Amor y cárcel

7

Los silbidos se escucharon en el pasillo cuándo aquel recluso de cabellos azabache pasó. Kaito irritado le mostró el dedo medió a los bastardos y siguió su camino ¿Acosó no habían visto a alguien con el cabello recogido? Con el calor del verano decidió atar su cabello en una coleta alta, hasta el peinado que usa es sexualizado siguió su caminó esta el área de descanso, encontró o Endrio y o Johnny Jugando dominó, se acercó a la mesa frunció sus labios y se sentó sobre las piernas de el de piel negro, Endrio

—¿Puedo Jugar?—Preguntó

Ambos abrieron sus ojos sorprendidos—Si, pero hay bastante espacio no tienes que sentarte en mis piernas—Dijo Endrio–si Andreano nos encuentra en estas y se va a enojar

Kaito puso los Codos sobre la mesa—esa es la idea, quiero ver su reacción

Johnny movió las piezas del dominó desarmando el Juego—Yo me voy a mi celda, no quiero ver a mi feje cuando vea esto, ya vi como se pone y da miedo—miro al negro de afro y este hizo una expresión de pánico—No tengo nada que ver aquí

—¡Ayúdame!—Dijo Endrio—quítamelo de encima

Johnny miró a ambos lados, tomó al Japonés de la muñeca y lo empujo alejándose de el de afro—no seas caprichoso Kaito, si quieres darle Celos a Andreano, hazlo con un guardia si desaparece sera un placer para todos
Kaito se aferró a Johnny dejando escapar al moreno
—No, no y no—puso las manos en el aire—¡no, yo no, te Juró que si el feje me ve así contigo, me Cago en los Pantalones!

—¿Yo qué?

Johnny volteó al escuchar la voz familiar del rubio—¡Puedo explicarlo señor, el vino a mi, yo no Hice Nada!

El italiano vio a Kaito abrazando a su amigo, reaccionó indiferente—tenemos que reunirnos

Kaito se apartó de Johnny, al ver que Andreano ni si quiera Se molestó

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Hay un punto ciego en la habitación donde están los ductos de ventilación y las calderas de la calefacción para el Invierno

—¿Creó que es de una Puerta?—Dijo Johnny tomando la Llave dorada

—No me digas—Dijo el de afro sarcástico

—Debe ser de una de las oficinas—Dijo Andreano mirando a la mujer guardia

—No lo se, no me dejan entrar a las oficinas de arriba, ni si quiera puedo ver a el alcaide—Ella Sonrió falsamente al ver el Japonés—Apropósito la coleta alta te sienta muy sienta muy Bien, no esperaba volver a verte zorra traicionera

—El traje de guardia te sienta mejor aurora y tampoco esperaba volver a verte cuñadita—Respondió hostil

—Podrían dejar de discutir pasivo agresivamente trato de pensar—Dijo el rubio Callando los a los dos, observo la Llave

—Tal vez sea la llave de un Sótano—Dijo Johnny

—¿En prisión?—Dijo Endrio—debe venir de una de las oficinas de arriba

—El alcaide es un anciano esta apuntó de pensionarse, si me dan tiempo tal vez pueda acceder a alguna información—Dijo la guardia. Tomó el comunicador en su bolsillo—Necesito regresar a mi puesto, están llamando a los reclusos a el Comedor

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Seis guardias rodearon al elegante hombre vestido elegante, su cabello peinado hacia atrás y dos grandes anteojos, observo atentamente a los reos

—Un gusto señores—Dijo el alcaide—Un gusto, soy el hijo del señor Catalan el anterior alcaide, yo voy a tomar su lugar. Las cosas van a cambiar un poco por aquí—Le dio una mirada despectiva a Andreano. El recluso mas peligroso su padre le había hablado de el, no planea ser un gallina como su padre, sabe perfectamente que el es la autoridad, el que debe ser el primero en la Jerarquiza carcelaria es el alcaide, no un reo—A Los presos que tenga una condena indefinida y aquellos que por sus delitos tenga cadena perpetua, no podrán salir al comedor ni afuera de sus celdas los días festivos, domingos y sábados

—¿No comeremos?—Alzó la mano un recluso

—Comerán, sus comidas estas seran llevaran a sus celdas por los reos que trabajan en la cocina, no podrán salir de sus celdas esos días, y si se les encuentra fuera, serán Llevados a confinamiento—Se escuchó un quejido colectivo de protestas de los reos—Pero no todo son malas noticias—Miro hacia la mesa de al frente sus palabras pararon, se cortaron al ver a Kaito—¿En que estaba, disculpen?

Andreano hizo una mueca de desagradó ¿Se cautivo por su belleza? Lo había observado por mas de seis segundos delante de todos. Se cruzó de Brazos, un tic se formo en su ceja izquierda

—Viejo cálmate —Johnny tocó su Hombro

—Acaba de mirar a Kaito con esa mirada lasciva—Dijo irritado—Fue muy evidente fueron mas de seis segundos

Andreano miro a Kaito, este ni si quiera noto la mirada del alcaide en el estaba muy concentrado mirando a el vacío

—Las visitas seran reducidas esos dias tambien—Prosigue

Endrio metió las manos en su afro frustrado—¡No, lo único que me mantiene cuerdo son las Visitas de mi mujer!

—Abra, escases de productos en la tienda, no podrán conseguir mas chocolates, el dinero de eso sera invertido en la seguridad de la cárcel—Prosiguió el alcaide

Kaito frunció sus Labios

—Por protocolo todos, tendrán que afeitarse, y por seguridad cortarse las uñas

Johnny llevo las manos a su cabeza—Ni mi Bigote—Dijo con Pesar

Al alcaide siguió —Ahora se revisaran las cámaras 4 veces al día, abra revisiones matutinos y nocturnas de las celdas, es mi deber asegurarme que este Lugar este libre de drogas y sus derivados, mas Importante quiero que respeten estos nuevos reglamentos