Una gran fan

26 5 5
                                    

[Las flores, la brisa e incluso el terreno que pisaban sus botas, desprendía belleza. Parecía estar danzando en la hierba cuando trataba de evitar destruir la sintonía de la naturaleza. O al menos eso pensaba Xingqiu. La isla Watatsumi tenía algo diferente y especial. Hasta las burbujas que flotaban en el aire parecían estar perfectamente seleccionadas para ser parte del entorno. Aquel lugar le estaba encantando y hacía menos de quince minutos que había llegado a él]

-Tiene algo que... No sé describirlo. [dijo cuando sus ojos estudiaron el cielo, maravillados por todo lo que veían] Si hubiera sabido cómo era, habría tratado de venir aquí primero. ¿Tú qué dices, Albedo? ¿Es también de tu agrado?

[Pero el silencio fue lo que le respondió. Tras la conversación que habían tenido en el barco, la mirada del alquimista se había vuelto sombría y esquiva. El escritor sabía que las palabras que habían intercambiado eran duras y difíciles de aceptar, pero esperaba que Watatsumi fuera capaz de aliviar el corazón de Albedo. Solo pasarían una noche en aquel sitio, así que deseaba que fuera suficiente con aquello]

[Y tras eso, vendría el eclipse]

[Xingqiu no pudo evitar sentir náuseas. Realmente no era en sí la alquimia lo que le aterraba. Ni siquiera el hecho de poder crear vida que imitara la humana. Lo que le preocupaba era que Albedo pudiera querer volver a la isla Tsurumi. Cada vez que lo pensaba, le daban ganas de vomitar. El hecho de regresar a donde casi lo había perdido una vez, no era en absoluto agradable]

-¿El puente es una especie de prueba para valientes? [cuestionó el escritor. Tratando de acallar sus temores] Parece que se ha desmoronado en parte.

-Lo hemos arreglado en numerosas ocasiones, pero tras unos días, vuelve a estar como antes

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

-Lo hemos arreglado en numerosas ocasiones, pero tras unos días, vuelve a estar como antes. Así que, nos hemos dado por vencido al respecto. [comentó Gorou. Sus orejas se movieron un poco. Quizás estuviera escuchando algo en la distancia] De un salto es sencillo solventar el obstáculo. [agregó, encogiéndose de hombros]

[Xingqiu caminó por el puente hasta llegar a la zona problemática. Las tablas que deberían unir un lado con el otro colgaban ahora, impidiendo cruzar con normalidad. Gorou tomó impulso y saltó sin ningún problema al otro lado, haciéndole un gesto a la pareja para que lo siguieran. El escritor quería imitarlo, claro que quería, pero aquel día precisamente tenía los movimientos bastante limitados. Si hacía lo mismo que el General, el dolor aumentaría. No obstante, no podía quedarse allí eternamente]

-¿Me permites? [preguntó una voz a sus espaldas]

[Xingqiu se hizo a un lado, permitiendo que Albedo ocupara su lugar. El alquimista se agachó grácilmente y usó su Visión para colocar una Isotoma Solar lo más cerca del borde. De aquella forma, el salto que tenía que dar el escritor era mínimo. Antes de cruzar, Xingqiu miró al caballero y le sonrió agradecido. No solo había vuelto a escuchar la voz del rubio, sino que encima había recibido su ayuda. Estaba enormemente feliz por aquello]

Cristales en el EclipseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora