Lucharé por ti 》Hanker

Capítulo 12

Veinticuatro horas después...

-Repasemos. Llevo el pasaporte, el cargador del móvil, la cartera, las llaves...—comenzó a revisar todo lo que llevaba en el bolso.

-Nunca entenderé porque las mujeres llevan tantas cosas en sus bolsos. Sólo falta que os llevéis la casa entera.—rio ante su propio comentario.

-Todas las cosas son necesarias y nunca es suficiente.—aclaró.

-Mujeres.—bufó.

-Hombres.—imitó su tono de voz burlesco.—Ven aquí.—abrió sus brazos.

-Ya deja de acosarme.—accedió al abrazo y sonrío cuando estaba entre sus brazos.

-Si te encantan mis abrazos, deja de lloriquear.—golpeó levemente su espalda y rio.—¿Sabes de lo que me acordé hoy?—se separó un poco para mirarlo.

-¿De qué?—preguntó curioso.

-Del día en el que nos disfrazamos de pequeños de fantasmas.—respondió.—Aún me acuerdo de la cara que puso mi madre cuando vio que rompimos sus sábanas favoritas.—volvió a reír.

-Nunca olvidaré ese día.—se rio también.

-Disculpa gato.—se separó y buscó en su bolso el móvil que había comenzado a sonar.—Enseguida salgo.—dijo y colgó la llamada para guardarlo de nuevo.—Ya están aquí para recogerme. Vamos.—abrió la puerta y salió a la entrada.

-¡Hello!—saludó Ari desde el coche.

-¡Amiga!—corrió a abrazarla.—¿Dónde está mi pequeña?—preguntó.

-Está en el coche. Se quedó dormida por el camino pero justo ahora acaba de despertar.—le abrió la puerta.

-¡Hande!—alzó sus manitas para que la tomara en brazos.

-Mi hermosa Luna.—la tomó.—¿Cómo está mi princesa favorita?—besó su mejilla.

-Hande, mila gato.—señaló a la puerta.

-Si, es gato. ¿Quieres ir con él?—preguntó mientras se acercaba a él.

-¡Chi!—exclamó alegre.—¡Gato!—extendió sus brazos.

-Hola princesa.—la tomó en brazos y sonrió.—Oye, ¡estás muy grande ya!—dió pequeños saltitos haciendo que riera.

-Nena grande.—lo miró.—Diente.—se señaló su boca.

-Que diente tan lindo te está creciendo.—acarició su cabello.

-Hande, tenemos que irnos.—Avisó Ari desde el coche.—¡Vas a volver a ver a tu gato!—comenzó a reír.

-Ya voy pesada.—bufó.—Vamos mi Luni, tenemos que irnos.—extendió sus manos haciendo que la pequeña se fuera con ella.—Dile adiós a gato.—movió su manita en forma de despedida.

-Adiós gato.—se despidió.

-Nos vemos pronto hermosa.—sonrió.—A ti te voy a echar demasiado de menos. Voy a extrañar a mi ángel.—se acercó a ella y dejó un pequeño beso en sus labios.

-Yo también te voy a extrañar.—lo besó.—Pero sólo serán unos días y antes de que te des cuenta estaré a tu lado.—acarició su mejilla.—Te amo mi vida.—sus ojos brillaron al ver lo que provocaba esa palabra en él.

-Yo te amo más.—volvió a besarla.—Te amo con locura.—sonrío.—Cuando llegues llámame para quedarme tranquilo.—le pidió.

-Lo haré. No te preocupes mi vida.—revolvió su cabello.—Nos vemos en dos semanas.—caminó con Luna en sus brazos hasta el coche.—¡Debes ganar la pelea!—gritó de lejos.