Los días pasaban y yo me sentía mas atraída por Lucas, joder, enserio que lo hago.
Cada momento lo recuerdo tan bien, su sonrisa, sus ojos verdes, sus labios sobre los míos encajando a la perfección como si fueran creados para estar conectados de una manera tan especial.
Cada noche trataba de buscar una explicación de por qué me sentía tan bien con sus caricias, con sus abrazos, con su compañía, con el jodido hecho de respirar me hacia sentir tan bien y rápidamente caí en sus brazos, en su encanto, en sus palabras y si, me enamoré pero no me sentía mal por eso.
De un pronto a otro mis pensamientos giraban entorno a él y era todo lo que necesitaba.
-Señorita Cedeño, ¿por qué está tan hermosa?- Escuché esa hermosa voz ronca y a la vez suave detrás de mi, enserio este hombre me traía loca.
-Tonto- Reí para darme la vuelta y toparme con esa sonrisa que impulsaba a querer seguir viviendo -¿Cómo te fue ayer con tu familia? Te extrañé- Tomé su mano para entrelazarla.
-Oh si, la salida con mi familia, ya sabes aburrida- Desvía su mirada mientras hablaba, me parecía raro su comportamiento pero no creía que fuera tan importante -Yo también te extrañé y se que era nuestro día para vernos pero de ultimo momento me dijeron y no quería que hablaran mal porque no fui y eso, ya sabes-
-Lo entiendo, Martinelli- Sonreí rodando los ojos mientras me acercaba a sus labios pero rápidamente lo esquiva.
-Debo ir a clases, te veo luego ¿Si?- Sonríe un poco y se despide sacudiendo su mano mientras camina.
-Claro- Terminé respondiendo en un susurro porque ya había desaparecido entre la gente.
Bien, eso fue extraño y confuso para mi ¿Qué había hecho mal? No lo entendía, nunca se había comportado así.
Genial, ahora me sentía de la mierda por una estupidez, estoy odiándome mucho en estos momentos sintiendo un dolor en pecho y no sé por qué llega a afectarme tanto ese comportamiento.
***
Por un momento mi cama se volvió mi terapia, el querer dormir para olvidar el dolor, el querer llorar y sacar todo lo que está muy en el fondo que no nos atrevemos a sacar.
Nunca hablo de mi, de mis dolores internos y mis cargas con las que lucho día a día para sobrevivir a la vida que me tocó. Siento que le quita el tiempo a las demás personas haciéndolas sentir lastima por mi, es una mierda sentirme como me siento con mi familia y con mi vida tratando de seguir adelante pero recordando una y otra vez sus palabras...
-No creas que eres hermosa Yalik, eres tan horrible que hasta podría decir que te pareces a esos duendes feos que hay, solos mírate, eres tan gorda pero tan gorda que no podría diferenciar entre un cerdo y tú, aunque bueno, los cerdos son mas lindos que tú-
Tomé un marcador negro y caminé hacia la pared escribiendo las palabras en grande "Gorda, horrible, fea, duende..." Después de todo no debía olvidar lo que era ¿no? Debía tenerlo muy claro.
-Eres una maldita basura, creo que mejor deberías suicidarte por que si fuera tú no soportaría ser como tú, eres gran fracasada sin ningún amigo ni un futuro en el puedas ser feliz, al menos te hubieran abortado ¿no?-
Cada palabra debía ser tan visible que no tuviera otra opción para ver.
-Nunca lo olvides, naciste por error Yalik-
Sentía como me faltaba el aire y mi mirada se tornaba negra. Lo que me faltaba un ataque de ansiedad, mi día si que estuvo de la mierda pero por Lucas trataría de ser mas positiva. Es como una luz en mi vida.
***
Aquí podemos conocer un poco mas de Yalik, sus traumas, sus sentimientos, sus cargas, etc.
Cortito pero aquí andamos, que lo disfruten
Siksi.
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Mi ultimo recuerdo
Teen FictionSolo escribía posada en aquella cama cada momento desde que llegó aquél chico, seria su ultimo y mejor recuerdo...