El Embarazo de KyungSoo (parte 2)

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De ahí en lo que viene el parto no fue tan lindo, sus contracciones empezaron a las dos de la mañana para ser exactos.

Todo lo que era su parte baja de su cuerpo sentía calambres los cuales le hacían imposible moverse, y en su cadera era tan horrible el dolor, era como si alguien le estuviera golpeando con un martillo.

Lloraba por tratar de ponerse un suéter pero ni eso podía. ¿Cómo saldría de ahí? Finalmente apenas y pudo salir de ahí para caminar por la oscura y fría noche de aquel lugar, exponiéndose a que le pasase algo. Mientras que ese hijo de puta llamado JongIn, en ese momento estaba en una cama durmiendo calientito sin ninguna preocupación.

O eso era su pensamiento de KyungSoo.

Una vez que al salir el omega divisó un teléfono público con dificultad marcó a emergencias diciéndoles que estaba por dar a luz. Y es que cualquiera podría decirse ¿por qué no pedir ayuda a sus vecinos? Simplemente KyungSoo desde lo que había pasado con su ex pareja se había cerrado a recibir ayuda de alguien, ahora entendía que la perra vida no es tan buena y que nadie da algo sin recibir a cambio.

La mierda absoluta en este patético mundo.

Así que el omega veía por si mismo como podía, una vez que le contestaron del otro lado dio su ubicación exacta y la ambulancia no tardó en llegar al lugar para subir al omega y llevarlo al hospital.

Le iban diciendo lo que hiciera para que se relajara pues su presión iba muy alta, no podían realizar una cesárea así. Aunque a decir verdad Kyungsoo no quería, deseaba que fuese un parto natural.

Llegando al hospital fue trasladado a un área de partos donde estuvo ahí, se bajaba de la camilla, se movía, no podía estar quieto pues los dolores eran demasido intensos no eran lo suficientemente para ya meter al omega en una sala de partos, a decir verdad debían de esperar un poco más sin embargo a ese paso que iba, al omega ya le estaban dando cada 15 minutos pero para suceder el nacimiento de su bebé debían de darle de tres a cinco contracciones cada diez minutos.

Así estaba demasido inquieto que no se quedaba en un solo lugar.

Siendo las cinco de la mañana le llevaron algo sumamente ligero como una manzana y un yogurt, para que comiera, y aunque apenas pudo comerlo por el dolor junto al cansancio que sentía ya tenía algo en su estómago, a decir verdad, tenía cerca de dos días que no comía nada claro está que era demasido malisimo para su estado en el que se encontraba.

Una vez que dieron las 9:33am KyungSoo rompió fuente y fue ingresado ya a la sala de partos, donde se movía desesperado y su rostro sudoroso y cansado de toda la noche estar en vela no era para más, ya estaba agotado sin embargo daría sus últimas fuerzas por su cachorrito que debía de conocer el mundo.

Solo escuchaba a lo lejos como los doctores se movían y le pedían que hiciera un poco más de fuerza, la cabeza de su bebé ya estaba. Claramente que KyungSoo lo sentía pues es algo que su cuerpo estaba expulsando.

Su ano había dilatado lo suficiente como para dar el paso de su bebé, a lo cual después de tres pujidos que dio, su cachorrito ya estaba conociendo ese mundo. Lo supo cuando él llanto inundó la habitación, apenas si podía ver pues estaba sudoroso, sin embargo su cuerpo le exigía que volviera a hacer el esfuerzo de pujar de nuevo. No entendía porque, su bebé ya estaba fuera ¿no? Las ganas inmensas de volver a pujar le llegaron por lo cual sintió de nuevo las contracciones, ahí ya no pudo ahogar su grito lo soltó para encorbarse un poco y sentir como se abría paso algo ¿placenta? No fue si no hasta que escucho al doctor decir:

—Es una niña... Nació un niño y una niña.

Fue cuando todo lo que pasó se le olvidó, ¿había escuchado bien? Una niña y un niño, había dado a luz dos cachorros, dos cachorritos... No podía creerlo, pero aunque en ese momento quería verlos, quería saber si era verdad no pudo ya que su cuerpo le pedía descanso.

Finalmente cayó dormido, sin saber que más. El agotamiento se apoderó de su cuerpo. Mientras que los doctores le limpiaban y bañaban a sus hijos, KyungSoo descansaba tranquilo, lo pasaron a su habitación para dejarlo. Ya cuando despertara le llevarían a sus cachorros.

Aunque claro que no pasó mucho tiempo en el cual, él omega abrió sus ojos para ver a su alrededor, supo que estaba en una habitación aparte pues no había ruido, el techo y las luces blancas era lo único que veía en ese momento.

Apneas volteo la cabeza vio a la enfermera que estaba midiendo algo y escribía en su tabla. Su mano con debilidad la dirigió a su cabeza para tratar de aclarar su vista que en ese momento estaba un poco borrosa.

—Veo que despertaste, avisaré al doctor para que traigan a tus hijos.

Mencionando eso, la enfermera salió de ahí para hacer lo que le había dicho. KyungSoo no respondió sólo se quedó mirando de nuevo el techo, apenas habían pasado un par de horas de su parto y estaba adolorido de todo.

Así que lo único que quería en ese momento era ver a su hijo... ¿Hijos? Recordaba, había escuchado al doctor decir cachorros, ¿un sueño? Si tal vez si era un sueño.

Poco le duró ese pensamiento cuando escucho la puerta ser abierta y al girar su cabeza vio al doctor entrar por esta seguido de dos enfermeras las cuales cada una empujaba un carrito de cunero. Al ver aquellas dos mantitas no evitó el llorar.

Lloraba, tenía sentimientos encontrados, ahora no era solo un cachorro, eran dos. Dos pequeños a los cuales les daría todo de acuerdo a sus posibilidades, lloraba de impotencia pues en ese momento no tenía una buena solvencia económica.

No fue hasta que las enfermeras le pusieron a sus hijos en sus brazos que se le olvidó todo, era como si el tiempo se parara. Ver sus pequeños rostros, ver cómo estaban, sobre todo que esos pequeños eran tan bellos los seres más hermosos que pudieran existir.

Ahí fue cuando su mundo de KyungSoo se paro y se prometió con el alma que protegería a sus hijos de todo, y les daría lo más que pudiera, finalmente esos pequeños eran su motor para seguir y claro que lo haría.

Por sus hijos, KyungSoo es capaz de todo. Porque el instinto de una madre es más fuerte que el estúpido disque amor de un pelele cualquiera.

Y KyungSoo, les enseñaría lo bueno a sus cachorros y se prometió que los protegería.

Los protegería con su vida.










Hola, estoy trabajando en el Book Trailer de la primera temporada. Gracias por su paciencia. Nos leemos, byebye.

Anie-KyMs

Sanado con tu AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora