Me volví a enamorar

Contraataque a Konoha

Todos los Akatsukis se habían reunido en su guarida. Pain con una expresión neutral empezó a explicarles como se infiltraría en Konoha, sin embargo algunos se opusieron y se negaron a serir ese ridículo plan.

— Seria mejor matarlos de frente ¿Para que seguir un ridículo plan? –dudo un Hidan, jugando con su guadaña de tres hojas.

— No entiendo como puedes ser tan idiota... –confesó Kakuzu soltando un suspiro.

— ¿¡A caso quieres morir?! –grito Hidan poniéndose en posición de pelea.

Mientras tanto, Obito observaba como Deidara se burlaba de la patética pelea que estos dos estaban teniendo "¿Por qué me gusta observarlo?" se preguntaba de nuevo el de cabello oscuro, simplemente era agradable verlo pero ¿Por qué?

— Ya dejen de discutir, no podemos contraatacar sin idear un plan, seria estúpido de nuestra parte hacer eso –afirmo Pain observando de reojo a Hidan. 

— Creo que tampoco seria una buena idea infiltrarnos  –hablo el Uchiha de los akatsuki (recuerden que nadie sabe que Tobi es Uchiha, así que me refiero a Itachi).

— Es verdad, Itachi y yo ya lo hemos echo y es obvio que hacer el mismo plan dos veces no va a funcionar –complemento Kisame seriamente.

A pesar de ser cierto debían tomar el riesgo, de alguna forma tenían que conseguir información de la aldea de Konoha. Después de dar sus opiniones, decidieron raptar a algún genin y torturarlo para que les de la información que necesitan.

— Creo que el mas indicado para ir es Deidara –propuso Itachi. 

— ¿Y yo por qué? –pregunto el rubio un poco molesto.

— Porque aun no te conocen, además por tu aspecto, podrías hacerte pasar por una mujer que se ha perdido, de esa manera será mas fácil secuestrar a un idiota que te quiera ayudar –hablo el de cabello oscuro.

Este al escuchar la razón del Uchiha, se ruborizo y molesto se dio la vuelta para que nadie vea su sonrojo, aunque Tobi se había dado cuenta de esto, lo cual le provocaron celos.

— ¡Yo pido ser el esposo de Deidara-sempai! –exclamo Tobi alzando su mano y dando pequeños saltos.

Antes de que Tobi dijera otra estupidez, Deidara lo golpeó, haciendo que su compañero se estrellara contra un muro. El resto del equipo akatsuki miraron la escena aterrorizado y vieron como Tobi cayo al suelo luego de unos segundos.

— Esta bien... yo me encargare del secuestro, pero debo ir con alguien por si el plan se estropea –dijo el rubio que acababa de mandar a volar a su compañero.

— Esta bien ¿Quién quiere acompañar a Deidara? –pregunto Pain de forma neutral.

Aunque Tobi estuviera adolorido por el golpe, se arrastró y con dificultad alzo la mano, pidiendo ser el que acompañe al rubio, Deidara al ver que solo el quería acompañarlo se irrito, pero a la vez se puso feliz "¿Por qué tienes que ser tan idiota?" pensaba mientras se le formaba un leve sonrojo.  

Pues pusieron en marcha su plan y Konan se encargo de vestir a Deidara, la verdad no era necesario que usara un jutsu de trasformación, ya que este se parecía mucho a una mujer. Por otro lado Itashi se encargo de vestir a Tobi, sin embargo, este le pidió que no le quitara su mascara.

— ¿Por qué no quieres que te quite la mascara? ¿Tienes algo que ocultar? –interrogó seriamente.

— Lo que pasa es que... tengo una cicatriz que cubre la mitad de mi cara... –respondió para no levantar sospechas.

— Entonces ponte estas vendas en la cara –le dijo mientras le daba unas vendas y se iba.

Luego de que los dos estuvieran listos, Tobi se sonrojo al ver a Deidara. Tenia un vestido hasta las rodillas, su cabello estaba suelto y tenia una flor de papel al lado de su cabello, además que su cintura era mas notable. Deidara al ver a Obito también se sonrojo, pero le molesto ver que su cara seguía cubierta.

— ¡Deidara-sempai, usted esta hermoso! –exclamó, abrazándolo y agarrándolo de la cintura.

— Tú no aprendes ¿Verdad? –hablo Deidara mirando a Tobi con una sonrisa y el seño fruncido.

De nuevo Tobi se encontraba estampado en la pared, sin embargo, a Deidara le gusto que Tobi le hubiera dicho hermoso "Gracias Idiota..." pensaba el rubio fingiendo estar molesto.

— Ya dejen de jugar, es hora de poner en marcha el plan... –ordeno Pain.