¡Ups! Miraculous equivocado

Princesa Fragancia

El maestro Fu no quería que sus elegidos fueran a su casa, podría ser peligroso él prefería que no lo conocieran o al menos no todavía. Por el momento era mejor que no supieran de él.

No obstante, esta vez no hubo otra opción pues, el kwami de la creación lo necesitaba para restablecer su salud después de haber pescado un resfrío con el último villano.

El Mago Inforunio quería desaparecer la torre Eiffel en una nube de humo, durante la batalla hubo un chaparrón lo que aparentemente afectó, no al portador, pero sí a Tikki.

Adrien entró a su habitación aún mojado por la lluvia, perdió su transformación y volvió a su forma civil. Tikki cayó en sus mano se la notaba un poco débil, estaba en posición fetal y temblaba. Adrien se inmediato se preocupó.

—Tikki ¿Estás bien?

—¡Achú!

Por más que Adrien quería molestarla por lo tierno que fue ese estornudo sabía que no era el momento adecuado. Se notaba que el asunto era serio, Tikki estaba temblando mucho, sin pensarlo Adrien puso a la pequeña sobre su almohada y la cubrió con la bufanda que le dió su padre en su cumpleaños.

—Tienes que llevarme con un doctor.

—¿Doctor? ¿Dónde encontraré un doctor para kwamis? Em.. ¿No preferirías un veterinario?

—Concozco a alguien que me puede curar, te diré dónde encontrarlo.

—¿En dónde?

—¿Adrien?

Nathalie entró a la habitación de Adrien y él rápidamente se puso frente a su almohada, cubrió a Tikki por completo mientras le sonreía nervioso a su tutora.

—Llegaras tarde a la escuela ¿Ya tienes todo listo?

—Ya casi, Nathalie. Te alcanzo abajo ¿Está bien?

Nathalie asintió y salió del cuarto, no sin antes darse cuenta que el piso junto a la ventana estaba mojado y había algunas huellas. Adrien se dió cuenta y rápidamente inventó una mentira.

—La lluvia entró por la ventana jaja olvidé cerrarla— se rascó la nuca nervioso.

—Cierra la ventana.

Cerró la puerta tras ella dejando de nuevo a Adrien solo con su kwami enfermo.

—Vamos, iremos con ese hombre- dijo tomando en sus manos a la rojita envuelta en la bufanda.

—Pero tienes clases.

—Tú eres más importante, Tikki. Además creo que ya estoy llegando tarde.

—Pero entonces tendrás problemas con tu padre, descuida puedes llevarme después de las clases ¡Achú!

—Gracias, Tikki.

Adrien velozmente preparó sus cuadernos y demás para la escuela y se colocó la bufanda por el cuello teniendo aún ahí a su kwami como si fuera un tipo de portabebés muy pequeño.

—¿Estas bien?— ella asintió —Tranquila, te prometo que tan pronto terminen las clases te llevaré a que te curen, todo estará bien lo prometo.

(...)

—La combustión es una reacción química exotérmica redox de alta temperatura entre un combustible y un oxidante, por lo general el oxígeno atmosférico principal...

La srta Mendeleiev estaba explicando quién sabe que, Adrien había llegado tarde a clase, pero afortunadamente la maestra se lo perdonó por esta vez. Tikki estornudaba a veces por lo que Adrien trataba de cubrirlos diciendo que fue él, aunque no era tan necesario, pues casi nadie se daba cuenta. La mayoría estaba roncando o bostezando en clase, era difícil prestar atención a una clase tan aburrida como lo era la clase de ciencias.