Capítulo 21

3.4K 181 458
                                    

Era un hermoso y soleado sábado, la primavera se hacía sentir en su máximo esplendor.

- Me llevaré a Katsumi de paseo.

- ¿Quieres que te acompañe? - No le gustaba la idea de que salieran solas.

- Deku e Iida-kun pasarán por mi, nos juntaremos con Tsuyu y Todoroki-kun en el centro comercial. - Eso sonaba mejor, el nerd sí calificaba como un guardián aceptable.

- Bien, diviértete. - Volvió a bajar la cabeza en dirección a la computadora.

- ¿Quieres que te traiga algo? - Lo abrazó por detrás.

- Mmr... - Se detuvo a pensar un momento. - Pastel de chocolate y naranjas.

- ... - Oh, no se esperaba eso, comenzó a sonreír. - Si extrañas hablar con ella, simplemente deberías ir a verla, estoy segura de que se alegrara que vayas.

- Tks, ¿quien demonios te dijo que...

- Nishio-kun mencionó que no se ha encontrado muy bien de salud.

- ...

- Él se preocupa mucho por ella, dice que siempre está tan al pendiente de todo lo que pasa a su alrededor, que no es capaz de poner atención en sí misma.

- Mmr... no he tenido tiempo de...

- Fufuf, lo sé, tranquilo, le enviaré saludos de tu parte. - Terminó de decir para luego dejar un corto beso en sus labios.

- ...

Uraraka se fue junto con la bebé, ambas iban de vestido... tan lindas... pensó.

El cabello de Uraraka había crecido bastante, y a su parecer, era lo más jodidamente hermoso después de su hija claro.

Pero deteniéndose un poco en lo que le había dicho antes de irse... Maldición, así que la vieja estaba enferma, que extraño, si se veía hasta más joven que Aizawa... debe ser el estrés, tal vez, solo si tenía un poco de tiempo, un día de estos iría él mismo a por un café de canela picante.

La maldita lo acojonaba un poco, tal vez por eso evitaba mirarla a los ojos y tener charlas demasiado extensas con ella, después de todo, siempre terminaba huyendo a mitad de la conversación.

Sabía que era una buena persona, pero por alguna razón había algo más allá de su buena mano para la cocina que la rodeaba de misterio...

La anciana era mucho más de lo que aparentaba, por lo menos esa era la sensación que tenía de ella.

.

.

.

- Rio-san.

- ¿Qué quieres ahora, simio con astigmatismo? - rió con maldad.

- ... - No reaccionó a su broma, ella esperaba un clásico "que voy a querer de ti, anciana maleducada".

- Oye, niño estás bien?

- No soy un niño, voy a cumplir 23.

- Jum? Ah, si? - Arqueó una ceja.

- Debe cuidarse como corresponde, es muy madura y sabia para muchas cosas, pero cuando se trata de usted, se comporta como una mocosa.

- ...

- ...

- Tampoco es para que te enojes, bobo. Alguien tiene que hacer funcionar este negocio y cuidar de todos ust...

Señor Ausente (Kacchako) Boku no HeroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora