ѕωєєт αℓρнα ━ ηαмѕєσк

𝟷𝟶

Dos meses habían pasado desde que el Alfa y el Omega se entregaron al otro, Namjoon dos veces anudo a Hoseok, y Hoseok dos veces fue feliz tomando la esencia del Alfa.

Ahora, Hoseok y Namjoon estaban realmente felices, iban a tener a su primer cachorro.

Hoseok efectivamente había quedado embarazado de su alfa, esto puso contentos a ambos. Incluso lloraron de la felicidad.

Sus familiares y amigos también se alegraron por ambos, a pesar de ya ser felices los dos solos, ya era hora de tener otra pequeña felicidad en aquella familia.

Namjoon había dejado su empresa a cargo de Seokjin, su mano derecha por así decirlo, y de reemplazo de Hoseok llamaron a Jimin, un muy buen bailarín.

Ambos se habían tomado un descanso para poder cuidar y recibir bien a su futuro cachorro. Namjoon no dejaba a Hoseok hacer muchas cosas por su cuenta.

Namjoon no quería que su Omega y su cachorro creciente en el vientre de Hoseok les pasará algo malo. Cómo caerse o golpearse por accidente.

El tierno alfa estaba nervioso por eso, incluso no dejaba levantar a su dulce omega de la cama salvó para ir al baño.

Namjoon era un Alfa muy protector con su Omega y su pequeño cachorro aún no naciente.

Aunque había algo raro, el vientre de Hoseok estaba más hinchadito de lo normal, incluso solo para ser un cachorro de dos meses.

Hoseok y Namjoon creían que era un cachorro grande como su padre Alfa y un poco gordito. La realidad era otra.

...

Namjoon daba pequeños y tiernos besos en el vientre hinchado de Hoseok.

—Koalita, creo que nuestro cachorro va a ser muy mimado si lo sigues mimando sin que aún haya nacido. —Dijo el Omega haciendo un puchero.

—Eso voy a hacer, voy a ser un Alfa que mime a su hermoso cachorro y a su Omega. —Dijo Namjoon viendo enamorado el vientre del Omega.

Hoseok solo soltó una risita tierna y Namjoon volvió a besar su vientre hinchadito, ambos esperaban con ansias a su primer hijo.

Namjoon estaba cada vez más apegado a Hoseok, la razón era muy lógica, su aroma estaba cambiando.

Si de por sí, el alfa amaba el aroma a fresas con chocolate del omega, ahora le encantaba más.

Era el mejor aroma que Namjoon podía oler en todo el mundo, leche de banana y fresa, aroma que el Omega ha estado adquiriendo durante el embarazo.

Namjoon estaba totalmente enamorado de su esposo y amaba a ese pequeño cachorro creciente dentro del Omega. Lo amaba sin poder verlo aún.

Hoseok acariciaba la cabellera rosada de Namjoon, si, rosada. No hace mucho el Alfa decidió pintarse también su cabellera de rosa pastel como su Omega.

Namjoon dejaba que su Omega lo acariciara mientras aún seguía repartiendo mimos en el vientre del Omega.

Ambos eran la mejor pareja de todas, tanto el Alfa como el Omega recibían amor del otro y entre ambos había respeto y más valores que hacían que su relación floreciera más y más en amor.

Namjoon era lejano a ser un Alfa normal, él era especial, así como decía Hoseok, su Alfa de rosa.

...

Durante todo el día, Namjoon estuvo mimando al Omega, todo lo que quería el alfa lo conseguía. Incluso si solo era un beso o un masaje en los pies.

Namjoon también ha estado aprendiendo muchas cosas por su cuenta, a cocinar era una de ellas, cocinar para su Omega y su cachorro lo haría demasiado feliz.

Pero ya era hora de una larga siesta, Hoseok a pesar de no hacer mucho en el día estaba agotado, sentir la pequeña vida creciendo dentro de él lo ponía un tanto cansado y agotado.

Y Namjoon, pues Namjoon se la pasó casi todo el día de un lado a otro, cocinando y corriendo de esquina a esquina, de tienda en tienda.

Ambos estaban cansados y se merecían esa siesta, así que a pesar de ser las tan cortas ocho de la noche, ambos ya estaban acostados en su cama matrimonial.

Una cama muy amplia incluso para solamente ellos dos, pero la razón de porque la habían comprado así era porque querían que un futuro, sus cachorros cuando sintieran miedo por alguna pesadilla, durmieran junto a ellos sin estar tan incómodos.

La espalda de Hoseok estaba chocando con el pecho bien trabajado de Namjoon, mientras esté rodeaba con sus brazos él cuerpo del Omega.

El alfa subió la camisa de su omega, dejando expuesto su vientre de piel lechosa, Namjoon no dudo en acariciar con sus grandes manos aquella pequeña casita donde estaban creciendo su cachorro.

—Nammie, durmamos, también tienes que dejar al cachorro descansar. —Dijo Hoseok sintiéndose cómodo por las caricias del Alfa.

—No, yo sé que mi bebé está acá adentro y necesita de los mimos de su papi. —Dijo el más alto con los ojos cerrados acariciando el vientre del Omega.

Hoseok solo suspiro y se acomodó más entre los brazos del alfa, mientras éste ya no solamente acariciaba el vientre del Omega. Ahora repartía besos en su cabellera.

Una hermosa pareja disfrutando del embarazo del Omega.