Había logrado hablar con ella y aunque tardo en contestarle, le respondió el mensaje y afirmó la salida. Eso lo había emocionado de sobre manera y si no fuera un chico amargado estaría salvando y abrazando a las personas de la emoción.
Ahora estaba afuera de una cafetería distinta a la que la chica trabajaba, se verían a las 17:30 y ya habían pasado diez minutos, Katsuki le escribió y llamo pero ella no respondía, considero que quizás lo mando a la mierda pero ella apareció corriendo en su dirección.
—Lamento la tardanza, a las 17 salí de trabajar, me di un baño y vine corriendo hacia aquí.
—Esta bien, entremos.
Ambos entran al lugar y toman asiento, una chica se acerca a ellos a tomar sus pedidos pero Senju niega que no tiene hambre.
—¿Segura? Puedo pagarte lo que quieras.
—Tranquilo, la ventaja de trabajar en una cafetería es que puedes comer los intentos fallidos.
—Punto a nuestro favor.--- Murmuró la mesera y se sonrojo por lo que dijo.
—Exacto.--- Senju le sonrió amable.
—Por ahora nada entonces.--- Dijo Katsuki y la chica asintio con una sonrisa, haciendo una leve reverencia y retirandose.
—¿Que tal siendo estudiante de la UA? Te vi compitiendo el año pasado y saliste primero.
—Tch, obvio aunque hoy me confíe demasiado y salí segundo por idiota.--- Katsuki maldecia en su mente a shoto por salir primero este año.--- ¿Que fue de tu vida?
—Que no me pasó.--- Senju sonríe amargamente.--- Desde la muerte de mi madre siento que ya nada es como antes.
—¿Y tú viejo?
—No se, desde que me presenté como una Omega recesiva parece que fui una deshonra para él, pasaba menos tiempo en casa por lo que comencé a arreglarme yo sola. Cuando murió solo me dejó todas sus mierdas.
—¿Sus mierdas?
—Temas sin importancia.
—Yo... Cumplí nuestra promesa.
—¿Nuestra promesa?
—Te estuve buscando todo este maldito tiempo y cuando pensé que simplemente ya no aparecerias o que me habias olvidado, iba a seguir con mi vida pero parece que el puto destino decidió que debíamos estar juntos y aquí estamos.
—Aqui estamos...
—Aqui estamos, quiero cortejarte, quiero que me veas como tú alfa, tanto mi lobo como yo queremos que seas nuestra.
—No.
Katsuki quedó mudo, no se había esperado eso, tampoco se había preparado para una respuesta negativa, él se imagino a la chica llorando, lanzándose a sus brazos y llenandolo de besos mientras decía lo genial que era y que sin dudar lo aceptaria.
Quizás si se pasó un poco con su fantasía pero no era en nada a la situación.
La Omega, con mirada sería e incluso no se atrevía a verlo a los ojos, jamás se imagino a aquella niña sonriente y que le gustaba abrazarlo y darle besos en la mejilla estuviera seria.
—¿Que?
—Y-Yo... No quiero tu cortejo, tienes pareja y sinceramente a mi no me gustaría que mi alfa me abandonara por otra Omega.
—¿Que tengo que mierda?--- Katsuki no creía lo que escuchaba ¿Él una Omega? Ni muerto hasta ahora.
—¿Una Omega?
—Tch, no tengo ni mierda ¿Que te hace creer eso?
—Ayer te vi con una Omega y si que daba miedo su mirada.
—Te lo dije ayer, es una amiga y me invitó a una cita, acepte porque quería olvidarte pero ahora ya no, no quiero olvidarme de ti y quiero que seas mía, jamás tuve una Omega y quiero que tú seas la primera.
—De todas formas mi respuesta sigue siendo negativa.
—¿Porque? ¿Hice algo mal?
—No es eso, es complicado.
—Entonces dilo, quiero una puta respuesta con coherencia.
—Eres un alfa puro y yo una Omega recesiva, sin dudar no somos compatibles, los celos, la marca, los cachorros, nada coincidimos en eso, además de nuestras vidas distintas, tu eres un héroe con la vida hecha y yo lucho por sobrevivir siendo menor de edad y huérfana.
—No es tan así, estamos mal informados quizás si pueda marcarte y puedas darme cachorros, además no es como si los quisiera en realidad.
—Ya sabes la respuesta Katsuki.
—No seas tan terca, aún somos jóvenes, no necesariamente tenemos que tenés una puta marca o cachorro para demostrar que nos amamos.
Senju suspiro con desespero y tapo su rostro ocultando su mueca de molestia.
—Bien, eres o mejor dicho seras un héroe, yo veía como mi padre siendo un héroe maltrataba a mi madre y eso la llevo al suicidarse, no soportaba los maltratos de su alfa y como este se acostaba con sus propias fans, sacando provecho de su fama, yo no confío en los héroes.
—Joder ¿Ya te olvidaste de mi vieja? Si yo fuera un puto idiota como esos, esa vieja me golpearía para que acomode mis ideas, jamás sería como esos idiotas.
—¿Quieres la verdad? Bien.--- Senju se levanta de la mesa y mira con sus ojos fríos que congelan el corazón de katsuki.--- Desde que nos conocimos siempre te odie, estaba contigo porque mi madre me obligaba, ya no vuelvas a buscarme más, que tengas un lindo día.
Toma su bolso y se retira de la mesa dejando a Katsuki con el corazon roto y a su lobo aullando por su Omega.
•••
—Wow.--- Kirishima no tenía palabras para lo que su mejor amigo le contó.
—No se que mierda hacer.
—Pues, por un lado la entiendo ya que si yo fuera un Omega que ví como mi padre lastimaba a mi madre, tendría miedo de pasar por lo mismo pero aquí huele a gato encerrado.
—Sabes que no entiendo tus estúpidas metáforas de abuela.
—Olvidalo, yo podría decirte que está asustada de pasar por lo mismo que su madre, ya que todo termino mal para aquella mujer que en paz descanse.
—....
Kirishima sentía pena por Katsuki.--- Quizás debamos ir por unas señoritas que bailan en el caño para que no estés triste.
—Jodete, no estoy triste y no necesito esa mierda.
—¿Que?
—¿Quien dijo que voy a rendirme? Ambos estamos destinados a estar juntos y por más que me haya rechazado voy a luchar para estar con ella, como no me llame Katsuki Bakugo.

ESTÁS LEYENDO
Igualdad
Fiksi PenggemarEl mundo en el que están es tan injusto, eso Katsuki y Senju lo saben de sobra. Katsuki intenta buscar un mundo de igualdad, en dónde los omegas puedan vivir y tener los mismos derechos que los alfas, después de todo vivió en carne propia la injusti...