Chris suspiró cansado al estacionar su auto en la cochera, el silencio reinaba en su vecindario; eran las seis de la mañana y todo era tranquilidad, eso era una de las cosas que más amaba de Boston; su tranquilidad y privacidad. Entró por el garage a su casa la cual estaba en calma, dejó su maleta de ropa sucia en la lavandería y decidió subir a la planta alta sin antes sonreír ampliamente al ver la mesa de la cocina llena de diversos postres tal parecía que Anne había pasado toda la noche horneando y decorando los aperitivos para la cena de Acción de gracias, al llegar a la planta alta entró a su habitación dónde encontró a Dodger dormido sobre la alfombra cerca del calor de la chimenea, sonrió de medio lado al observar a su novia dormida acurrucada bajo las cobijas, sin hacer tanto desorden se adentro en el baño para limpiarse después de una noche exhausta grabando su proyecto más reciente.
Mas tarde se adentró en la cama vistiendo tan sólo un chandal, se colocó de lado observando a su novia dormir.
Anne era un estuche de monerias, dueña de diversas pastelerías en Massachusetts, escritora en sus ratos libres y una novia extraordinaria, Chris se sentía afortunado de haberla conocido casualmente en una de sus pastelerías una tarde lluviosa que decidió pasar por pan caliente para merendar; llevaban seis meses de relación.
Los mejores para Chris.
La castaña suspiró moviéndose de su lado quedando pegada al hombre quien la atrajo a sus brazos haciendo que despertara.
- ¡Hey! - Anne saludó somnolienta, poco a poco abrió sus ojos encontrandose con su novio frente a ella - te ves cansado.
Chris sonrió llevando sus labios hasta los de su novia quien suspiró.
- Quince horas seguidas de rodaje, estoy acabado, vi que dormiste tarde.
- Debía tener todo listo para impresionar a los Evans, recuerda que Miles es mi cliente estrella.
Chris asintió recordando las veces que su sobrino lo había acompañado a la pastelería con la intención de sólo verla.
- Todos en casa te adoran cariño, eres la favorita.
Anne soltó una carcajada, se reincorporó sobre la cama para irse al lado de su novio para acurrucarse, besó el pecho desnudo del actor y después acarició las mejillas rojizas del hombre quién le dedicó una bella sonrisa.
- Y yo los adoro a ellos - Anne besó los labios de su amado, quien la retuvo al intentarse alejarse, Chris volvió a besarla pero esta vez con más intenciones - alguien usa mis playeras como pijama - Anne soltó un leve gemido al sentir las manos de Chris levantar la prenda hasta sacarla de su cuerpo, la mujer se mordió el labio al caer sobre el colchón desnuda.
Chris respiró bruscamente al verla ante él - ¡Annie, Annie! Vas a matarme algún día.
La mujer lo atrajo hacia ella haciendo que se acomodara entre sus piernas, agilmente se deshizo de la ropa del hombre que le estorbaba, besos, caricias y gemidos fueron sus acompañantes en aquel romántico momento; Chris se encargaba de marcar aquel cuerpo con sus besos y caricias.
- Demasiada paciencia Evans - Annie arqueó su espalda al sentirse estimulada por el hombre quien a su vez devoraba los senos de la mujer que se retorcía de placer bajo él; afuera el sol comenzaba asomarse débilmente y aquellos amantes apenas iniciaban.
- ¡Chris! - Annie enterró sus uñas en el hombro del actor quien la embistió con arrebato, sus labios se encontraron, asi como sus cuerpos se sincronozaron haciendo el amor aquella fría mañana.
Ambos agitados después de tocar la gloria se acurrucaron bajo las cobijas disfrutando del silencio acogedor que los habia envuelto, Chris besaba la frente de Anne quien acariciaba el brazo de su novio, pensativo, Chris recordó lo maravillosa que había sido su vida desde que la había conocido.
- Te amo Annie...
La voz de Chris la hizo salir de sus pensamientos, intrigada se giró para enfrentarlo.
- Te amo tanto Annie, no hay duda que quiero estar contigo siempre.
Los ojos de Anne se inundaron de lágrimas mientras su corazón se regocijaba de alegría, el actor jamás le había dicho aquellas palabras, ni ella a él, pero ella también lo sentía.
- Te amo Chris, yo tambien te amo tanto mi amor.
Ambos rieron de nervios, suspiraron pegando sus frentes felices ante aquella sensación de paz.
- Vente a vivir conmigo, formemos una familia cariño.
Anne asintío mientras llevaba sus labios a los de su amado para cerrar con un beso aquel pacto de amor.
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