Capítulo 8: Enfrentamiento

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Ya había pasado una semana, y Kamukura se negaba a entrar en
aquella aula. Cabía la posibilidad de que fuera porque después del poco tiempo que estuvo ahí se aburrió y decidió no volver más, pero el pensamiento intrusivo de que fue por el "pequeño" descubrimiento de días atrás era la verdadera razón, que había sido su culpa. El echo de que no volvió a verlo en la academia lo delataba bastante, y por más que lo aceptaba y apoyaba desearía que entrara en ese momento, no por él ("no era alguien que mereciera afecto, mucho menos de alguien como él") si no por el insistente omega que lloriqueaba y gruñia constantemente, haciendo que poco a poco se contagiase con la mimsa actitud. Estaba pensando seriamente en ir a buscarlo el mismo, y por un instante sintió al ronroneo contento de su omega, bufó exhausto.

Sentía que no había nada que pudiese hacer, acudiendo a un doctor especializado en omegas con la finalidad de preguntar sobre algo que pudiese ocultar a su interno y no volver a verlo más a él ni a este proble (era lo mejor para los dos, quería pensar) termino enterándose que era prácticamente imposible hacerlo ahora, si verdaderamente el había sido reclamado significaba dos cosas; la primera era que era prácticamente imposible deshacerse de él ahora ya que no solo era uno, eran dos y la segunda era que era nuevamente imposible que intentara tanto él como la otra persona desemparejararlos, ellos sabrían sus intenciones al instante y no lo permitirían. Era bastante estresante hasta cierto punto. No supo que hacer.

Dio un suspiro cansado, cuando la puerta resonó en el silencio del aula, voletando a ver extrañado al ver de quién se trataba.

El azabache había entrado al aula así sin más, como si ni hubiera estado ausente la semana completa y no pudo evitar sentirse nervioso, las clases habían terminado y todos se habían ido, por otra parte el se quedó perdido en sus pensamientos. Se preguntó la razón del porque la llegada de Kamukura sabiendo que ya era hora de salida, estaba seguro de que lo sabía a la perfección.

El repentino pensamiento de que había venido por él lo invadió, no sabría decir si fue pensamiento propio o de su mismo omega desesperada al finalmente verlo después de días. El impulso de saltar a sus brazos lo invadió, sabía la causa y se preguntó si él sentiría lo mismo. No se permitió mucho ese pensamiento. De todas formas nunca le preguntaría si eso era así.

Probablemente.

Dejando sus tontos pensamientos de al lado observó a Kamukura situarse enfrente de él, observándolo detenidamente. "Entonces si fue por mi" desearía que no hubiera emanado ese aroma dulce al sólo pensarlo, para su desgracia los bloqueadores tampoco funcionaban tan bien como antes.

-Komaeda- la profunda voz de Kamukura lo trajo devuelta a la realidad, tragó duro, sintió a su omega revolotear. -¿Pasa algo Kamukura?- pregunta intentando soñar lo más educado y calmado posible, principalmente por el constante revoloteo en su interior.

-Creo que sabes las razón- comenzó, el de cabello blanco reprimió un jadeo. Así que si era por eso. -Sígueme, hablaremos en un lugar más privado.- Casi pudo sentir su voz, parándose lentamente para comenzar a seguirlo. Estaba más nervioso de lo que debería.

Su omega seguía revoloteando.

Los días posteriores a la visita al doctor habían sido casi insufribles, en alfa interno no había parado de exigir a Komaeda y eso le pedía pensar correctamente

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Los días posteriores a la visita al doctor habían sido casi insufribles, en alfa interno no había parado de exigir a Komaeda y eso le pedía pensar correctamente. Necesitaba un plan sobre lo que le iba a decir a el de cabellera blanca, sabía que a partir de ese momento su vida iba a cambiar en absoluto, y no sabía como sentirse al respecto.

Años de ignorar a la gente a su alrededor para evitar ser cortejado le estaban afectando ahora, por eso mismo todos esos días había recolectado información de tienda te s precisas sobre omegas, alfas, reclamaciones y demás. Una de las cosas más importantes que descubrió fue el echo de que al ser tu interno una parte de ti, sus emociones te terminaban afectando sus propias emociones y la chispa de interés invadió sus ojos.

Esa era probablemente la mayoría de su actuar, el porque estaba ahí buscando esto en lugar de simplemente ignorarlo hasta encontrar como poder desenlazarlos como probablemente lo hubiera echo antes, no admitiría que en lugar de eso lo que estaba buscando era para entenderlo mejor (ademas del interés de como se comportaría con algo así, podía notar cambiaos muy ligeros que apenas eran a notables en sus pensamientos con Komaeda, y quería saber cómo afectaría más adelante. En realidad probablemente lo sabía, pero no lo sentía y eso era lo importante) después de una investigación de días decidió finalmente ir a ver a Komaeda y hablar al respecto.

Ya había pasado la hora de salida pero aún así se dirigió hacia él aula, si Komaeda no estaba ahí entonces se dirigiría a los dormitorios omega, aunque sería mucho más molesto. No era algo prohibido que otras castas visitaran dormitorios que lo les correspondían, pero el echo de que fuera un alfa lo cambiaba todo. No había problema si eras algún familiar o ibas junto a otras personas, pero si estabas solo la gente podría asumir que estés cortejando al omega e incluso que ya son compañeros, algo componente molesto. Había elegido esa hora en especial porque simplemente no tenía ganas de lidiar con sus compañeros esa vez y esperaba no tener que toparse con alguno, se movió hacia el aula.

Para su alivio Komaeda estaba ahí, solo. Parecía perdido en sus pensamientos y se preguntó porque, pero no tenía el tiempo para eso. Se lió dirigió hacia su silla y pareció salir de su trance, para entrar en otro. -Komaeda- le habló, finalmente sacándolo de ahí, el le preguntó la razón y pudo ver como se venía nervioso "así que ya lo sabías, como era de esperarse" pensó y dijo. -Creo que ya lo sabes- hizo una pausa esperando su reacción. -Ven, sígueme. Hablaremos en un lugar más privado.- Y con esto comenzó a caminar con el chico más alto detrás.

No perdió la repentina calma que lo invadió al sólo estar cerca de él.

No perdió la repentina calma que lo invadió al sólo estar cerca de él

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Holaa ¿cómo están? ¿me extrañaron?

Creo que les debo una disculpa jajaj esta vez tarde demasiado en actualizar, pero tengo mis razones! Y aquí estas:

Como dije en el anterior capituló, mis calificaciones bajaron ybastante y tuve que reponerme de esto, durando la semana completa. Cuando finalmente salí de esto Wattpad decidido dejar de funcionar. No sé si a alguien mas le pasó pero solo se negaba a cargar y la verdad me daba bastante miedo intenta actualizar porque sentía que en cualquier momento se borraba. La verdad sospecho que tenía algo que ver con mi antiguo celular porque después de eso decidió morirse y no prendió mas, pero el disco el echo de que haya pedido de regalo uno nuevo, que es el que tengo ahora. Fue una suerte que me acordara de la contráela jaja

Pero ahora, todo parece estar bien y probablemente todo seguirá como antes. Así que ¡nos vemos el próximo viernes! No este, el próximo.  Espero verlos aquí otra vez!

Limerencia | KamukomaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora