯𝐢𝐧𝐠 𝐮𝐩 𝐚𝐧𝐝 𝐠𝐢𝐯𝐢𝐧𝐠 𝐢𝐧

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Jon hace un tiempo había estado en un proceso psiquiátrico con antidepresivos y ansiolíticos, debido a una depresión mayor moderada que había estado sufriendo desde sus trece años, probablemente todo empezó ante la separación de sus padres y el poco cuidado que tuvieron con él, también la toxicidad de su última relación amorosa fue gran parte de el presente que estaba viviendo, al menos no era algo tan malo, intentaba ser optimista al respecto.

Ahora misma no estaba haciendo demasiado, estaba en Física junto a Mark haciendo una guía evaluada, era algo torpe y distraído para hacer las cosas, pero por suerte el rubio estaba para ayudarle.

— Es eso, el resultado da un decimal, así que será mejor que lo transformemos a fracción – Dijo el rubio mientras agarraba la calculadora.

— ¿Por? –

— Porque son más bonitas — Le responde con una pequeña sonrisa.

Jon sonríe también.

Continuaron con la guía, no era demasiado complicada, trababa sobre lentes, la misma materia que estaban pasando el otro grupo. De la nada Jon se puso a pensar en la disculpa que le dio a Tom, y lo poco suficiente que se sintió hacerlo, no era nada, al moreno siquiera le importó, después de todo no sabía de lo que se estaba disculpando y probablemente Tom sí. Había sido bastante estúpido de su parte.

— Mark... –

— ¿Qué pasa? –

— ¿Sabes por qué Eduardo nos manda a hacer cosas malas contra el grupo de Edd? – Mark queda sorprendido ante su pregunta, no sabía qué decir.

Él y Eduardo sabían sobre la salud mental de Jon, y por lo que estaba pasando. Mark sabía la verdad, la sabía bien... porque él lo vio.

— Yo... yo sé por qué. – Decidió hablar, sentía que si Jon seguía esperando por respuestas pronto colapsaría, pero temía de que no pudiese soportar la verdad. – ¿Puedes prometerme algo?

— Por supuesto – Le contesta con una sonrisita, esas adorables de Jon.

— No atentes contra tu vida. – El castaño queda ciertamente atónito.

—... Vale, lo prometo. – Dijo tras unos minutos de silencio.

Mark suspira.

— Eduardo en la fiesta... abusó a Matt. – Terminó de decir.

— Es... es una broma, ¿cómo se te ocurre bromear con eso? – Le respondió con una sonrisa nerviosa; ni siquiera él podía estar cien por ciento seguro de sus palabras.

Mark se gira a mirarlo cara a cara.

— ¿Tengo cara de que estoy bromeando? Yo lo vi, esa noche yo... abrí la puerta y pude verlo, fue tan solo un segundo, allí estaba Matt... y Eduardo, suplicaba por ayuda y yo no pude hacer nada. – Tenía la voz temblorosa, pero no se dignó a soltar ninguna sola lágrima.

Jon se mantuvo en silencio, no supo qué decir, ni qué hacer, se disculpó con Tom... y cuando acababa de saber el por qué tuvo que disculparse, sintió que no había sido suficiente. Porque él no era suficiente, había cometido un pecado, hizo daño a quien no se lo merecía, siguió al pecador y lo amó, lo amó tanto.

Tanto.

— ¿Estás bien? – Mark se arrepintió de inmediato haberle contado, Jon estaba con los ojos llorosos, mirando a la nada con un rostro indescifrable. Quería abrazarlo, pero no sabía qué estaba sintiendo en ese momento.

— Sí, yo... tengo que irme – Fue lo último que dijo antes de tomar su mochila y largarse del salón, la profesora y sus compañeros le miraron salir, pero no hicieron mucho.

suddenly they love each other - TommattDonde viven las historias. Descúbrelo ahora