Saiki Kusuo x Tú (Yaoi) || Inventé al novio perfecto

❥ •『 Kusuke, el amable científico maníaco 』• ❥

Una semana

Ya había pasado una semana desde que Kusuo no quiere que le de las "buenas noches", me pregunto si pudo leer aquel pensamiento y supo que mentí ¡sería injusto! Si pudo leer eso, debió leer lo otro.

Aquel día no pude dormir por la incertidumbre de ser tan estúpido, si...las personas que tienen la necesidad de mentir son aquellas que tienen miedo de la verdad. Saiki parecía molesto conmigo, aunque debí mentirle. Lo sentí tenso desde que empecé el empleo, lo lamento tanto. No obstante, según leí en los libros, las parejas que llegan a un grado de amor romántico se besan como nosotros, luego están las personas que salen por beneficio como aquel libro donde un hombre se casaba con una escritora, la hacia pasar por loca y se quedaba con sus millones ¿qué estamos haciendo, Saiki-san y yo?

—¡Maldito miedoso!

Me sorprendió mi vocabulario, nunca usaba malas palabras. Las malas palabras son para gente que no sabe hablar, ni comunicarse, parecido a los animales, o al menos eso le enseñó la jefa Kurumi.

—Pero aveces ella insulta a su marido —suspire cansado —¿Por qué el mundo es tan contradictorio? Hasta el clima, ahora llueve con sol.

De un momento a otro quedó quieto en las escaleras sosteniendo con rudeza la baranda, frunció el ceño quejándose por lo bajo.

—Otra vez un mareo.

—________, aquí estás —apareció Kuniharu —. Quería saber si ya ordenaste tu maleta, iremos a ver a mis suegros.

—Agradezco mucho que consideren llevarme, sin embargo —.queria decirlo sin sonar descortés —. No creo que sea apropiado que yo vaya con ustedes.

—Tn-kun, no te apenes porque no son tus abuelos. En parte lo son, ya eres de nuestra familia, muchacho.

—Ni siquiera me conocen, creo que podría tomar un tiempo y no quiero arruinar las vacaciones.

—Je...no te preocupes, ve cuando estés listo ¿si? —le guiñó un ojo.

—¡Estoy agradecido con su comprensión, jefe! —hizo una reverencia.

—Bueno, debo serlo —infló su pecho sintiéndose halagado, alardeando —.¡Debo ser un buen jefe de familia después de todo!

Se fue con el nivel de autoestima por los cielos con brillos y un color rosa rodeando su cuerpo.

En la planta baja de la casa comenzó a sonar el teléfono de línea, Kusuo atendió al ser el más cercano, la voz del llamante era reconocida.

—¡Hello! ¿Cómo estás? Yo súper bien gozando del oro y viendo que puedo comprar.

Se escuchó una voz más madura detrás: "Señor, no se desvíe del tema"

—Sisisisi. Me contó un pajarito que te quedarás solo una semana ¿quieres pasar el receso de verano en mi fabuloso avión privado? Necesito estrenarlo. Planeo ir a New York a comprar unas cosas y si gustas puedes venir —silencio de tres segundos —.Como acompañante, no es personal. Solo me aburren mis sirvientes, ellos no me entienden.

—¿Hablas con los pájaros?

—¡Ah! ¡¿Chico pobre taciturno, eres tú?! ¡Olvida lo que dije y dale el teléfono a __________! —sonó enojado y apenas de atrás —¡Echen más billetes a mi bañera!

—Tn salió a comprar al supermercado, lo siento —iba a colgar el tubo, pero lo que escuchó a continuación lo dejo helado y no comestible.

—¡Mentira, él esta bañándose!

—Espera un momento —intento no sonar como un homicida, pues si pasaba lo que pensaba tendría tremendas ganas de ir a una cacería para que Saiko fuera su presa principal —¿Cómo sabes?