- ¡Yoonie! te hice pastelitos
- ¡Deja de darme cosas!
El cree que no lo quiere, se esfuerza mucho para que sus regalos terminen siendo tirados o rotos, pero no sabe que oculta algún secreto que es la razón por la cual no lo a aceptado.
→ YoonSeok...
Intento tras intento, cada vez se volvía más ingenioso y creativo la forma en la que entregaba los detalles que con tanto amor hacía. Abrió su casillero y coloco un muffin con chispas de chocolate y una cartita muy bonita que el mismo decoro la noche anterior. Cerro el casillero y corrió al suyo, de tras de el iba caminando unos metros Yoongi, abrió su casillero y se encontró aquel muffin que se veía tan apetitoso, sonrió y agarró la cartita comenzando a leer.
“Gigi! Te hice un muffin, espero que te guste porque lo hice con mucho cariño, se que me odias pero siempre intento alegrarte el día, espero que en algún momento podamos ser amigos o algo más... O solo me conformaré con tu amistad! Te quiero mucho.
Con amor: Hobi. ”
Sonrió y la escondió entre sus libros del casillero, agarro el muffin y comenzó a comerlo con rapidez, sabía muy dulce, de verdad le encantaba como cocinaba pero un fuerte dolor en su cabello lo hizo caer y que soltara sus libros y su muffin. Su hermano molesto pateó el pan y miro a su hermano menor, este solo miraba con lágrimas aquel pan que no había terminado de disfrutar.
— ¿Otra vez aceptando regalos de ese enfermo? ¿Acaso quieres que papá te interne en un manicomio?
— S-Solo es un muffin...
— No, no debes recibir regalos de ese idiota, dile que te deje de mandar cosas!
— Lo siento...
— ¿Vas a llorar? ¿También eres un marica?
No dijo nada, sus lágrimas salieron sin algún control, que clase de humillación estaba recibiendo de su propio hermano.
— Que estúpido...
Solo se fue, su hermano Min Jaebeom se los ser muy cruel, se parecía mucho a su padre y le aterraba cuando se enojaban.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Era un mar de lágrimas imparable, se sentía tan pésimo al saber que nunca tendría el cariño o alguna respuesta positiva por parte de su mayor, tanto se había esforzado por dos meses que ya no le quedaban ideas para postres, mañana sería su último intento, tal vez alguna receta de su madre funcione.
Se puso manos a la obra, saco todos sus recortes y eligió los más bonitos, se puso hacer más así formando una cajita echa de papel de colores, brillantina y dibujos, había una carta donde dejaba todos sus sentimientos y afecto hacia el chico que tanto cariño le tenía, dos horas le invirtió a ese trabajo que no hizo su tarea. Una vez terminó bajo a la cocina y busco el libro de recetas que tenía su madre, pensó en que hacer, habia muchas cosas ricas y que probablemente le gustarían pero eligió un pay de queso y mermelada de fresa, ese a diferencia de otros se lo entregaría en persona.
— Quedó muy rico!
Dijo probando las partes que habían sobrado, ya quería dárselo, se comenzaba a hacer muchas ilusiones muy bonitas, había que esperar al día de mañana... Solo así saber la realidad que muchas veces nos quita las ganas de seguir con nuestros planes.
