Todo lo que pudimos ser- TOM RIDDLE

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Capítulo 04: ¿Niña o niño?
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-¡Lani!

El grito de Tom me despertó, gruñí enojada mientras me levantaba... Maldito egoísta de mierda llamado Tom Riddle.

-¡Lani vuelve acá!

Lo escuché correr por la casa, seguro Lani había agarrado alguna cosa de él y estaba como loco intentando atraparla.

-¡Maldita bola de pelos, te voy a matar y diré que fue un infarto perruno! -al darse cuenta de que ya estaba despierta se aclaró la garganta. -Era bromeando, Lani, te adoro con mi alma

Rodé los ojos y caminé al baño para cepillarme, estaba exhausta porque ayer después de estar en casa de Chris y Draco decidimos que sería excelente idea salir a caminar.

No salió bien.

-Buenos días, amor -Tom entró al baño y me dió un beso en la mejilla. -Buenos días, pulga

Sonreí viendo como dejaba un beso sobre mi barriga abultada. Era todo un tierno cuando se lo proponia.

-Buenos días, Tommy

-No me digas Tommy

-Ok... Tommy

Salí corriendo del baño con él persiguiendome, nuestra risa resonaba por toda la casa mientras yo intentaba huir de Tom.

-¡Bonita, ven acá!

-¡Atrapame si puedes, Tommy!

-¡Basta! -lo escuché reir mientras yo salía al patio. Lani empezó a ladrar mientras corria junto a nosotros.

Llegué hasta la piscina y no encontré salida, había sido atrapada por lastima.

Oh...

-¡ESPERA! -el grito de Tom fue interrumpido por el sonido del agua.

Si, me lancé a la piscina.

¿El lado bueno?, Tom no me atrapó.

-¡¿Estás loca!? -Tom estaba en la orilla con sus manos en la cadera viendome molesto. -Ya salte, te puedes resfriar

Recordé aquella noche en el hotel donde hice exactamente lo mismo. Solté la risa mientras me volvia a sumergir.

-¿De que te ries? ¿Viste que si estas demente?

Negué. -Ya calmate

-Ningún cálmate, sal de ahí o iré a buscarte

Me volví a sumergir entre risas.
Cuando dirigí mi mirada a Tom lo encontré entrando a la piscina por las escaleras, me miró enojado ya que el clima no estaba muy bueno como para meternos en la piscina.

-Debes de estar demente, loca y desquiciada, ya salte de este hielo -lo escuché temblar y volví a reirme. - No da risa, en serio

-Ok, ok, pero cargame

-Joder, bonita -suspiró molesto viendo al cielo pero al final nadó hasta mí. -Sostente

Pasé mis brazos por su cuello y cuando iba a cargarme lo hundí en el agua al mismo tiempo que yo me sumergia.

Al salir de nuevo me miró entre molesto y divertido, sonreí inocente y acaricié su rostro.

-Ya cambia esa mueca, pareces más odioso de lo que eres

Rodó los ojos. -Me estoy congelando y tú no ayudas en salir de aquí rápido

Hice un puchero. -¿Cocinamos juntos?