Omegacember [OS] [Stray Kids]

Día 11: Construcción del Nido [Ji Sung x Min Ho]

Prendas Perdidas

Con respecto a las jerarquías, un hecho conocido era que los omegas siempre, y bajo cualquier circunstancia, buscaban lugares dónde sentirse seguros, protegidos, y sin que tuvieran que tener alguna preocupación o peso encima, incluso, sin obligaciones por las cuales tuvieran que salir.

Bueno, la última parte podría aplicar solo en ciertos casos; después de todo, Han Ji Sung era, en realidad, una persona bastante perezosa que le gustaba la sensación de hacer nada; ni siquiera le agradaba tener que levantarse a buscar un vaso de agua a la cocina.

Lo cierto era, que, como omega, necesitaba la sensación de seguridad, y, en su opinión, no existe un lugar que le ofrezca más protección, o, sea más cómodo, que un nido que se construye al gusto de la persona que lo hace.

Es por eso que, cuando se ve obligado por ciertas circunstancias estresantes a mudarse, siente la necesidad de construir un nido dónde pueda descansar tranquilo, sin que nadie le moleste con pendejadas, por lo que empieza a buscar cosas que den forma a lo que está en su cabeza.

Para su desgracia, él no vive solo ahora; tiene que compartir departamento con el muy aterrador Lee Min Ho, un ser que entró con expresión irritada a su vida aquel día que se volcó todo al revés, y ese pequeño detalle le dificulta lograr lo que quiere con su nido.

Se convierte en un problema cuando, por culpa de la mudanza, no logra encontrar las cómodas telas de ropa que quiere, que necesita, parece que han desaparecido.

Entonces, su cerebro decide que las ropas de Min Ho son perfectas para su nido.

Pareja: Han Ji Sung x Lee Min Ho

Conectado al One-Shot del día 10: Parche

El aire que contenía aroma en él llegó a sus pulmones a través de una lenta inhalación que provocó pequeños temblores a su pecho poco perceptibles para otra persona, a la vez que las cejas casi rectas formaban arrugas en medio de ellas cuando las frunció mientras su cabeza se movía hacia un lado, y, después hacia el otro al inclinarse hacia adelanta, luego, en dirección contraria, buscando en un concentrado, pero casi descuidado, escaneo, con su mirada entre los objetos blandos que poco después estaban cayendo detrás de su espalda, debido a que los estaba tirando después de verificar que no era lo que buscaba.

Los labios que era gruesos en el centro se separaron en un suspiro que no pretendía ser silencioso, y, que no lo fue; incluso raspó un poco su garganta cuando un grito se hizo paso a través de él para llegar a escucharse por toda la habitación antes de que golpeara el suelo con su mano hecha puño un par de veces, antes de volver a enderezar la espalda para continuar su búsqueda, manteniendo sus rodillas tocando el suelo, deslizándose más hacia un lado para registrar otro lugar.