Epílogo

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5 años después
Ya han pasado 5 años de que Simón me pidió matrimonio, en este tiempo he sido la mujer más feliz del mundo a su lado, veo como en el jardín corre mi hija Claire junto a mi esposo Simón, nunca creí que en mi vida podría ser tan feliz como ahora, recuerdo todo lo que tuvimos que pasar para poder estar juntos, como mi hermana se comporto todo por querer ser ella el centro de atención, aún recuerdo el día que me avisaron de su muerte porque era el único familiar vivo que tenía, después de un año en la cárcel no lo soporto más y se suicido con el cordón de sus zapatillas, cuando la encontraron fue demasiado tarde par ella, ya no había nada que hacer, me dio pena porque era mi hermana, pero al recordar todo lo que hizo, no puedo evitar guardarle rencor aunque han pasado 4 años no la he podido perdonar, veo como mi esposo viene corriendo hacia mi
- Como estas amor. – dice tocando mi panza que es de 8 meses de embarazo.
- Todo bien ha estado tranquilo creo que debe estar durmiendo. – digo riéndome cuando siento una contracción, y veo el líquido escurrir por mis piernas miro asustada a mi esposo. – todavía no es hora, faltan 3 semanas no puede nacer todavía. -  Simón me toma en brazos y llama a Claire para que venga, cuando llegamos al hospital me ponen rápidamente en una camilla, la doctora comienza a hablar.
- Preparen la sala de parto ya tiene los 10 centímetros de dilatación. – me asusto, pero empiezo a pujar, duele horrores definitivamente creo que esta será la única vez que tendré un bebé, el dolor es demasiado fuerte, siento que me voy a partí en dos no recuerdo que de Claire fuera así, cuando siento el llanto de mi bebé me relajo, pero por muy poco tiempo porque siento otra contracción, miro asustada a la doctora cuando ella con una sonrisa dice. – vamos Mariana puje viene otro.
- Pero como otro si era solo uno
- A veces existen fallas en las ecografías, puja debemos sacar a su bebé. – luego de pujar bastante por fin tu ve a mi bebé, la doctora feliz dijo. – son mellizos una niña y un niño ¡felicidades! – Simón se acerca a mi con una cara de felicidad y me da un beso en la frente para luego decirme.
- Gracias, amor, no sabes lo feliz que me haces gracias por nuestra familia, me haces el hombre más feliz del mundo.
Y es así como logré ser feliz nunca pensé que yendo a la boda de mi hermana conocería al amor de mi vida, eso es lo único que le puedo agradecer a la vida, soy una mujer feliz y completa no me arrepiento de nada en estos momentos, se que tuvimos momentos los cuales no fueron los mejores, pero hoy soy feliz de poder tener a mi familia, porque por fin descubrí el verdadero significado de familia y de amar de verdad, nada se compara con la satisfacción de tener a mi esposo e hijos al lado.

Cuando el Amor llegaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora