𝐓𝐰𝐢𝐬𝐭𝐞𝐝 𝐆𝐚𝐦𝐞| ᴊᴊᴋ

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Al llegar a casa lo primero que hice fue quitarme aquella sudadera lanzándola hacia el sofá, apreté la bolsa entre mis manos y camine hacia las escaleras subiendo está con pasos pesados y cansados, ni siquiera estaba comiendo bien, los nervios no me lo permitían. Tenía tantas ganas de ir a la policía y decir todo pero y si me tomaban por loca? aquí la justicia sólo solía moverse con dinero.

Entre a mi habitación y mire a Angus en mi cama tomando una siesta. Me senté en la cama y abrí la bolsa sacando las cuerdas. Aveces no an tenido ese deseo de acabar con su sufrimiento y ese dolor? yo tenía tantas ganas de terminar con esta historia sin final, de arrancar este dolor. De vomitar cada vez que me miraba al espejo, porque me sentía sucia. Tocada, utilizada.

Yo no era así, amaba vestirme con colores pasteles, con vestidos, usar un lindo maquillaje y pasar mis días con Solar, ladeo mi cabeza para ver por la ventana y me parece de extrañar ver a solar en la puerta de su casa con ambas manos en los bolsillos de aquella chaqueta. Luego de unos minutos puedo ver cómo una camioneta se estaciona delante de su casa.

Eso me pareció más que extraño, y más extraño fue ver que ella subía a ese auto que nunca en mi vida había visto, era una camioneta de color negra con las ventanas oscuras. Al esta estar dentro la camioneta avanza hacia el final de la calle y doblar haciendo que la perdiera de vista.

¿En que estará metida Solar? me negaba a pensar que estaba en drogas o en algún otro vicio porque ella no era así, ¿qué somos ahora? aún seguimos siendo mejores amigas? ¿Por qué me abandonó como basura? ¿Por qué no sé nada de ella hasta ahora? me preocupaba ella.

Escuche la puerta de abajo ser tocada y eso me puso de los nervios, me acerqué a la mesita de noche y tomé unas tijeras para guardarlas en mis pantalones y luego bajar las escaleras con cuidado hasta llegar a la puerta.

–¿Quien es?–Dije segura de mi misma, si era él no iba a dudar clavar la tijera en su ojo.

–Soy Jimin.

Aquello me sorprendió de sobre manera y puedo decir que sentí mis ojos llorosos cuando lo vi delante de mi puerta con una pequeña sonrisa sin mostrar sus dientes, pude ver que su labio estaba roto y de este brotaba sangre.

–Jiminie...–No pude contenerme y me lance hacia él para abrazarlo llorando, él estaba bien, estaba aquí.–¿Dónde estabas?–Me aferré a él y pude jurar escuchar un quejido salir de sus labios.

–Sulli, estas bien, me alegra saber que estás bien.–¿Qué estoy bien? lo menos que estoy es bien, no me siento bien para nada y siento que mi cuerpo me exige descansar, hacer algo para parar con este sufrimiento.–Aún sigues igual de pequeña.–Ríe leve y me aparto, puedo ver la preocupación en sus ojos al ver mis lagrimas y rostro enrojecido.

–¿Qué te paso en el labio?–Él mira hacia otro lado y puedo verlo tragar mientras me mira nuevamente para sonreírme.

–Me mordí el labio con fuerza accidentalmente, soy un descuidado, no te preocupes estoy bien.

¿Por qué me mientes Park Jimin?