Desde la distancia

Capítulo cinco: Pasado parte 2

Narra: Noah.

*Flash*

6 años atrás.

–No puedo creer que me allas convencido venir.

–Vamos Noah. Llevas un año matando tus neuronas, ya es momento de que disfrutes un poco.

–Ven. Te presentaré a los demás–caminamos asia los chicos.

–Noah. Viniste–me dice con una sonrisa los chicos.

–Si. ¿Quien es esta hermosa mujer?–Bartolomeo se hacerca coquetamente a la morena.

–Ella es Melodi.

–¿Tu novia?–pregunta curiosa Valeri.

–¿Que?–los dos nos miramos–no. Somos amigos–les explicamos a los chicos.

–Ya decía yo que eras muy hermosa como para ser novia de este feo–dice burlona Valeri. La pelinegra suelta una gran risita.

–Ja.ja.ja–pronuncio sin gracia.

La noche paso realmente rápida. Los chicos tomaban con locuras, yo me tome unas pequeñas copas. Las insuficientes para mantenerme sobrio, había pasado ya un año desde que la pasaba tan bien.

Desde que reía y disfrutaba de esta manera. La noche paso realmente rápido, Melodi se encontraba realmente ebria, al igual que mis amigos. Ellos se marcharon a su casa, mientras que yo me encargaba de que Melodi no se perdiera en el camino.

–Fue una noche muy divertida–me confiesa la chica. Tambaleándose un poco.

–Si. Fue una gran noche, ya debes dormir–le pido.

–¿Dormir?–ella hace un puchero de niña pequeña. Y si nisiquiera imaginarlo.

Se me abalanza y me besa con fuerza. Yo tomo su rostro y la obligó a que me mirara a los ojos, su mirada trasmitía deseo puro. Su respiración de encontraba acelerada, la deseaba. Y su cuerpo me decía que me deseaba ah mi tambien, ahora soy yo el que besa sus labios con locura.

Mordisqueó sus labios, mientras que está solo se desase de mi pantalón. Le quitó su vestido pegado color negro, con mis labios recorro toda su espalda. Hasta parar en su cuello, este suelta un gemido. Ella se voltea y se monta en suma de mi, con sus largas y sexis piernas. Rodea mi cintura, esto era lo más caliente que había hecho en toda mi vida.

Melodi era diferente a todas las chicas con la que me habla acostado. Era sin duda alguna, la más hermosa. Super ardiente y sexi mujer con la que había estado antes, necesitaba hacerla mía. Necesitaba estar dentro de ella y acercarlo hasta que ella me pida que pare.

Me encontraba realmente ambriento. Su cuerpo era realmente hermoso, tenía una silueta tan hermosa.

Un trasero perfecto para apretar, unos medianos cenos parados y tan suaves. Una piel tan delicada y hermosa. Beso desde sus labios. Bajo hasta su cuello, hasta parar en su clavícula. Esta me aprieta con fuerza y introduce toda su lengua desntro de mi boca. Melodi trasmitía todo lo que necesitaba.

Lujuria, deseo y pasión. Era realmente ardiente y tan candente.

*Flash*

–¿Alguna vez te han dicho que eres toda una diosa?–algo andaba mal. Esta no era ella, algo raro estaba sucediendo.

–Alejate–le pide está a risas. El hombre no le hace caso y solo se hacerca más a ella, unos cinco hombres más empezaron a rodearla. La rabia empezó a correr por mis venas. Yo me hacerco a ella y la tomo de la mucha.

–Estas aquí–se encontraba realmente drogada.

–¿Quien te hizo esto?–pregunto realmente preocupado por su salud. Y tomando su rostro en mis manos.

–¿Pero que crees hace?–un hombre más alto que yo me reclama.

–Me la llevaré–le anuncio a todos. Estos asquerosos hombros empezaron a reír.

–Estas loco–me dice este desafiantemente. Intentaron tomarla de la muñeca, pero yo sé los impido. No permitiría que le hicieran daño.

–Alejense de ella ahora mismo–crei que jamás diría esto. Pero realmente agradecía que el rubio estuviera aquí, estaba acompañado de dos hombres más. Eran realmente musculosos y altos, de la misma anatomía del rubio–vete–me ordena.

–No se la llevarán a ningún lado. Ella prometió estar con nosotros–Melodi se desvaneció. Cayó en mis brazos, yo la cargo y me aseguro de que aún continua con vida.

–Esta bien. Solo se desmayó–le explicó al rubio preocupado por ella–la am drogado.

–Hijos de puta, sacala ahora mismo de aquí–ellos intentaron tirarse en sima de mi. Pero es Connor el que los aleja de nosotros, la pelea se agrando tan rápido, saco a la mi ex novia lo más rápido que pude. La mati dentro del auto y sin más acelere.

Estaba preocupado por ella. Y solo quería pensar que esos hijos de la gran puta, no alcanzaron hacerle daño alguno.