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Hoseok era alguien que no tenía tantos amigos, era muy introvertido y muchas veces distante con las personas, pero cuando quería algo o a alguien estaba dispuesto a demostrarlo, el cambio que de hizo Hoseok fue para bien, quería seguir a delante con su vida después de un discurso de una de sus madres. Comprendió que no se debía de sentir deprimido por un chico que probablemente sea uno de los x que pasarían por su vida, buscaría la manera de olvidar a Min Yoongi.

Fue así como llego a la escuela cambiado completamente, un nuevo estado de ánimo,  nueva forma de pensar, y muy probablemente el autoestima hasta los cielos.

Las clases pasaron de forma normal, pero recibió una carta en su casillero, era raro que recibiera algo.

“Hoseok, soy Taehyung, puedes ir al parque conmigo esta tarde, 6:00p.m. en los columpios, gracias! ”

Taehyung era un chico de su salón, solo lo buscaba para hablar de trabajos o cosas de la clase, nunca antes habían hablado de otra cosa y la conversación no duraba tanto. Así que accedió a ir cuando terminarán las clases.

El día transcurrió de una forma normal, había estado evitando a Yoongi siempre que tenía que pasar a un lado de el no siquiera lo miraba, le dolía saber que está era su realidad ahora pero tenía que aceptar, nunca tendría nada con el.






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Y ahí estaba, esperando a que Tae viniera al lugar acordado, estaba sentado en los columpios viendo para todos lados, no tenía algún contacto con el y se le hacía difícil poder darle una llamada o mensaje, solo escucho como alguien se acercaba corriendo, pensaba que Taehyung al fin había llegado pero se sorprendió mucho al ver a la persona que menos esperaba. Tenía golpes en su cara y con maquillaje tenía escrito la palabra “Gay” en la frente, sus labios mal pintados y polvo en la cara mal puesto, era toda una humillación para el.

— ¿Qué mierda? ¡Yoon!

— V-Viniste... – decía con agitado, había corrido mucho y su cuerpo dolía – P-Perdón por tardar, es que Y-Yo...

— ¿Tú fuiste quien mandó ma carta?

— S-Si, pero-

— Respira, tranquilízate...

Agarro aire e intento calmar su respiración, sabía que no era la mejor impresión, estaba maquillado de una forma muy vergonzosa y cruel, su padre lo había maquillado después de haber Sido golpeado.

— ¿Qué te pasó? ¿Por qué estás así?

— Es que... – Suspiro pensando en que decir, como comenzar su disculpa y aclaración – Antes de eso... Yo... Lo siento, fui todo un idiota contigo

— Yoongi...

— En realidad siempre me gustaste pero no podía corresponder o aceptar alguno de tus regalos por mi padre y hermano

— ¿Ellos te hicieron esto?

— Si... Esto era lo que vivía cada vez que me descubrían con algún regalo tuyo, siempre intenté esconder bien los regalos y comer lo más que pudiera de los pastelitos que me dabas...

— Así que si los comías – una pequeña sonrisa apareció en los labios de Hoseok, por alguna razón se sintió bien al saber que la harina no se desperdicio del todo.

— Si, me gustaban mucho, cocinas muy bien

— ¿Por qué nunca dijiste algo? Esto es maltrato...

— Tenía miedo... Hace unos momentos reporte esto a la policía, mi padre se entero y se enojo – soltó una pequeña risa al recordar la cara de su padre al decirle lo que hizo – Mañana ya no podré asistir a la escuela, solo quería decirte esto y que supieras que lo siento, no me siento bien por lo que te hice

— ¿Te irás?...

— me mandarán a una casa hogar, no podré salir hasta que tenga la mayoría de edad

— No te vayas, puedes vivir conmigo! Mis madres no tendrán problemas por eso

Se quedó mirando a su menor por un momento, aún con las cosas imperdonables que le hizo quería ayudarlo, ¿Eso era amor? Estaba seguro que si, pero debía irse, no tenía opción.

— No, Seokie... Yo estaré bien, tal vez algún día podamos encontrarnos de nuevo e intentar algo

— Pero no tiene que ser así, podemos estar juntos ahora, no guardo rencor... Yo me puedo encargar de ti

— No necesito que lo hagas

Ambos se miraron, a pesar de no hablar tanto se sentía como si ya se conocieran de toda la vida, como si fuesen importantes para ambos.

— ¿Puedo besarte? – Pregunto Jung acariciando los labios mal maquillados de su amado.

— S-Si...

Se acercó a sus labios lentamente, los juntaron dándose por fin un beso, tanto tiempo para que llegara este momento que tanto deseaban. Los labios de Hoseok eran muy suaves, los de Yoongi parecían estar resecos pero igual disfruto, era lo que quería por meses, poder tener alguna oportunidad, ahora... Parecía que estaba pero se negaba a aceptar y eso le dolía.

Una vez se separaron sonrieron, los labios de seok estaban un poco manchados del labial, acaricio sus labios intentando quitar aquel color rojo que había sido el causante.

— Debo de irme, tengo que ir a hacer papeleo

— ¿Nos volveremos a ver?

— No lo sé, iré a buscarte cuando pueda

— Ve y limpia te, no creo que sea cómodo ir por las calles con eso que causó tu padre

— Ya lo quitaré

Beso por última vez los labios de Hoseok y sonrió, se fue corriendo por dónde vino, tenía que ir a casa. Pudo sentirse un poco mejor respecto a la tortura de meses que pasó, lo que no sabía es que sería la última vez que vería a Min Yoongi.

¿Cuántos años tenían que pasar para volver a obsequiar pastelitos?

Pastelitos || YoonSeokDonde viven las historias. Descúbrelo ahora