Segunda Oportunidad

Capítulo 19

Yeji estaba quedándose dormida cuando recibió un mensaje de Jihyo diciéndole que estaba afuera de su casa y que quería hablar con ella.

Bajó a la planta baja, dejó que Jihyo entrara a su casa y ambas entraron a la sala de estar.

- ¿Quieres algo de beber?
- No gracias
- ¿Algo de comer? - la chica con mechones rosados volvió a insistir
- Gracias, estoy bien. En realidad vine porque quiero hablar contigo
- ¿Ah si? - la chica se sentó al lado de su contraria
- Si, es sobre Yuna - al escuchar el nombre de la azabache la mayor puso total atención en lo que la presidenta de su club decía - verás... La ví muy distante contigo y algunos días la veía algo decaída... Hablé con ella y me dijo que todo se trataba de ti... ¿Me quieres contar qué pasó entre las dos?
- Bueno... En resumen fuí una tonta. Pensé que todavía me gustaba Ryujin así que la besé sin su permiso... Yuna se enteró y me dejó de hablar
- ¿Aún estás enamorada de Ryujin? Porque si la respuesta es si no puedes ir a buscar a Yuna como si nada, no puedes fingir que todo está bien cuando en el fondo amas a otra persona, la lastimarías más
- Lo sé - suspiró - creo que después de todo no me gusta Ryujin
- ¿Crees o estás segura que ya no la amas? - Yeji no pudo responder la pregunta. Jihyo se levantó y se dispuso a irse de ahí - piénsalo y cuando tengas la respuesta puedes venirme a buscar a mi o a Chan, me dijo que también habló contigo así que cualquiera de los dos te podrá aconsejar - sin decir nada más Jihyo se fué, dejando a Yeji sola y con muchas cosas por reflexionar.

Los días siguieron su transcurso normal, mayo se despidió para dar paso a junio, el año escolar estaba por terminar y Yeji aún no lograba acercarse a Yuna para disculparse (igual era porque no tenía una respuesta clara a la pregunta de Jihyo) los días estaban contados y sabía que se arrepentiría de por vida si perdía a Yuna para siempre.

Cierto miércoles a las dos y media de la madrugada Yeji se despertó después de soñar con Yuna nuevamente. Su mente y sus pensamientos estaban bastante revueltos... ¿Realmente amaba a Yuna tanto como pensaba?

La realidad es que no podría responderse entre ese nudo de pensamientos aunque... De tan sólo recordar aquella cita en el restaurante, las veces que la ayudó a practicar cuando recién entró al club de canto, el día en que pudo dormir a su lado o incluso la vez en la que se besaron bajo el atardecer, todos esos recuerdos hacían revoloteae su corazón... Sumado a que también proyectaba a Yuna en sus planes a futuro...

- Entonces... ¿Eso quiere decir que también amo a Yuna? - pensó para si misma - Quiero decir, no había pensado en Ryujin desde que Yuna se me confesó... Y todos esos momentos tan agradables a su lado... ¡Eso es amor! Por dios, que tonta fuí. Tenía algo tan especial delante mío y lo dejé ir - por fin y después de tanto pensar y a veces sobre pensar las cosas comenzaba a acomodar sus pensamientos, se daba cuenta que realmente amaba a Yuna y que lo que menos quería era dejarla ir - no puedo dejar que esto se quede así

Después de pensar varias cosas Yeji por fin se quedó dormida. Le esperaba un día en el que tenía que comenzar a arreglar las cosas con algunas personas.

Al día siguiente le pidió a Ryujin y Lia hablar con ellas en privado, ellas aceptaron y subieron hasta la azotea de la escuela para asegurarse que nadie las escuche.

Ya estando ahí Yeji se disculpó con ambas y confesó de la manera más honesta que amaba a Yuna con todo el corazón. Ryujin y Lia aceptaron sus disculpas y le desearon mucha suerte en su relación, Yeji agradeció con una sonrisa y prometieron ser amigas aún después de graduarse.

Los días de junio pasaron rápido, el día de presentar el examen para la universidad había acabado y todos los estudiantes de último año por fin pudieron descansar de tanto estudio. Después de liberarse de eso Yeji se sintió más confiada para hablar sobre sus sentimientos con Yuna, llamó a Chan y Jihyo para que fueran a su casa y en cuanto ellos dos llegaron los invitó a tomar algo mientras charlaban.

- Bueno, no creo que nos hayas llamado sólo para beber limonada, ¿no? - Jihyo fué la primera en hablar - ¿Que nos querías decir?
- ¿Recuerdan la plática de hace unos meses? - ambos asintieron - pues... Ya tengo la respuesta a todas mis dudas...