Allister x tu [Pokemon espada y escudo]

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___ se cubrió la cabeza con las manos cuando algunos escombros cayeron del techo de las ruinas.

El gigante daba golpes a todos lados, indiscriminadamente de si había vida o no donde golpeaba y provocaba que trozos de las paredes y techo se desprendieran.

Allister esquivó por poco un golpe que el gigante propinó con su puño de piedra y tomó del suelo a Eon para ayudarlo a evitar golpes.

Los chicos estaban tan asombrados que a penas les daba el cerebro para procesar que ocurría a su alrededor.
Corrieron hacia una esquina donde estaban los rogenrolla de antes y se cubrieron.

Una nube de polvo y tierra se había levantado y dificultaba la visión.

El gigante gruñó de nuevo y golpeó el suelo, provocando un pequeño terremoto.

Varios pokemon pequeños huyeron despavoridos del lugar.

Allister miró al gigante.
Le resultaba familiar, lo había visto en algún sitio antes. Sin embargo no sabía dónde lo había visto.

—¡Tenemos que salir de aquí!—gritó la chica cuando evitaron por poco una roca que cayó del techo.

Si no salían de allí lo más probable era que acabasen sepultados bajo las piedras que caían o que el gigante los golpearse fatalmente.

Otro gruñido más, y este más alto y más agudo.

Allister tosió un poco.

—___, e-el camino está lleno de escombros, n-no podemos s-salir.

La chica miró hacia la salida y efectivamente, apenas había sitio disponible para pasar por allí.

De pronto entre la nube de polvo el gigante se quedó quieto y en silencio, de espaldas a los chicos, que se quedaron también quietos aguardando el próximo movimiento del gigante.

—___... Mi-mira

Allister señaló una abertura por la cual podrían salí de allí.

La chica tomó de la mano a Allister y este con Eon en brazos corrieron tras ella hasta llegar a la salida del templo sorteando obstáculos.

Un montañero que se había acercado al escuchar los alaridos del gigante se acercó a ellos alarmado.

—¿Estáis bien?—les preguntó al ver que salían del templo.

—Mas o menos... Creo que no tenemos heridas graves...—dijo la chica

Allister solo abrazó a Eon.

—Vamos al pueblo, la nieve cae bastante fuerte.

Los tres tomaron un camino que rápidamente los llevó al pueblo.

El hombre los llevó a una de las casas, donde los recibió una chica de más o menos la edad de ___.

Les curaron algunas heridas menores que tenían y les preguntaron que había ocurrido en las ruinas.

—No lo se exactamente—dijo ___— pisé unos círculos que había en el suelo, se iluminaron y apareció el gigante...

Eon estaba bajo una manta al lado de su amiga y dueña.

Allister solo asentía.

—¿Os ha empezado a atacar así de la nada?—preguntó el hombre

—Si...

—Oh disculpa, no nos hemos presentado, yo soy Peony y mi hija es Ariette—la chica sonrió

—Yo soy ___ y este es Eon—dijo acariciando a su eevee

—Y-yo s-soy... —a Allister se le trababa la voz al querer decir su nombre

—¿Eres Allister verdad?—dijo Peony. El niño asintió algo nervioso—¡Es un placer! Yo era líder de gimnasio de tipo acero.

Allister se colocó bien la máscara y giró la cabeza

—Papá deja a los invitados tranquilos, los acaban de atacar—dijo algo molesta Ariette

—Oh de acuerdo, disculpas—juntó las manos en señal de disculpa—os dejo descansar, os podéis quedar en el sofa—y dicho esto salió del salón con su hija.

___ se dejó caer en el sofá al lado de su amigo y suspiró.

—¿Cómo sabían tu nombre?

El chico se encogió sobre sí mismo.

La chica lo miró extrañada.

—¿A caso eres famoso o algo?—dijo claramente en broma, pero el chico seguía sin responder.

—Hum...  No se... Yo...

___ se rindió y miró lo que había en el salón en el que estaban. Había varios libros que hablaban sobre leyendas y gigantes.

La chica tomó un libro que decía «El gigante de piedra» y lo abrió por una página cualquiera.

Tan grande fue su sorpresa al ver en uno de los dibujos la misma criatura que los había atacado.

—¡Mira Allister!

El chico y el eevee se acercaron

—Hm... ¿Q-que pasa?

Le mostró el libro en el que aparecía el gigante de piedra.

—¡Y-ya se dónde lo he vi-visto antes!—exclamó el chico— es uno de los re-regis

—¿Un regi?

—¡S-si! El que nos atacó es Regirock, un pokémon legendario

Eon dió un salto de sorpresa.

—¡Evoi!