Tal Vez Lo Quiero

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A la mañana siguiente

Templo de Escorpio.

Milo seguía viendo aquella flor, pensando en quien pudo haber tenido semejante acto de nobleza por él, Camus no. El siempre le regalaba flores blancas y Rojas, de vez en cuando había recibido por parte de Kanón, pero siempre era moradas y Afrodita, bueno él le daba negras por él funeral, era lo que decía él.

Milo: Hm.. - decía pensándolo. Su ahora hijo se mantenía a su lado imitando todas sus acciones, cada gesto.

Niño: Hm... - decia imitando a su "mamá".

Después de verlo por breves momentos tomó la flor entre sus manos con una sonrisa mientras se le acercó al rostro para aspirar su aroma, pero entonces sintió cómo se la quitaron de las manos, rápidamente volteo a ver, para después darse cuenta de que Camus también estaba examinando la rosa, para seguidamente dirigirse a él.

Camus: está muy bonita mí amor, ¿Quien te la regaló? - pregunto mientras sonreía.

Milo: eso mismo quisiera saber yo, Mü me la dió ayer, dijo que me la habían dejado aquí - comento mientras se ponía de pie y agarraba al niño entre sus brazos para seguidamente irse a la cocina.

Camus con la flor en sus manos los siguió hasta que llegó a la cocina dónde se sentó en una de las sillas que estaban al lado de la isla de la cocina.

Camus: ¿enserio no sabés quién te la envío amor? - siguió interrogando a su esposo quien sé encontraba cocinando.

Milo: no, además porque debería importarte si a mí me regalan rosas ¿Eh?, Si ya tienes a Mónica para poderla celar - dijo con un tono indiferente.

Niño: Si... - dijo con su bracito alzado.

Camus: por cierto ¿Ya pensaste que nombre le pondrás? - dijo mientras acariciaba él cabello del más pequeño.

Milo: Hm... Aún no, de hecho te estaba esperando para que lo escogieramos los dos juntos - dijo mientras se daba la vuelta.

Camus: pensé que no me dejarías elegir - dijo mientras lo veía sorprendido.

Milo: bueno si no quieres, puedo escogerlo sólo además, que muy probablemente tienes mejores cosas que hacer - dijo de brazos cruzados.

Camus: no, no tampoco te alteres pues... Hay veo que estás de mal humor - Milo lo vio mal.

Milo: Hm... - dijo molestó y siguió haciendo la comida.

Camus: pongamole Pikachu - Milo regreso a verlo con cara de ¿Es enserio? - ¿muy malo verdad?

Milo: inútil - respondió.

Camus: vamos ¿porque no me ayudas?, te recuerdo que aunque yo fuera el maestro de Hyoga eh Isaac yo jamás los nombre - dijo de brazos cruzados.

Milo: si ese nombre piensas ponerle a él, no quiero ni imaginarme que nombre le llegarías a poner a un hijo nuestro si es que se da la oportunidad - dijo sin verlo.

Camus: ¿Acaso está retandome? - pregunto con una sonrisa.

Milo: ¿De que estás hablando? - pregunto mientras lo volteaba a ver.

Camus: ¿Acaso piensas que no puedo dejarte en espera de un cubito mío? - Milo empezó a reírse.

Milo: ¿Y enserio tú piensas que te voy a dejar volver a tocarme siquiera? - pregunto con una sonrisa.

Camus: ¿Me sigues retando? - Milo se alzó de hombros.

Milo: la verdad, yo dudo que algún día llegués a embarazarme, total es más probable que Mónica sea quien te de a ese hijo que tanto quieres y nosotros terminemos divorciandonos - dijo tranquilo.

Camus: Hm... A mí me huele que aquí hay celos - dijo confiado.

Milo: no son celos acuario, lo que a mí me molesta es saber que tú me obligas a llevar puesta está porquería cuando tú nisiquiera te dignas a usarla - dijo mostrándole él dichoso anillo de bodas.

Camus hasta es punto se vio la mano, dándose cuenta que en efecto no lo tenía, así que rápidamente empezó a buscarlo por sus bolsillos, mientras Milo lo veía con una ceja alzada.

Camus: ¿Dónde está? - pregunto confundido.

Milo: oh más bien, ¿En la cama de quién lo dejaste? - dijo mientras le apuntaba con la espátula que estaba usando.

Camus: no lo digo enserio, lo acababa de ir a traer a la joyería cuando me puse a hablar con Mónica - dijo mientras lo seguía buscando.

Milo: ¿Y porque diablos estaba en la joyería? - pregunto.

Camus: lo acababa de ir a reparar ya que gracias al entrenamiento que tuve con él estúpido de Shura me lo termino cortando con el escalibur, enserio créeme Milo. Yo jamás me lo quito - Milo se quedó callado, pero después siguió.

Milo: hay ¿Y porque rayos no lo vas a buscar a la casa de tú novia?, De seguro hay lo dejaste después de lo que sea que hayan hecho anoche - Camus lo vio mal.

Camus: antes que nada quiero que sepas que no hay nada entre Mónica y yo, ella sólo es una amiga - respondió molesto.

Milo: claro... "Solo una amiga" así le dijeron a Afrodita y ve, Helena ya tiene seis meses de embarazo - dijo mientras servía la comida y se las ponía en la mesa.

Camus Ya molesto con los reclamos lo tomó de la mano, eh empezó a jalarlo. Pero antes...

Camus: Camilo. Ese será tú nombre ¿Está bien? - le pregunto al niño.

Niño: Si... - dijo contento.

Camus: bien, hijo necesito que te vayas con el tío Mü, y no subas hasta que yo vaya por tí, tengo un asunto que arreglar con tú mamá - dijo mientras lo arrastraba.

Milo: ¡ya Camus por él amor de Athena suéltame! - le gritaba fastidiado.

Él niño agarró su plato y salió corriendo del templo de Escorpio, sabía que algo pasaría ahí y el aunque tenía curiosidad no podía saber que es...

Con Milo y Camus.

Camus a jalones había llevado a Milo a la habitación donde de un empujón brusco lo metió para seguidamente, cerrar con seguro.

Milo: ¿Qué diablos planeas hacer? - pregunto, más Camus no le dijo nada, sólo se acercó a él para después empujarlo a la cama y subirsele encima - ¿Que estás?

Camus: dijiste. Que yo me estuve revolcando con Mónica la noche anterior ¿No es así? - pregunto mientras se sentaba encima de él para despojarse de su camisa, para seguidamente volver a acercarse a su rostro - bueno, ya que insistes te voy a probar que no es así.

Milo: Carajo - fue lo único que dijo al saber que se había metido en un gran problema.

Continuará...

¿Que opinan?

¿Habrá lemon oh no? 👀

By: Shun de andrómeda 123

Camus él acosador [Camus x Milo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora