New Life ¡Reencarne en mi RPG favorito! (boyxboy - yaoi)

Una muestra de piedad

Recuerden letras en negrita son pensamientos.

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Sobra decir que el viaje fue bastante incómodo, una incomodidad directamente proporcional a lo arcaico de los carruajes medievales, los asientos eran bastante duros a pesar de estar forrados con cuero sobre una variedad de capas compactas de tela que aunque daba cierta suavidad aún seguía siendo bastante incómoda, sin mencionar la falta de una adecuada suspensión por lo que el carro se agitaba bastante por los irregulares caminos de tierra y ni hablar de la falta de cinturones de seguridad y la tela de su pantalón se resbalaba sobre el cuero lustrado del asiento por lo que debía hacer un esfuerzo por mantenerse sentado en el asiento sin deslizarse hasta caer en el suelo y además una adecuada postura digno de un noble como le había instruido su padre que lo evaluaba en silencio total. Apoleon pensó en respuesta a la mirada crítica de su padre -Para ti se hace más fácil mantenerse en el puesto porque tus piernas llegan al suelo y eres más pesado, yo no puedo. Odio estos estúpidos carruajes y extraño mi comodo y silencioso Rolls...

Cuando llegaron a las inmediaciones del Gran Pueblo, el nauseabundo y característico olor a mierda de los pozos de desechos de estos pueblos de la edad media sin magos ni sistema de cañería llegó hasta el carruaje y la nariz Apoleón quien sintió escalofríos recorrer por su cuerpo y una horrenda sensación en el estómago, el hogar de los Maltus también tenía ese olor en ciertas partes de la Gran Torre y el Castillo en las tardes por donde están los baños pero era camuflado por flores frescas cambiadas todas las mañanas y los fondos de las letrinas limpiados por los esclavos de los que Apoleon se compadece. Sinceramente la vida en ese edificio híbrido de castillo medieval y palacio es bastante malo en comparación al estándar de vida mínimo de su antiguo mundo. En calidad y condiciones de vida es como viajar al pasado de europa antes de la peste bubónica pero con magia y algunas ropas y cosas de la era de Napoleón. Definitivamente una cosa era ver los defectos o particularidades del mundo antiguo  desde la pantalla de la PC y otra cosa ver cada feo detalle de cerca en la vida real. Si iba a adquirir aquel dominio en la lejana costa montañosa del Este lejos de toda la guerra, se aseguraría de darle calidad de vida a sus habitantes, sobretodo para asegurar y aumentar sus propios ingresos, evitar rebeliones, generar lealtad y mejorar su propia calidad de vida en el proceso. Era un egoísmo filantrópico en toda regla, algunos de su antiguo mundo cuestionaria esa forma de pensar, pero era lo más racional y seria hipócrita de su parte de decir que solo los ayudaría por ser un buen samaritano y nada más. -Quizás en el futuro cuando tenga tiempo podría escribir un libro sobre esta filosofía del egoísmo filantrópico, ser el creador de una corriente de pensamiento que perdure en el tiempo es bastante tentador... pero eso lo haré después de instalar un maldito sistema de cañerías y agua limpia, que horrendo olor.

El menor no pudo evitar hacer una mueca de asco que fue respondida con una ligera risa de su padre -Es asqueroso ¿no? El olor de esos inferiores plebeyos es repugnante, son peor que nuestras letrinas. Otra razón más por la que no son más que piezas útiles para servirnos, sus vidas nos pertenecen porque es la única forma en que tienen valor alguno, ya sea para atender necesidades, generar alimento, entretenernos o pelear por nosotros, y aún así son desechables, ese es su único lugar en este mundo junto a la mierda desechada y apestosa si no pueden servirte de nada. Siempre recuerda eso cuando percibas ese olor nauseabundo.

Apoleon lo vio serio mientras tapaba su nariz con su brazo, respirando a través de la tela perfumada de la manga de su chaqueta, y mordiéndose la lengua para no decir algo de lo que se podía arrepentir se limitó a dar una silenciosa y muy corta seña afirmativa con la cabeza como respuesta.

Su padre luego agregó -También detesto venir a este lugar asqueroso pero es algo necesario, para recordarles a estos seres quien manda.- Luego dirigió su atención hacia el exterior para ver a las gente inclinando la cabeza. Complacido por ver que nadie se atrevía a levantar una mirada.