Capitulo 9

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Emma

No recuerdo cuando empezó todo, cuando deje de ver a Trevor como el mejor amigo de mi hermano, cuando dejó de ser el amigo invasivo de casa, cuando empeze a querer vestir mejor cada que lo veía, admirarlo a escondidas por el miedo de que sus ojos se toparan con los míos, cuando comenzaron los nervios y sonrisas. Por qué Trevor era como un rayo de luz y calidez que invade tu vida y espacio, es la clase de persona que sin importar qué, siempre hacia amigos nuevos a donde fuera, tenía cierto encanto para ello, es atractivo, espontáneo y comprensivo, alguien muy diferente a mí.

Sus profundos ojos me miraban con confusión, si ahora mismo un carro pasará por la carretera dejaría que me arrollara sin dudar. No supe que hacer cuando retrocedió devolviéndole mi espacio personal y se tapo la cara con las manos, cuando me miró sus mejillas sonrojadas eran más que evidentes.

-¿No era broma?-murmuro avergonzado y me pareció tierno.

-No, no lo era-Lo mire directo, huir no era una opción.

-Emma...yo, no sé que decir.

-No necesitas decir nada, además ahora creo que me gusta el idiota de Jean.

-Si, ah...¿Cómo es que terminaron fungiendo ser novios?.

-Ni yo me lo explico de todo, el vio cuando te dije pues...eso y pues empezamos a "salir", ni siquiera se porque-Mire al suelo, solo pensar en el hacia que mi pecho doliera-Supongo que ya no importa, seguro pronto terminará esto para que el pueda estar con la chica con la que se besaba-Me trague el nudo en mi garganta y me obligue a verlo a la cara.

-Yo creo que deberían hablarlo, aún cuando es falso eso solo lo saben ustedes y dónde los haya visto alguien más el rumor no tardará en llegar a oídos de todos, serás la cuernuda del año-Me aconsejó.

-Tal vez lo hablé con el pero no ahora, solo quiero llegar a casa y dormir.

-Bien, vamos te llevó.

El silencio inunda la habitación, veo en su mirada las ganas de salir huyendo, no puedo culparlo porqué yo también quiero desaparecer el echo de que le solté todo lo que había estado guardando así como si nada. Trevor se lleva las mano a la cara, el ambiente es demasiado incómodo y abrumador, se que tiene preguntas pero no quiere hacerlas porque tiene miedo, vergüenza o que se yo.

—Suéltalo—Me mira pero esquiva mi mirada—Solo pregunta Trev—Suspiro cansada.

—¿Desde cuándo?¿Cómo?¿Por qué?...

—Alto ahí vaquero—Apenas puedo comprender las preguntas que hace por la rapidez de sus palabras—No se desde cuándo exactamente, solo paso, no es como si yo hubiese decidido que me gustabas pero fue hace algún tiempo ya.

—Pero ¿Por qué?

—Trev eres increíble, solo mírate eres guapo, atlético, extrovertido, amable, tienes un don para congeniar y llamar la atención dónde se que vayas, todas las chicas se mueren por tí.

—Bueno, pero a las chicas solo les parezco alguien guapa y cool y una vez se dan cuenta de que no soy un príncipe de cuento, el chico perfecto, huyen de mi, es decir, no tengo tiempo para ninguna relación, mi vida se basa en ir a la escuela, entrenar, trabajar, dormir y cuando tengo tiempo salir con los del equipo. Ellas no quieren a alguien que no pueda prestarles atención, solo soy el tipo con el que pueden echar un buen polvo y descartar y no es que me queje así que no comprendo cómo es que yo te gusto o te guste por tanto tiempo por qué tú más que nadie sabe lo difícil que es mi vida y lo imperfecto que soy en realidad.

—Pues yo no lo veo así, eres como una luz que ilumina a los demás, siempre estás ahí para tus amigos sin importar que, hayas la forma de pasar tiempo con las personas que te importan, nunca ni una sola vez te has quejado de tus problemas al contrario buscas soluciones para ellos, nunca te rindes, te esfuerzas por conseguir lo que quieres y luchas por tus sueños. Así que no vuelvas a decir que nadie va a tomarte enserio porque ahí afuera habrá una chica que vea lo especial que eres y no necesitas ser perfecto o un príncipe de en sueño, no necesitas cumplir las expectativas de personas que no se dan el tiempo de ver lo maravilloso que ya eres.

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