El Apple Watch en su muñeca marcaba la media noche, así que frunció el ceño fastidiado cuando el timbre de su duplex sonó interrumpiendo su maratón de Rick & Morty. Zain se puso de pie con pesar, abandonando su cómodo lugar en el sofá para atender a quien fuera que estuviera del otro lado de la puerta. No esperaba a nadie, de eso estaba seguro.Abrió la puerta sin preguntar, y formó una sonrisita de comemierda mientras se apoyaba en el marco, observando con fingida burla a la persona del otro lado.
—Es que eres increíble. —murmuró meneando la cabeza.
Liam Payne tuvo la descendencia de parecer avergonzado, antes de cuadrar los hombros y devolverle la mirada de forma retadora.
—Necesito hablar contigo. —respondió cruzándose de brazos.
—Tú y yo ya no tenemos nada más que hablar, Liam.
—¡Por supuesto que sí! —el castaño elevó la voz indignado. —Estoy harto de ti y tus estúpidas acciones, que sólo me traen problemas.
Zain le rodó los ojos.
—¡Estoy hablando en serio, Malik!
—Escucha, baja el tono de tu voz. —el moreno amenazó, enderezado en toda su altura. —No necesito otra charla, ¿de acuerdo?
—No me importa lo que necesites, —Liam golpeó su hombro con un puño. —Yo necesito que me dejes en paz, pero no lo haces.
—No soy yo quien está en la puerta de tu apartamento, pidiéndote hablar.
Liam boqueo, antes de arrugar los labios y mirarlo mal.
—Estoy aquí, porque necesito un cierre.
—¿Un cierre? —Zain repitió burlón.
—Sí, —Liam respondió señalando entre ellos. —Un cierre para esto, sea lo que sea.
El moreno sonrió sin mostrar los dientes, tratando de ocultar que no le gustaba para nada hacia dónde iba esta conversación.
El castaño frente a él había sido su novio por tres años, y todo había terminado hace seis meses. Bueno, algo así.
La relación oficialmente había terminado hace seis meses; pero ellos seguían viéndose, celandose, comiéndose y odiandose en todo ese tiempo. Liam siempre había tenido un carácter fuerte que a Zain le encantaba, el castaño era posesivo y pasional, pero también era manipulador e interesado. Zain se había esforzado por seguirle el ritmo, pero Liam nunca había estado satisfecho.
En fin, al moreno no le importaba, ellos podrían haber terminado pero Liam seguía siendo suyo. El chico lo buscaba y lo provocaba, lo picaba tanto que terminaban siempre uno encima del otro. Y mientras Liam siempre volviera a él, entonces para Zain eso era suficiente.
Las cosas cambiaron un poco hace un mes, sin embargo. Liam empezó a salir con el estúpido capitán del equipo de fútbol al que también pertenecía y Zain simplemente sonrió cuando luego de su primera cita, Liam terminó siendo deliciosamente follado por él. El moreno sabía que era uno más de sus caprichos, nada serio, nada de qué preocuparse.
Pero varias citas, regalos y detalles caros después, Liam había aceptado ser el nuevo novio de Alex Rusell, poniendo así fin a su etapa con Zain Malik. O al menos eso creían todos.
Las cosas no cambiaron mucho luego de la oficialización de aquella nueva relación. Sí claro, a Zain le tocó soportar ver a su ex de la mano de su nuevo novio todos los jodidos días en la universidad. Pero también era divertido molestar al castaño en las narices de su novio, ponerlo nervioso y hacerlo enojar hasta que terminaban discutiendo en algún cubículo del baño. Generalmente esas discusiones terminaban con una mamada o una follada rápida.