𝙋𝙤𝙡𝙞𝙚𝙨𝙩𝙚𝙧

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Y ahí estaba, en la cafetería, con su bandeja llena de comida siendo revuelta con aburrimiento por parte de la castaña mientras miraba como Teo| y Heather se miraban tan... enamorados, según ella.

No negaba que le encantaria ser ella. Estar en su lugar, poder decir que era la novia de Teo Briones , el chico que la trae loca hace tiempo, poder tomar su mano en los pasillos, estar con el mas tiempo, besar sus labios. Como le gustaría. Pero soñar es gratis.

-Tierra llamando a Olivia , ¿todo bien en la luna?- Sadie trataba de llamar su atención.

-No...- un pequeño murmuro salio de sus labios. Su amiga fijó su vista en la misma dirrección en la que estaba la de su amiga y comprendió todo.

-Vamos, miralos, nisiquiera se gustan- animó su amiga, diciendo la verdad, todos lo sabían, ya no se gustaban, se notaba a leguas, era tan obvio, pero ella no lo veía, estaba tan convencida de que se amaban.

Y luego lo vió, Teo tenía el sweather que le había prestastado, el mismo que hace unos meses dijo que era de ella, se lo estaba dando a ¿Heather? ¿Pero que? ¿Por qué?.

Se lo entregaba con una sonrisa y ella lo recibia de igual manera, se lo pusó y le dio un beso a su "novio".

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-Vamos, no te pongas así- Jack trataba de ayudarla, no sabía como, no había pasado por esta situacion antes y no podia hablar muy alto ya que en poco empezaba la clase. -No quiero verte sufrir- esto lo entristecía, verla tan apagada no era algo usual.

-Jack, ¿Que tiene ella que yo no?- al terminar de preguntar se le escapó un pequeño sollozo, partiendo el corazón del ruloso. La abrazó con fuerzas.

-Tu eres perfecta, tu tienes todo, no te falta nada ni nadie-.

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Cerró su casillero con algo de fuerza, estaba triste, pero vamos, no se iba a quedar así, recordó lo que su amiga Sophie dijo "Tu lo que necesitas es ir de fiesta". Ahora le faltaba una fiesta. Genial.

-Wow, pobre casillero- su voz retumbó en su cabeza, paralizandola por un instante.

-Oh- lo unicó que pudo decir. Dió media vuelta, quedando frente a frente. Noah al ver su cara algo triste se preocupó.

-Oye, ¿Todo esta bien?- la tomó suavemente del hombro. Ella en un movimiento leve terminó el tacto, confundiendolo.

-Mira, despues de tanto si te importa- lo soltó, asi, como si nada, se sintió bien y a la vez mal, escucharlo en voz alta dolía. El estaba al tanto de eso, ya se habían separado demasiado. -Le diste mi sweather- un murmuro un tanto apagado se escuchó.

-Es solo poliester- trató de no tomarle tanta importancia. No, no quería sonar triste, el sabía lo que había hecho, ese sweather le recordaba a ella pero, Heather no permitía que se juntara con ella.

-¿Quieres escuchar algo?- preguntó firme pero con una voz quebrada. -Me gustas Teo, y mucho, pero ya nisiquiera se si sigues siendo el mismo, digo, hace mucho que no se de ti- rió con algo de amargura.

Espero unos segundos a su respuesta, algo, una exclamación, pero lo único que vio fue su cara de confusión, estaba confundido realmente.

-Ya lo dije. Adios, Teo- acomodó su mochila en el hombro y pasó por su lado, caminando por el que parecía ser un interminable pasillo, salió por la puerta y el frío aire estampó todo su cuerpo.

HeatherDonde viven las historias. Descúbrelo ahora