Supongo que seré un Rey Demonio

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- Mmh~ - Rias suspira a mi lado mientras sigue aun dormida. Debe seguir cansada por lo de anoche, así que me moví con cuidado de no despertarla y salí de la cama.

Golpe seco

Me levanté con intenciones de darme una ducha, pero un fuerte mareo me golpeó y terminé estrellándome contra el suelo.

-¿T/N? - el ruido del impacto bastó para despertar a Rias quién, con ojos adormilados, recorrió toda la habitación desde la cama, buscándome.

- Yo... Estoy aquí... - no se por que, pero me sentía extrañamente agotado y mareado.

- ¿Estás bien? - ella saltó de entre las sábanas y corrió hacia mi (cojeando un poco) - ¿Qué sucedió? - colocó sus manos sobre mi para ayudarme, pero las apartó al instante - ¡Estás ardiendo!

Junto con la voz de Rias, las notificaciones del sistema aparecieron en mi vista.

Condiciones cumplidas.

Metamorfosis realizándose.

Estado:
15% completado.

¿Qué demonios significa eso? ¿Así se siente convertirse en semidragón?

Ni siquiera podía pensar con claridad, ya que la fiebre me hacía perder la razón por momentos.

- Rias... Llama a Sona... Creo que esto... tiene que ver con la maldición... Quizás ella sepa algo.

Eso es lo último que recuerdo de esta mañana.

Vaya forma de empezar un domingo, ¿no?

De todos modos, ahora desperté en una habitación que no conozco. La cama en la que estoy acostado es enorme y todo está decorado con muebles de la época victoriana, o eso creo, la verdad no se nada de eso. Son muebles antiguos.

A cada lado de mi cuerpo, puedo sentir la presión de un par de personas usándome como almohada.

A mi derecha, se encuentra Rias, como es usual, desnuda.

A mi izquierda... ¿Sona?

La presidenta del consejo estudiantil, Sona Sitri, se encuentra dormida junto a mi.

No lleva sus lentes puestos (obviamente) y una leve mueca de preocupación y vergüenza se puede notar en su rostro. Algo me dice, que no está tan dormida como parece.

Está vestida con el uniforme de la academia y se aferra fuertemente a mi brazo.

Aun tengo algo de mareo y puedo sentir el frío tacto de un paño húmedo sobre mi cabeza.

*Click*

La puerta se abre y alguien entra.

- Veo que ya despertaste - reconozco la voz como la de Grayfia, la sirvienta que narró el Rating Game.

- Acabo de hacerlo.

- Será mejor que descanses un poco más - ella me aconseja mientras humedece la compresa de mi frente - Les explicaré todo cuando te mejores. - luego, la temperatura en el cuarto bajó al punto en que Rias y Sona comenzaron a temblar y te acurrucaron más contra mi - Y también, Sirzechs-sama querrá saber la razón del cojeo de Rias - susurró en mi oído antes de retirarse.