Si pudiese cambiar algo...

Capítulo 6

En el carro hice 2 horas, me dijo que adentro de aquel bosque se encontraba una cabaña, durante el recorrido no la encontré, de hecho el lugar era demasiado solitario

El sonido del pasto siendo pisado rápidamente, me alerto, no lograba saber el origen del sonido, pero, sentía la sensación de estar rodeada

- Hey linda, ¿estás perdida? - dos hombres y una mujer salieron en fila - acércate un poco más, así podremos ayudarte

- .... - ¿debía confiar?, es decir se veían bastante sospechosos, analizándolos, estaban descalzos y tenían muy poca ropa, todos ellos tenían el mismo tatuaje, definitivamente no eran confiables

- ¿Qué haces aquí? - escuche la voz de Malia y sentí que tomaba mi mano, una extraña corriente atravesó la coronilla de mi cabeza hasta la planta de mis pies

- He venido por ti - conteste, inconscientemente apreté su mano, en realidad era bueno encontrarla, los tres sujetos aún seguían ahí

- Niña tonta - dijo y después se paro en frente de mi, sin separar su mano de la mía

- Soy mas grande que tú - susurre en voz baja, casi para mis adentros

- Pues no es muy inteligente de tu parte venir a un bosque que no conoces sola - comenzó a caminar y yo lo hice con ella - este lugar no es parte de su territorio - alzó la voz hacía los tres sujetos

- No lo es, pero en donde estamos parados si - apunto con la vista una línea de ¿sal? Que se encontraba en el piso - además podemos pasar por ahí, no hemos hecho nada malo

- Entonces crucen rápido - Malia camino hacia la dirección contraria de donde yo venía

- No seas así - hablo la mujer, que a simple vista podría tener la misma edad que ella - ¿por qué no jugamos como antes? - el cuerpo de Malia se tensó y un gruñido salió por lo bajo

- Largate de aquí - sentí un pequeño cambio en su voz

- Aunque también podríamos divertirnos de otra forma - los ojos de la chica se posaron en la parte íntima de Malia - has crecido y me imagino que también otra cosa, sería interesante probar entre dominantes, incluso podríamos invitar a esa chica - ahora ella me veía a mi

- Largate - La voz de Malia se volvió potente y gruesa

- Bueno, pero sabes que puedes ser parte de nosotros - tras decir eso se perdieron en el bosque

- Vamos por la camioneta - dijo después de un minuto

Tal y como dijo, eso hicimos, aparco en frente de una cabaña

El lugar no era grande y se veía bastante cómodo, di una vista rápida al lugar, había algo que empezaba a inquietarme

- ¿Cómo llegaste acá? - hablo ella

- La pregunta la debería hacer yo, primera deberías estar en la escuela, segunda, no veo a ningún carro o vehículo cerca

Es decir, en la camioneta me había tomado 2 horas llegar y si ella hubiera venido a pie hubiera tardado más, sin contar que el tiempo en que se fue de casa y llegué, no cuadraba para que ella llegará antes que yo, era obvio que ella tenía tiempo acá

- Antes vivía aquí - con una mano en la cintura y la otra la extendió para que viera el lugar - solo quería estar sola un rato

En trayecto de mi vista a la sala vi el libro que me quito el día anterior, era bastante llamativo, me acerque a el

- ¿Por qué quieres leerlo? - dijo impidiendo mi paso

- Leí el primer capítulo, la historia es buena

- ¿Te interesa esta clase de libros?

- No realmente, pero... Creo que es distinto a los otros, aunque al parecer a ti si - en lugar tenia varias huellas pintadas de lobos, incluso tenía varios libros relacionados a eso

- ¿Qué te hizo aceptar este trabajo?

- Si contestó sinceramente, ¿tú contestarías igual a la pregunta que haga?

- Me parece justo, tengamos el trato de pregunta por pregunta - alzo su dedo meñique y yo entrelace el mío - bien, empiezas cara de sapo - negué con la cabeza, pero perdería la oportunidad de saber un poco más de ellas

- En realidad, no quería hacerlo, es decir, no es mi fuerte cuidar a niños, aunque nunca imagine que cuidaría a un bebe de 17 años - su sonrisa se hizo presente - al final lo acepte porque en el fondo quería salir de la rutina, bien, sigo yo, ¿tú y Tania que son?

- Ella es mi Tía paterna - dio una vuelta en su lugar - ¿de dónde se conocen, tú y Tania?

- ¿Qué clase de pregunta es esta?, ¿por qué querrías saberlo?

- No es tu turno de preguntar, quedamos en que contestaríamos con la verdad

- Bien, si respondo eso, me dirás ¿que hacías en el psicólogo?

- Espera tu turno

- Bien, la conocí hace poco, en un bar... - la mire, parecía que no era la respuesta que buscaba o que quería saber - es tu turno

- ....En realidad, mis padres murieron cuando era una niña, desde entonces la Sra. Irma le preocupa mi salud mental, así que me obliga ir al psicólogo, al inicio odie la idea, pero ya conoces al anciano, se duerme y no es ningún problema escapar, así siempre me voy, solo esa vez me quede

- Entiendo - que manera tan extraña de conocerla, no puede evitar pensar en ese día

- Sigo yo - miro el techo y toco su barbilla, al regresar su mirada pregunto - aquella vez, cuando dijiste que te gusto una chica, ¿hablabas de Tania?

En ese momento fui salvada por el sonido de mi teléfono, tal parecía que el destino estaba a mi favor

- Lo siento, debo contestar - apunte a mi celular - Irma - dije, recordando la razón por la cuál estaba aquí, sin ganas conteste - hola

- Llegó en una hora para ver a mi niña, espero que este en su cama acostada

- Claro, aquí la esperamos - la anciana Irma colgó la llamada - necesitamos volver, pero me tomo llegar aquí dos horas, es imposible llegar en menos de una hora, además debes aparentar estar enferma

Un sonido sordo, un silencio y un fondo oscuro apareció

Abrí los ojos, tenia dolor de cabeza y estaba en mi cama, bueno en la que se supone que dormiría durante estos dos meses

- ¿Como he llegado aquí? - me levante y mire por la ventana, era de noche y el carro en el cual viaje estaba ahí e Ivan estaba saliendo de el, él nunca estaba a esta hora

Baje las escaleras para encontrarlo, pero al salir de aquella casa, no estaba, sentí la corriente de aire y me abrace

- No es bueno que estés afuera - Malia me había asustado

- ¿Como llegué aquí? - después del susto, pregunté

- Te desmayaste de la nada, balbuceabas muchas cosas, tal vez por eso colapsaste, así que yo conduje y te traje, ahora entra

Ella comenzó a alejarse

Toque mi cabeza y estaba una pequeña gota de sangre, ¿ella me había noqueado?, imposible, ¿cierto?, ademas ¿por qué haría tal cosa?

Mire aquella casa y luego mire a Malia alejarse y entrar, rayos ¿qué estaba pasando?

- Me estoy volviendo loca