Todo comenzó cuando mi padre me da la noticia de que nos íbamos a mudar, iba a dejar todo, mis amigos, mi escuela, mi vida, pero en una parte yo también quería irme ya que todo acá me recordaba a mi madre, ella murió hace un año en un accidente de tránsito o eso es lo que me dice mi padre, pero yo sé que hay algo más, ya que días antes de que mi madre muriera pasaron muchas cosas raras, la sentía muy angustiada, temerosa, preocupada y cuando solíamos ir de compras siempre miraba para todos lados como si sintiera que alguien nos estaba siguiendo, un día le pregunte qué era lo que pasaba, ella me decía que nada pero yo sabía muy bien que me mentía, era mi madre, la conocía muy bien, siempre tuvimos una conexión, nos entendíamos con solo mirarnos, ella sabía cuándo yo estaba pasando por un mal momento, así que sabía perfectamente que mi madre no la estaba pasando nada bien, pasaron los días y veía a mi madre igual de preocupada, yo no podía seguir viéndola de ese modo así que decidí hablar con ella al llegar del colegio.
Estaba en clases de comunicación cuando de pronto la psicóloga del colegio para la clase y le pide a la profesora que yo salga.
– buenos días, disculpe la interrupción, pero necesito que salga la señorita Martínez – dice de una manera preocupada y triste a la vez que a mí me da una sensación de que no tiene nada bueno que decirme.
La profesora me mira y con su mano me indica que salga, me paro del asiento y con miedo camino hacia la puerta.
– Isabella, no es fácil decirte esto, pero quiero que estés tranquila okey – me dice la psicóloga con la voz entre cortada.
– me esta asustando un poco miss, me podría decir que pasa – le digo alterándome un poco, porque sea lo que tenga para decirme sé que no es nada bueno, ella parece darse cuenta de que me estoy alterando y me toma de la mano, esto ya me está asustando.
– mira Isabella esto es difícil de decir, pero tu padre nos acaba de llamar hace un rato – cuando menciona a mi padre mi corazón se acelere, acaso algo le paso a él o a mi madre, y antes que siga hablando yo le interrumpo
–miss todo anda bien, me está asustando, algo le paso a mis padres – le digo mientras siento como mis ojos se están llenando de lágrimas.
– Isabella, tú mamá acaba de sufrir un accidente grave y tú papá está viniendo a recogerte – cuando me dice eso todo mi mundo cae, me quedo en blanco, no sé qué decir, no puedo reaccionar no me puedo ni mover – Isabella estas bien, reacciona por favor – me dice sacándome de mi trance – estas bien?, por favor dime algo – ahora sé lo que se siente cuando dicen que puedes ver a una persona un momento, puedes hablar con ella y al otro ya no está , que nunca más van a volver, mi madre nunca más va a volver, nunca más voy a poder hablar con ella, abrazarla, reírme, ella ya no va estar conmigo nunca más, puedo sentir como mi corazón se rompe y ya no puedo mantenerme parada, me tiemblan las piernas, ya no tengo estabilidad.
– no no no no – digo entre llantos mientras caigo sobre mis propias piernas, sin poder respirar.
– Isabella, por favor tranquilízate, respira – me dice, pero yo no la escucho, solo siento que todo se pone negro y lo único que llego a escuchar son los gritos de la psicóloga pidiendo que traigan una ambulancia.
Cuando despierto veo todo blanco, ese aroma lo reconozco muy bien ya que cuando era más pequeña tuve apendicitis y me tuve que quedar internada por una semana, así que deduje que estaba en el hospital, pero por qué estoy aquí?
Cuando empiezo abrir mis ojos y intentar sentarme en la cama siento una presencia cerca de mí.
– cariño no te levantes – escucho la voz de mi padre, que me agarra de los hombros para volver echarme a la cama.
– que paso papá, por qué estoy aquí – mi padre me mira con una mirada triste y yo no entiendo por qué,hasta que recuerdo lo que la psicóloga del colegio me dijo cuándo me pidió que saliera del salón y la angustia se vuelve apoderar de mí.
Me levanto de la cama de un solo impulso sin darme cuenta que tenía una aguja en mi brazo que me hacía doler demasiado pero no me importaba, solo quería saber que le había pasado a mi madre y si estaba bien, mi padre me mira confundido como si quisiera decirme algo al ver mi reacción, pero antes de que diga algo yo le interrumpo – donde esta mamá, está bien verdad, la psicóloga me dijo... – mi padre me interrumpe, y eso me da miedo ya que la mirada de mi padre era triste y tenía ganas de llorar, así que eso me asusto más porque sabía que algo grave le había pasado a mi madre.
– hija tu madre sufrió un accidente en su auto – yo asiento como para que continúe, pero lo que sea que me tiene que decir sé que no es nada bueno – la trajeron al hospital muy grave, y cuando llegue – a mi padre se le empieza a cortar la voz y los ojos se le cristalizan al igual que a mí porque ya sé que es lo que quiere decir – hija lo siento, tu mamá no resistió, los doctores me dijeron que falleció al llegar al hospital – me dice sin poder aguantar más las lágrimas, mi padre amaba mucho a mi madre, era un amor como esos de películas, él estaba destrozado al igual que yo,ella era nuestra energía, nuestra felicidad.
– Isabella baja de una vez – escucho decir a mi padre haciendo que salga del recuerdo de que aquel día, el día que mi madre murió, no puedo creer que ya paso un año y todo a cambiado me refiero a un cambio extremo ya que mi padre decido que sería bueno mudarnos, actualmente vivimos en las vegas, nevada, es increíble este lugar, yo crecí y viví toda mi vida en este lugar, bueno a toda mi vida me refiero a 16 años, ya que tengo esa edad.
Voy bajando las escaleras hacia dónde está mi padre con otros señores que son de la mudanza.
– hola pa
– Hola hija, ya estas lista
– Si como si no nos fuéramos a ir – le digo un poco enojada, ya que lo estoy porque no me quiero ir, voy a dejar todo, mis amigos, mi escuela, vamos es mi penúltimo año y la voy hacer en una escuela donde no conozco a nadie.
– ay Isabella ya hemos hablado de esto no, sabes lo difícil que es para mí – bueno para ser sincera no hago tanto drama con irme ya que todo esto lo hago por mi padre ya que sé que no lo ha estado pasando nada bien y sé que esto le va hacer muy bien ya que mi padre creció en los ángeles.
– ya lo sé papá es solo que..., nada olvídalo, yo también estoy contenta de ir, hay muchas playas – le digo dando una sonrisa.
– así se habla hija, esto va hacer algo bueno para nosotros, todo va a cambiar – me dice con una sonrisa y me da un abrazo eterno – te quiero mucha hija – me dice, pero puedo sentir su tristeza, sé que todavía extraña a mi madre – yo más papá – le digo mientras le doy un beso en el cachete
– ah hija, Luis ya nos está esperando en nuestra nueva casa – Luis es el mejor amigo de mi papá, lo conocí en el entierro de mi madre ya que los tres, eran mejores amigos desde la infancia, vive en los ángeles donde ahora nosotros también viviremos
– okey pa – le digo cerrando la puerta, mientras me dirijo al auto de mi padre no puedo dejar de mirar mi casa bueno mi ex casa, cuando el carro se empieza a mover puedo sentir como todo lo dejo atrás, todos mis recuerdos, toda mi vida hasta ese momento, pero sé que tengo que ser fuerte, por mí, por mi padre y sé que nuevas cosas van a venir para nosotros, bueno eso espero.
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Reglas del destino
Roman pour AdolescentsLibro 1 de la biología DESTINO Isabella Martinez, una chica que ha pasado por un trauma que marco su vida William Bransòn, un chico con problemas de ira, una amistad de niños, que se perdio con los años, un reencuentro inesperado, nuevos sueños, n...