41

393 49 53
                                    

Magnus se había ido con Camille y me sentía tranquilo por primera vez en nuestra relación. No dejaba de ver mis pulseras las dos eran hermosas.

-Max: Esa pulsera es horrenda.

-¡¿Qué?!

-Max: Si, los hilos todos enredados y chuecos.

-Callate. Es perfecta.

-Max: Estas super enamorado ahora.

-Creo que siempre lo he estado.

-Max: Era raro verte sufrir por el cuando por lo general casi siempre era al revés.

-Supongo que pague mi karma.

-Max: Supongo. Ya es tarde. Tengo que ir a trabajar.

-Suerte.

-Max: Vuelvo tarde.

Se levantó del sofá y tomó su mochila. Me alegaba ver que Max si había seguido con su decisión de estar limpio.

Empezó a sonar mi celular, era un número desconocido.
 
-¿Hola?

-Homero: Hola guapo ¿Me recuerdas? Soy el guapo del club.

-¡Hola Homero!

-Homero: Alec ¿cómo estás?

-Bien ¿y tu?

-Homero: Excelente. ¿Por qué no salimos esta noche? Vienes a cenar al restaurante y después nos vamos por unos tragos.

-¡Claro!

-Homero: Bien, te espero aquí a las siete.

-Ahí te veo.

-Homero: Chao.

Colgó. No puedo creerlo. ¿Mi suerte esta cambiando? La relación con mi mamá va mejorando, todo con Magnus es hermoso, ahora tengo un amigo ¿qué más puedo pedir?

Presidente se acostó a lado de mi y yo me puse a ver mi celular. Magnus había publicado una foto con su hija. Se veía muy bien, Magnus tenia una camisa negra y Ana por lo que podía ver en la foto tenia un vestido rosa y una Diadema blanca, sus ojos de ambos eran iguales.

Si no le agradaba a Ana lo nuestro no va a funcionar y creo que es una de las cosas que más me causan conflicto de Magnus, amo qué ponga a su hija sobre todas las personas porque es lo que un padre tiene que hacer, hubiera querido tener un padre así... Qué me eligiera a mi en vez de su pareja como en juego de gemelas, el papá elije a las niñas sobre su prometida y luego sus papás se vuelven a casar, esa es la fantasía de todos niños con problemas familiares.

Pero ahora me toca a mi ser la prometida, excepto qué no soy malo... Bueno no tanto. No trataría mal a Ana... Creo, bueno si ella me provoca... ¡¿Qué estoy diciendo?! No me puedo poner a pelear con una niña de doce años que debe estar confundida porque su padre esta con otra persona.

Para ganarme a Ana debo ser paciente pero si ella me odia a pesar de todos mis esfuerzos o es una niña malvada... No creo, es hija de Magnus... No, esa es una buena razón para creer que puede ser malvada.

No se porque entro en conflicto si todavía no es tiempo de conocerla. Llevo poco tiempo saliendo con su papá y no nos vamos a casar pronto por lo que se. Así que tomaré las cosas con calma... Espero.




























Me estaba arreglando para salir con Homero cuando Magnus me llamo.

-Hola amor.

-Magnus: Hola mi amor. ¿Cómo estás?

El Último Intento. (MALEC) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora