¡¿Por qué tú?! (Lukloe) [TERMINADA]

XIX

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Allí estaba ella, con la vista fija en su móvil.

En el momento que alzó su vista, esbozó una sonrisa y no pude evitar sentir un cosquilleo recorrer todo mi cuerpo.

- que puntual - dijo ella divertida, checando la hora en su móvil - es increíble que sepas quién es - dijo emocionada - ¿Cómo lo supiste? ¿Te lo dijo o lo descubriste? ¿Desde cuándo lo sabes?

- okey, demasiadas preguntas - dije con diversión

- lo lamento, es que yo...- dijo ruborizada desviando la mirada

- lo sé - respondí - ¿Te parece ir a un lugar más tranquilo?

Ella se cruzó de brazos y alzó una ceja.

- tú quieres platicar, a mí me incomoda platicar en un lugar tan concurrido como lo es el centro comercial - expliqué

Chloe me analizó por unos segundos y luego asintió.

- como quieras, pero sin comportamientos extraños

- lo prometo

Ambos salimos por la puerta principal y nos dirigimos hacia el estacionamiento, donde tenía mi motocicleta.

Le ofrecí el casco de reserva y le ayudé a abrocharlo, para luego ambos montarnos  en ella.

Me estacioné cerca del Sena.

Ambos bajamos y comenzamos a caminar.

- entonces...- dijo ella luego de unos minutos de caminar en silencio - Viperion te envió un mensaje para mí

Asentí en silencio.

- ¿Por qué contigo? - cuestionó incrédula

- aunque no lo creas, Viperion y yo compartimos muchas cosas

Chloe alzó una ceja. No pude evitar soltar una pequeña carcajada.

- de hecho, le contaste del incidente del callejón

- si, somos compañeros de patrullaje - respondió ella - sólo le dí un pequeño resumen de lo sucedido durante esa noche

- también me dijo que le diste mucha importancia - dije en tono divertido, expectante de su reacción

Ella abrió sus ojos de par en par y su rostro se tornó de un rojizo intenso.

- ¡Q-qué ridículo! - dijo cruzándose de brazos y volteando hacia el lado contrario - ¡Totalmente ridículo!

No pude evitar soltar una pequeña carcajada ante aquella reacción.

- ¿Sabes? - dije acercándome un poco más ella - aunque no muchos lo crean, eres una linda persona, Chloe

Ella volteó a mirarme, sorprendida. Sus mejillas seguían igual o más sonrojadas que antes.

Mi vista se dirigió a sus labios, otra vez sentía esas intensas ganas de apoderarme de ellos.

Mordí mi labio inferior y comencé a acercarme lentamente hacia ella.

- ¡Corran!

Pasos acelerados se hicieron presentes, una multitud temerosa corría en dirección contraria a nosotros y a unos metros, lo que parecía un niño vestido completamente de negro, quien lanzaba rayos por su brazo izquierdo y atrapaba a sus víctimas dentro de esferas completamente negras.

Chloe me tomó por sorpresa, tomó mi brazo y comenzó a correr en dirección a un pequeño callejón

- debes esconderte - me ordenó mientras se cercioraba de que no hubiera nadie para transformarse - ya sabes quién soy, no tiene caso buscar otro lugar