Fue en el año 1987, casi un mes antes de que saliera a la venta el álbum "Appetite For Destruction" de la banda Guns N' Roses, cuando el guitarrista Saul Hudson de 21 años, mejor conocido como Slash, sin ser demasiado famoso aún, conoció a una chica...
El sábado siguiente, Slash la llamó por teléfono para invitarla a su casa y ver una película juntos. Era la primera vez que Christine iba a ir a la casa de él y se sentía un poco nerviosa, ya que no sabía con qué se iba a encontrar.
Esa tarde, Slash la fue a buscar a la casa de ella para ir juntos hasta la suya, ya que no quería que ella anduviese sola por ahí. Él siempre trató de cuidarla, dejándose llevar por su intuición desde el primer momento que la vio.
(Slash abrió la puerta y ambos ingresaron)
—Por dios... —(Susurró Christine sorprendida)
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Christine:"Lo primero que vi fue un sofá gris bastante sucio con una manta de una serpiente con una mujer. Deduje que era ahí donde él dormía, la casa era una sola pieza y muy desordenada, habían varias botellas de Jack Daniel's en el piso y un cenicero en la mesada. El ambiente era un poco horripilante y tormentoso. Había un olor intenso a cigarrillo y alcohol".
—Ponete cómoda. —(Le dijo Slash y bebió un trago de Whiskey)
(Christine dejó su cartera en el sofá)
—¿Vivís solo?
—Sí, duermo acá en el sofá. Hace poco estoy alquilando, muy barato. —(Dejó la botella sobre la mesada)
—Me gusta.
—¿En serio?
—Sí... —(Lo miró y sonrió)
—Gracias preciosa.
—Lo que más me gusta es tu compañía Saul.
—Uff, gracias bombón. —(Sonrió)
—Jaja... —(Ella también sonrió un poco cohibida)
Slash le sirvió una copa de champagne que había comprado especialmente para la ocasión.
—Gracias... —(La tomó)— ¿Me mostrás tu serpiente?
—¡Sí, claro! Seguime.
(Christine fue detrás de él)
—Te presento a Clyde. —(La sacó de la jaula)
—Por dios...
—Agarrala, no te hace nada.
(Ella la tuvo en su manos)
—¿Muerde?
—No no, tranquila... Está adiestrada.
...
Slash:"Al parecer a ella también le gustaban las serpientes y las películas de terror. Era perfecta, me encantaba. Teníamos muchas cosas en común, era una gran mujer; sexy, intelectual, aplicada, seria y muy pero muy hermosa. Siendo sincero, al principio sólo quería tener sexo con ella, pero luego me di cuenta que ambos podíamos llegar a ser muy buenos amigos, no quería dejarla".
