~Danielle Conway~

Extra #2. Cada año... por tí

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(Finales de 2001, Los Santos)

Narrador Omnisciente

Esa tarde de Noviembre era preciosa, el frío de la época era neutralizado casi por completo por el radiante sol que se mostraba en lo alto del cielo azul con nuves blancas. Se podía escuchar canto de las aves, el sonido del mar en la distancia junto con las risas del par de niños correteando por el lugar, era algo idílico, justo como lo había descrito Julia.

-Te dije que era hermoso - dijo al ver cómo su esposo tenía su vista perdida en el horizonte

-Es bonito, sí. - accedió encogiéndose de hombros para quitarle peso a sus palabras

-Vamos, no me seas así Jack - la pelirroja se inclinó levemente hasta darle un pequeño empujón con el costado de su cuerpo -Es mucho mejor que dónde tú quisiste ir, acéptalo cariño, yo gané.

El pelinegro entornó los ojos pero finalmente asintió con una pequeña sonrisa

-Vale, si… es mucho mejor lugar que dónde yo había dicho. Pero que sepas que lo acepto porque soy increíblemente bueno y no tengo necesidad de ganar en todo como tú - dijo mientras acomodaba una de las esquinas de la manta dónde estaban sentados, el tono de perdedor renegado en esas palabras hizo reír a ella, apollando su cabeza en el hombro Jack, mirando a sus hijos jugando a la distancia

Conway no veía importancia en dónde debía ser el lugar, así que había propuesto que fuera en el mismo bosque de la ciudad. Pero parecía que para la cobriza era mucho más importante, ella fue la que un día le había comentado la idea con ilucion y brillo en sus hijos azules.

Él no comprendía del todo porque tanta euforia por plantar unos árboles pero si eso quería su mujer, así lo harían

Ahora que lo pensaba nunca le había dicho el porque de esa acción, simplemente algunos días después llegó con un par de cedros de un año de edad, con sus raíces en unas bolsas negras biodegradables, listos para ser sembrados y poder crecer fuertes y grandes.

Cuando los vio no pudo evitar sonreír, eran el mismo tipo de árbol de aquel bosque donde había conocido al amor de su vida, no creía que fuera coincidencia...

-Juls… -  la llamó en un susurro, la cercanía facilitaba esa comunicación. Al escuchar un sonido afirmativo de la garganta de la pelirroja prosiguió -¿Por qué hacemos esto? - preguntó pero rápidamente agrego -Que no es que me queje de pasar la tarde así, para nada. - Conway llevaba un par de años siendo Comisario de Los Santo por asignación del gobierno y era agobiante, casi no le daba tiempo de estar con su familia y momentos así le traían paz  -Es solo... ¿Porque dos árboles?

-Pues… no lo se, me pareció una buena idea para una tarde familiar. Ademas así dejaremos nuestra marca, algo que nos ancle a este lugar, a este momento. - entrelaza sus dedos con los de su esposo y ambos bajan su mirada allí antes de regresarla a sus hijos -Seria como algo especial para nosotros cuatro, un lugar que crezca junto con nuestros hijos, que no desaparezca, algo como un refugio, un lugar seguro - en un rapido movimiento se despegó de su cuerpo, entusiasmada y con esa alegría contagiosa que Jack solo veía en ella -Imagina que nos separamos, nosotros--

-Yo no me separaría de ti - la cortó con total honestidad, viendo su sonrisa enternecida

-Si pero… imagina que sucede… Este podría ser el lugar perfecto para un rencuentro, ¿No lo crees? En plan… tal vez exactamente un año después de la separación volveríamos aquí y nos veriamos de nuevo. Se que suena tonto pero me pareció bonita idea, incluso hasta romántica… la leí hace un tiempo por ahí. - se encogió de hombros para recostarse nuevamente contra el azabache

Un silencio agradable se instaló entre la pareja

Julia seguía fantaciando en su cabeza, siempre fue de hacerce miles de historias imaginarias, desde pequeña soñaba con tener una familia, a diferencia de su hermana que solo quería ser alguien importante en el mundo, una jefa entre jefes. Ella no, ella solía pensar en lo lindo que que podía llegar a ser tener un amor de toda una vida, hijos que te amaran incondicionalmente y un futuro lleno de felicidad. Eso nunca fue muy factible para ella teniendo en cuanta que desde joven había sido alistada en el ejército, terminado de Doctora milicilal. No creía que sus fantacias fueran posibles hasta que llegó Jack y le mostró que todo lo que había soñado podía llegar a se real, que podía experimentar más amor del que nunca había creído y más dicha de la que había tenido a lo largo de su vida. Era feliz en esos momentos

Por otro lado estaba Jack pensaba en lo que su mujer acababa de decir. El nunca había tenido un lugar fijo en el cual vivir, mucho menos uno en el que depositar una carga emocional como la que ella quería que fueran aquellos árboles. Le parecía extraño y nuevo, le daba miedo incluso ser dependiente de algo como eso, pero como todo en su relación con con Julia, sería nuevo, extrañó, aterrador incluso, pero jodidamente fasinante. Desde ese punto de vista ahora quería que todo lo bueno que pasará en su vida, lo pasarán allí. Ya se veía celebrando aniversarios, cumpleaños, tal vez la graduación de sus hijos, o sus primeros logros en la vida, que estaba seguro querría estar para ellos.

Tan consentrado estaba en ese pensamiento que cuando la voz de su mujer llegó a sus oídos se sobresalto un poco

-¿Lo harías?

-¿El que?

-Venir después de un año…

-Vendria todos los años, sin falta, por ti.

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Epaleee ¿Que tal? Meses sin pasar por aquí.

Solo quería dejar este extra cortito que se me ocurrió.

El final bueno aún no lo descarten, está en proceso, solo no he tenido inspiración para escribir nada últimamente. Además estoy liada siendo pasante en una empresa y el tiempo no es que me sobre

Pero de qué termino esta vaina, la termino.
Gracias por los más de 30M son un amor 💕

Pronto vuelvo con Danielle.
Y en mi otra historia (Volkacio) estoy esperando que acabe InfamesRP para escribir a gusto sobre ellos

Byeee 💕💕💕