𝕭𝖔𝖗𝖚𝖙𝖔: 𝕰𝖑 𝖉𝖊𝖘𝖙𝖎𝖓𝖔 𝖉𝖊 𝖑𝖔𝖘 𝖔𝖏𝖔𝖘 𝖆𝖟𝖚𝖑𝖊𝖘

Capitulo 1

Uzumaki Boruto se había embarcado en un viaje sin retorno, actualmente se encontraba en la aldea de Konoha, sin embargo no es la aldea de Konoha que él conoció, ni siquiera es la aldea de Konoha cuando viajo en el tiempo junto a su maestro en un pasado.

Normalmente la aldea está protegida por un campo creado por el clan Yamanaka, tiene dos formas de pasar desapercibido de esta, la primera es suprimir su chakra hasta tal punto que su chakra no sea reconocible, es una propiedad que adquirió al ser actualmente en parte un Ōtsutsuki, sin embargo si por pura casualidad lo atraparan tendría que dar explicaciones y prefiere no hacerlo.

Otra opción era entrar como un visitante, esta opción era la más sencilla y la que uso, solo tuvo que decirles a los guardianes de la puerta que no tiene intenciones hostiles hacia la aldea y solo es un visitante sin un tiempo de estadía fijo.

—Donde estas... —Boruto murmura por lo bajo mientras activaba su dōjutsu para rastrear a su padre.

—Te encontré...—Boruto se dirigía a la ubicación de la versión infantil de su padre

[...]

Uzumaki Naruto se encontraba corriendo con lágrimas en los ojos, como siempre fue rechazado, él solo estaba interesado en una máscara y lo que recibió fue que lo empujaran con algo parecido a una patada y la mirada de desaprobación y odio de la gente cercana al lugar.

«Solo quiero irme a casa» Uzumaki Naruto corría lo más rápido que podía ignorando los murmullos y las miradas de la gente que lo veían con rechazo.

—Auch —Naruto chocaba con un extraño, nunca lo había visto en la aldea, era un chico rubio de ojos azules que vestía una capa negra, su ojo derecho parecía tener una cicatriz.

—¿Estas bien? —El desconocido le extiende la mano.

—Eh — Naruto dudaba en si aceptar la ayuda —Sí —Naruto termina por aceptar y toma la mano del desconocido —Gracias por la ayuda, dattebayo —Naruto sonríe, hace tiempo que nadie lo trataba así.

—¿Estabas llorando? —El desconocido pregunta con cierto tono de serenidad.

—No es nada, dattebayo —Naruto se secaba las lágrimas de su cara.

—¿Por qué corrías? —

—Quería ir a mi casa —Naruto dudaba en responder —Perdóname, no te había visto, dattebayo. —

—Tranquilo, es mi culpa, estaba en tu camino —El desconocido responde algo avergonzado y con una sonrisa en el rostro.

—Déjame compensarte —El desconocido le propone —¿Tienes hambre? —El desconocido le pregunta

—Esto yo... —De repente el estómago de Naruto lo traiciona y ruge debido al hambre.

«¿Por qué debe de sonar en este momento?» Naruto miraba a su estómago algo avergonzado

—Eso es un si —El desconocido sonríe

«Es una lástima que aún no se hayan inventado las hamburguesas en este tiempo» Uzumaki Boruto pensaba con algo de tristeza, es verdad que trajo consigo ingredientes y una mini cocina eléctrica portátil y podría hacer una, pero aun así sentía tristeza de estar en una época donde no existían manjares como ese.

«Tocara invitarlo a comer Ramen entonces...»

—¿Quieres comer Ramen?, yo invito —

—¿En serio? ¿Lo dices en serio? —Naruto pregunta emocionado

—Claro —El desconocido asiente

—Vamos —El desconocido toma de la mano a Naruto, este solo se siente avergonzado, nadie lo había tomado de la mano antes