Cuando las cinco amigas ya estaban listas bajaron hasta la sala común de Ravenclaw. Las decoraciones eran azul con plateado y vieron el horario de la rubia
- Primera clase...pociones - dijo Amber
-¡NOOOOOOOOO POR QUÉ EL MUNDO TIENE QUE SER TAN CRUEL! - Protestó la metamórfaga
- ¿No te gusta pociones? el profesor Slughorn esta viejo pero es agradable estar con él - preguntó la chica de cabello azabache
- Liz no es que no me agrade el profesor sino que soy un peligro mortal en esa clase...y al frente de James Potter...sé buena y mátame - dice tapando su rostro con sus manos dramáticamente.
Salieron de la torre de Ravenclaw y se aventuraron por el castilo en camino al salón de pociones que se encontraba en las mazmorras. No había nadie, ni siquiera había venido aún el profesor. Se adentraron en el oscuro salón. Eran las primeras en llegar
- Si claro Liz, "se nos hace tarde" - Citó Maddi sarcásticamente
Poco a poco los alumnos tanto de Gryffindor como de Ravenclaw comenzaron a llegar
Entonces llegó. James Potter con su cabello negro, brillantes ojos marrones..."probablmeemte me veo como idiota" pensó la pelirroja incorporándose y volviendo a la razón. Él estaba acompañado de un amigo conversando de Quidditch; Evelyn se sonrojó y de la nada su cabello se tiñó del mismo rosa suave que aparecía a veces cuando veía a Potter. Se sonrojó aún más pero de verguenza, no le gustaba que le pasara eso porque se sentía un extraňa al ser metamórfaga, por eso siempre tenía el cabello pelirrojo. Controlaba ese acto reflejo (por así decirlo) de vez en cuando pero había momentos en que simplemente aparecía y ya no podía controlarlo. Por suerte nadie vió ni el cambio de color de su cabello ni la sangre que se le subía a las mejillas.
El profesor Slughorn estaba explicando como hacer una poción pero Evelyn no escuchaba. Observaba de vez en cuando a James, aunque hubo un fugaz momento en que cruzaron miradas. y ella se preguntó si la estaba observando. Ella era un caso perdido.
