𝐓𝐰𝐢𝐬𝐭𝐞𝐝 𝐆𝐚𝐦𝐞| ᴊᴊᴋ

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–¡Se puede ir a la mierda!-Solar le saco el dedo del medio al profesor de matemáticas mientras arrancábamos en su carro, por fin, por fin podíamos decir que éramos libres, bueno por una parte si.

–Oh, por Dios ¿cómo pudiste decirle eso?-Dije un poco asustada,ella se colocó sus gafas negras y chasqueó la lengua, era toda una chica mala mientras que yo...bueno, no era capaz de hacerle daño a nadie.

Así de pura era.

–Se lo merecía, me hizo llenarle tres ejercicios esta mañana, solo porque le saqué la lengua-Se escucho indignada por aquello-Ese imbécil.

–Solar-Le reprochó cruzando mis brazos sobre mis pechos, ella me miró y hizo un amague de hacerme caer en sus encantos-Deja de mirarme así, me asustas.

–Oye, me ofendes-Rodé los ojos con diversión para después de algunos minutos soportando las quejas de solar llegáramos a nuestro vecindario.

–Te espero en mi casa-Dije bajando rápidamente de su auto para entrar a mi casa y encontrarme con Angus, como prometí de darle de comer le había dejado mucha comida y agua en la mañana, me serví un vaso de agua y mi mirada fue hacia el patio trasero de la casa.

Mamá era amante de las plantas y flores.

Al terminar de beber toda el agua subí corriendo las escaleras para quitarme mis tacones color celestes, amarró mi cabello en una cola de cabello, me encantaba mi cabello, era completamente negro y súper largo llegándome hasta la cintura, era suave, mis ojos eran de un color miel. Mi piel era pálida pero hermosa y suave a simple vista.

Algunos me decían Muñequita.

–Oh, Angus iré a una fiesta hoy, sabes? Jimin irá, debo de verme bien para él, estoy tan feliz de verle otra vez.

Jimin era un chico de un curso mayor al mío, iba junto a Namjoon y y Seokjin, tenía una bonita sonrisa, desde la primera vez que lo vi dije que era la más bonita de todo el planeta y su voz, por Dios, su voz era la de un ángel, era todo un caballero.

Me asomé por el pasillo ya que había escuchado pasos, inmediatamente me puse alerta, era una completa idiota al dejar la puerta abierta, me maldecí mil veces por ser tan tonta.

Angus estaba sobre mi cama, sin hacer absolutamente nada.

–Angus, hay alguien en casa-Dije con los nervios a tope.

El solo levantó la cabeza por unos breves segundos y nuevamente la bajo, si mamá lo dejó para que me protegiera, denme por muerta.

–¡Buh!-Jure que en ese mismo instante el corazón se me iba a salir por la boca, oh Jesús, Solar se rió al ver mi rostro, coloqué mi mano en mi pecho y respiré profundo, por poco me daba un ataque.

–No vuelvas hacer eso, por favor, por poco me da un ataque-Ella me abrazo y pude mirar que traía una gran bolsa negra.

–Está bien, discúlpame se me olvidó lo asustadiza que eres-Dejó un casto beso en mi frente para después tomar asiento al lado de Angus-Nos vamos a divertir mucho en esa fiesta.

Claro que tendrás tú diversión.