· ─ ❨ 𝘀𝗸𝘆 𝗮𝗻𝗱 𝘀𝘁𝗮𝗿𝘀 ❩
porque el cielo y las estre
llas eran perfectos juntos
Seren, como su nombre lo decía, era una estrella, una de las más brillantes que podían existir. Y Armin, con aquellos ojos celestes, era el...
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capitulo diecinueve "continúa la guerra"
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Seren se encontraba alistándose para irse por fin, justo antes de la puesta de sol. Estaba muy nerviosa, tanto que sus manos no dejaban de temblar y miraba hacia la cama vacía de Yuuki cada cinco segundos. Se sentía egoísta, porque por una parte agradecía al destino haber hecho eso y así su mejor amiga no tuviera riesgo de morir en lo que se aproximaban, pero por otra, tenía miedo de su propia vida. Ahora quería seguro viviendo por aquel pequeño ser, del cual sería la madrina.
Un sonido de alguien tocando a su puerta la hizo regresar a la realidad. Seren se ajustó el cinturón y rápidamente su broche antes de abrir la puerta, encontrándose con Armin detrás de ella.
—Hola... —murmuró con un poco de vergüenza al verlo y creer que se miraba muy guapo—. ¿Viniste por mí para irnos juntos?
—Sí, y también porque quiero saber cómo está Yuuki —expresó preocupado—. No nos quisiste decir nada temprano y temo que sea algo grave. Los demás también están preocupados por ella.
—Oh, eso. Pues, es algo que no me concierne, Armin, por eso no he dicho nada. Estoy esperando a que regresemos sanos y salvos para que les de la noticia que tiene que dar —sonrió, y le dio un beso en la mejilla para tomarlo de la mano—. Anda, vamos. ¡O se nos hará tarde!
—Espera —la interrumpió, antes de que Seren comenzará a caminar hacia la salida e hizo que se girara hacía él—. Yo... quisiera decirte algo antes, y a solas.
Inevitablemente sus mejillas se encendieron y asintió, dándole paso a que hablara. Armin le sonrió.
—Te quiero, y por favor, quiero que te cuides allá afuera. Hoy será peligroso, ni siquiera puedo prometer que estaremos bien, pero necesito que vivas.
Abrió la boca un poco, aunque la volvió a cerrar al no saber cómo pronunciar las palabras. ¿Esa era otra confesión de amor acaso? Era obvio que se querían, pero que se lo dijera de esa forma solo indicaba que se preocupaba tanto por ella que le ponía la piel de gallina. Entonces, Seren lo envolvió en sus brazos y le dio un beso en la frente.
