La Sinfonía de lo Divino; Larry Stylinson

Capitulo 17; Juicios finales

Segundo sábado.

Ese día desde temprano la llovizna no cesaba, no era fuerte pero tampoco había indicios de que parara pronto, debido al problema con el agua que había entrado en los salones, Zayn no tuvo reunión del club de ajedrez y algunas otras actividades extra fueron suspendidas.

Louis, Liam y Zayn estaban en la cafetería, en una de las mesas largas, cada uno tenía un sándwich de jamón y queso partido a la mitad en un pequeño plato y una taza de café con leche, Zayn intentaba enseñarles a jugar ajedrez.

Su tablero de madera desdoblado en medio de la mesa, Zayn sentado solo, de un lado y Louis y Liam del otro lado.

Todos vestían sudaderas que les quedaban bastante grandes y de hecho los tres tenían puestos sus pantalones de pijama de franela, Liam hasta tenía una bufanda amarilla alrededor de su cuello y Zayn sus pantuflas negras, Louis si tenía puestos unos cómodos vans rojos.

—Entonces, si hago esto...—Louis hablaba con un pequeño bocado de su sándwich en la boca, aun masticaba y hacia ruiditos, movía la pieza del alfil, su color era el blanco.

—No hables con la boca llena—dijo Liam—es asqueroso.

Louis tragó el bocado.

—Perdón mamá—él enfatizó la última palabra.

—No, te dije que el alfil solo se mueve en diagonal—Zayn estaba un poco impaciente, pues les había repetido las formas de movimiento muchas veces.

—Me rindo.

—No seas un berrinchudo Louis.

—Creo que el ajedrez no es lo mío, me quedo con el piano.

—Bien, es turno de Li entonces.

Liam tenía su taza de café espumoso y le dio un sorbo muy largo, la espuma de la crema le formó unos bigotes blancos.

—A mí no me veas, sabes que no me tienes paciencia.

Zayn suspiró.

—Bueno, tenía una buena intención con ustedes.

—Y hablando de intención...—comenzó Liam—no creo que quieras que te acompañemos en la noche, ¿o sí? —habló dirigiéndose a Louis.

—¿Qué tiene que ver con las 'intensiones'?—preguntó Louis.

—No es nuestra intensión estorbar.

—Ustedes no estorban, pero si no quieren ir, no los obligo.

—¿Estarás bien yendo solo?—Zayn le preguntó.

—No deben cuidarme tanto, estaré bien.

—Styles estaba muy raro ayer, mira, si algo no te parece, nos escribes un mensaje, ¿bien?—Zayn estaba hablando completamente en serio.

—Lo prometo si eso los hace estar tranquilos, pero nada va a pasar.

—Esperen—Liam ya había terminado su taza de café—no me quiero quedar solo en la noche.

—Liam—Zayn lo regañó—antes de que Louis llegara tú siempre estabas solo en las noches.

—Pero ya me acostumbré, no quiero quedarme solo.

—Yo puedo quedarme contigo, cállate.

—Bien—Liam sonrió.

—Que fácil eres.

—Que molesto eres.

—¿Cuándo es la boda? —Louis solo los veía divertido, los dos le sacaron la lengua al mismo tiempo.